Como una intuición de sí misma Charlotte se puso frente a mí protectoramente. La miré y no pude evitar sonreír divertida.
-¿Qué necesitas Becky? -le pregunté sin dejar de sonreír.
Ella no dejaba de mirar a Charlotte. Estaba esperando a que le dijera algo sobre lo que acababa de ver.
-¿Por qué la estabas besando?
Charlotte me miró y luego volvió la vista a Becky.
-Creo que debemos hablar Becky, pero no aquí -le dijo ella. Entonces dejé de sonreír y me puse algo nerviosa. ¿A dónde quería hablar si no era ahí?
Charlotte se giró a verme -Debo hablar con ella, Fa.-¿No me estarás pidiendo que te deje sola con esta idiota? -le dije en voz baja.
Ella levantó su mano y acarició mi rostro.
-Es solo por unos minutos. Iré a hablar con ella, le contaré todo y volveré a buscarte.
-No -sentencié.
-Por favor, amor. Es mejor si yo hablo con ella y dejamos las cosas bien claras.
-No confío en ella, Char.
-Pero si confías en mí, ¿verdad? -me dijo mientras me miraba fijo a los ojos.
-Si -dije soltando un suspiro. Ella sonrió y se puso en puntas de pie para besarme cortamente.
Giró y miró de nuevo a Ariana que se veía a punto de colapsar de la rabia.
-Vamos -le dijo ella y comenzó a caminar.
Becky la siguió y pasó a mi lado en forma retadora.
-Le tocas un pelo y te mato -le susurré cuando chocó su hombro contra mí.
Becky sonrió como si acabara de escuchar un chiste. Y a mí me encantaría ver su cara cuando Charlotte le diga: Becky, Engfa y yo estamos saliendo. Lo lamento idiota, pero nunca sentí nada por ti además de lastima.
Reí por lo bajo y decidí ir a caminar un poco para no pensar tanto en que dejé sola a mi novia con su ex. Pero eso... no es malo, no lo es. Ella misma me ha dicho que nunca la amó y que solo la aprecia como a una amiga. Pero Becky, ella es una maldita infeliz.
-Engfa, ¿podemos hablar? -me giré a verla al escuchar su voz.
-Pichy-le dije y tragué un poco de saliva. ¿Qué es lo que quiere ahora? -¿Hablar? ¿De qué?
-Engfa... no sé si tú te has dado cuenta de que yo..
estoy enamorada de ti.Cerré los ojos fuertemente y maldije para mis adentros. Lo que menos quería escuchar en este momento era la declaración de amor de Alexa.
-Pichy yo... -intenté hablar pero ella se acercó y apoyó uno de sus dedos sobre mis labios. Al instante me alejé.-Déjame hablar -me pidió. Asentí.
-Voy a escucharte, pero evita tocarme... por favor - le dije. Ella asintió.
-¿En qué andas? -me preguntó.
-¿Con qué? -le pregunté.
-Con tu vida... hace como una semana que no te veía. Y no lo sé... ya no sales, ya no estas faltando a clases, ya no eres la misma de siempre.
-Cambié -le aseguré.
-¿Cambiaste?
-En realidad me cambiaron.
-Charlotte, ¿cierto? -dijo mientras sus ojos se humedecían un poco.
Sentí un nudo en mi estómago. Culpa. Me siento mal por ella, me siento por mal haberla ilusionado.
Y ahora que amo a alguien se cómo se siente aquello.
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My Pequeña Obsesión
RomanceAunque es un desastre, Engfa Waraha tiene todo lo que a los 19 años se puede desear. Su vida es aparentemente perfecta, y siempre consigue lo que quiere a toda costa. Hasta que la conoce a ella. Tan difícil. Tan hermosa. Tan decidida a no dejarse ca...