My Pequeña Obsesión

Chapter 25

Jamás había visto a alguien mentir tan descaradamente, en ese momento, justo ahí atada a esa silla, se me ocurrieron mil maneras diferentes de hacerle pagar a Becky todo lo que estaba haciendo.

-No más preguntas -dijo su abogado.

-¿Usted tiene preguntas señorita Phasuk? -le preguntó a mi abogada.

-Sí, si las tengo -dijo Nila y se puso de pie. Caminó hasta donde estaba Becky- Señorita Armstrong, ¿Por qué cree que la señorita Waraha la atacó? - le pregunto.

-Mmm, porque es un lunática -dijo ella

-Bien, según sé, la señorita Waraha tiene un excelente historial psicológico. No tiene ningún problema mental -dijo y giró para mirar a los miembros del jurado -Entonces queridos miembros del jurado, ¿ustedes creen que una persona va a golpear a otra porque si, y sobre todo, apenas teniendo la mínima relación social como la misma señorita Armstrong lo mencionó? Algún motivo tuvo que tener, ¿Cuál fue el motivo señorita Armstrong? - Becky guardó silencio y compartió una nerviosa mirada con su abogado -No más preguntas a la señorita.

-Puede retirarse, señorita Armstrong-le dijo el juez - Señorita Phasuk, ¿tiene algún testigo?

-Si -dijo. Se giró a vernos - Llamo al estrado a la señorita Charlotte Austin.

Todo el mundo se giró a verla. Con cuidado ella se puso de pie y caminó de la misma forma hasta el lugar en donde antes estaba Becky. El mismo hombre del libro se acercó a ella.

-Jura decir la verdad, y nada más que la verdad -le dijo.

Ella apoyó la mano derecha sobre el libro.

-Lo juro -dijo. Nila se acercó hasta ella.
-Bien señorita Austin, ¿Usted conoce a la señorita
Armstrong? -le preguntó.

-Si -dijo ella asintiendo.

-¿Podría decirnos hace cuánto?

-Conozco a Becky desde hace ya dos años aproximadamente, la conocí en unas vacaciones que hice con mi padre.

-¿Podría decirnos como es ella?

-Ariana es una chica dulce, cuando quiere. Atenta y respetuosa -habló ella. ¿Acaso eso iba a ayudarme a salir? - Pero tiene un serio problema, es demasiado celosa...

- ¿Celosa? -Preguntó mi abogada y sonrió -¿Podría decirnos un poco más de eso?

-¡Objeción! ¿Qué tiene que ver la vida personal de la señorita Armstrong con esto? - dijo su abogado.

-No da lugar -dijo el juez y miró a Nila-Prosiga.

-Becky y yo comenzamos una relación amorosa algunos meses después de conocernos, antes de eso todo era perfecto, hasta que comenzaron a aparecer los celos. Pero no eran celos normales, eran celos posesivos y hasta irracionales. Aguante esa situación, porque de verdad la quería, y quería intentar algo con ella. Hasta que hace unos meses decidí terminar con la relación, sus celos me estresaban..

-Entonces ¿usted nos está diciendo que la señorita
Armstrong sufre un grave problema de celos?

-Si -dijo ella asintiendo.

- ¿Usted conoce a la señorita Waraha? -le preguntó.

Ella posó su mirada en mí. Y había algo en ella que no había visto antes.

-Si -contestó.

-¿Puede contarnos sobre eso?

-A Engfa la conozco hace poco más de un mes.
Ella y yo vamos a la FIU, al igual que Becky.