Punto De Quiebre

Capitulo 20. Simplemente se resignó...

—Siendo las tres de la tarde, del día viernes diecinueve de mayo del presente año, comparecen quienes acreditan ser Scott Raxton y Vaegan Bloodaxe, al objeto de contraer matrimonio civil en virtud de la autorización recaída en mí. Quiero hacer constatar que se han cumplido todas las prescripciones legales para la celebración de este matrimonio civil, sin que en la audiencia se haya presentado ni denunciado impedimento ni obstáculo para esta celebración matrimonial. Así que, a este punto, paso a dar lectura a los artículos del 66 al 68 del Código Civil, a los cuales, a partir de ahora, están impuestos a seguir, una vez firmada el acta.

Scott, al escuchar esto, suspiro pesado listo para escuchar artículos civiles que claramente no se seguirán en el matrimonio. Firmarán un acta y prometerán hacer lo que dicen los artículos y luego se olvidarán de ello…

—Artículo 66; Los cónyuges son iguales en derechos y deberes. —Claro, hubo un disgusto por parte de Scott, quién no está de acuerdo ante tal estúpido artículo, él tiene más poder en tierra de Nyx. Sabe que estos artículos están hechos para personas normales y que están enfocadas en labores domésticas y personales y no aplican para los alfas, y que esto es una mera formalidad. Pero aun así le molesta escuchar toda esa faramalla de mierda… —Artículo 67; Los cónyuges deben respetarse y ayudarse mutuamente y actuar en interés de la familia. Y por último, él; Artículo 68; Los cónyuges están obligados a vivir juntos, guardarse fidelidad y socorrerse mutuamente. Deberás, además, compartir las responsabilidades, el cuidado y atención de ascendientes y descendientes y otras personas dependientes a su cargo.

Vaegan en todo el discurso del fiscal, ni se movió, ni hizo ninguna expresión. En su rostro solo había una mirada fija en el papel que debe firmar para poder ser el esposo oficial de Scott Raxton. Sus manos incluso hasta pican de la emoción por firmarlo.

—Hemos llegado al momento clave de este gran día. Así pues, les pregunto; Scott Raxton, ¿Quieres contraer matrimonio con Vaegan Bloodaxe, y efectivamente lo contraes en este acto?

Scott, en su voto de silencio; solo asintió con la cabeza aceptando a Vaegan como su legítimo esposó. El fiscal continuó ahora preguntando a Vaegan:

—A su vez, pregunto al general; Vaegan Bloodaxe ¿Quiere contraer matrimonio con Scott Raxton y efectivamente lo contrae en este acto?

Vaegan Bloodaxe sostuvo una sonrisa triunfal y dijo:

—Acepto…

—En virtud de los poderes que me confiere la legislación de la manda Nyx, yo los declaro unidos en matrimonio. A continuación, vamos a proceder a la firma del acta matrimonial…

Frente a ellos, se colocó una gran cantidad de hojas repletas de artículos y cláusulas a seguir; más bien, un contrato. El acta matrimonial se había modificado con la intención de hacer todo de una vez; matrimonio poligámico, firma de sucesión de tierras, pacto de bienestar común, unificación de ejércitos y muchas, muchas cláusulas más. 

Así que por ello Vaegan estaba tan emocionado por poner su firma en ese papel. En cuanto firmara, el pedazo que les habían “robado” finalmente sería devuelto y estaría permanentemente unido a Scott Raxton, tendría hijos de su sangre y todo lo que quiera será suyo.

La cúspide de un poder empleado por una manada pacifista ahora también estaba en sus manos. Es una sensación tan excitante que le pone la piel de gallina; desde el cuero cabelludo, hasta la médula…

Pero, por el lado de Scott, es todo diferente. No había ni una pizca de emoción en su decisión y en cuanto se le dio el contrato, dudo un segundo incluso para tocarlo.

Se tuvo que repetir en su mente; “Es por mi madre, es por su bien, solo por ella…” Para no sentirse tan miserable. Fue un momento difícil, dónde tuvo que poner, la salud de su madre, sobre su felicidad.