Capitulo 44. El lamento de una sombra

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Cada vez que su cuerpo recibía un golpe emocional tan duro que su mente lo obligaba a disociar, pensaba en Andrey.

Cada vez que sentía frío, pensaba en Andrey.

Cada vez que sus entrañas eras aplastadas y saqueadas hasta el punto del sangrando, pensaba en Andrey.

Cuando tenía miedo, cuando tenía hambre, cuando sentía que no había esperanza, pensaba en Andrey…

Una y otra y otra y otra vez, Andrey, era quién predominaba en su mente.
Pensaba que en algún momento, incluso si era imposible, lo vería llegar para sacarlo de ese infierno, de la misma manera en la que lo hizo aquella vez.

Ahora, justo como siempre, lo ve claramente en sus sueños, él, como es costumbre, le sostiene, protegiéndolo entre sus brazos, hundiéndolo en su pecho, transmitiéndole seguridad.

Scott, sintiéndose seguro y en paz, simplemente cerro los ojos y disfrutó del momento que su cerebro le arrojaba para protegerlo de la miseria.

Se encuentra tranquilo, su cuerpo no duele, no sufre, no siente, no se quiere despertar.

Quiere permanecer allí, escuchando los latidos de ese corazón, que en su cabeza, si laten por él.

[Pum, pum, pum, pum]
Los latidos son constantes, ligeramente irregulares y rápidos. Como si estuviese nervioso…

Se sintió especial. Se sintió tan especial, que deseo quedarse allí para siempre…
Podía jurar que sentía que entre esos brazos nadie podía hacerle daño, pero, jamás pensó que el dueño de esos brazos pudiera hacerlo.

—“Pensé que eras diferente”

Los latidos se detuvieron por completo al instante y no solo el corazón de Andrey se detuvo, sino también el de Scott.

De manera inexplicable, por primera vez, la representación idealizada de un recuerdo perdido que Scott tiene en su cabeza; hablo.

En cuanto abrió los ojos, palideció.
Su entorno ha cambiado, ya no están en su habitación, sobre su cama, abrazados… Ahora están de pie, de vuelta en el bosque, frente a frente.

—"¡Ah!" —Jadeo asustado, preso del pánico que llegó a su cuerpo de golpe. Le empujó con fuerza, quitándoselo de encima, retrocediendo dos pasos antes de que el soldado le jaloneara del ante brazo, deteniéndolo.

Sus ojos se abrieron de par en par al ver qué las manos que le sostenían hace un par de segundos con delicadeza, ahora ejercen un fuerte y doloroso agarre.

Observó detenidamente el agarre sobre su brazo y sintió nervios, por más que forceja, no puede zafarse… Intenta retroceder nuevamente, pero esta vez Andrey lo jala hasta tenerlo nuevamente, cara a cara.

—“Eres la peor mierda de ser humano sobre la tierra”

[Bam]

Fue arrojado al suelo sin cuidado alguno. Scott, desde el suelo, con el miedo a flor de piel, trato de retroceder solo para ver como la escena se repetía frente a sus ojos… Andrey encima de él, a punto de levantar su puño en el aire.

—“¡No fui yo!” —Grito, poniendo las manos frente a su rostro para evitar ser golpeado —"¡Tienes que creerme!”

—“Debí haberte matado”

—“Andrey... Andrey... "—Suplico mirándolo a la cara, teniendo la ligera esperanza de que quizá esta vez, solo por esta vez, se detuviera.

Verlo allí, así, otra vez… Solo hace que su corazón duela.

—“Tienes que creerme”

—“Cállate, tus putas lágrimas no cambiarán nada”

—“¿Eh…?” —Incrédulo, llevo su mano a su rostro, justo debajo de sus ojos, solo para percatarse de qué efectivamente; está llorando.

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