Mientras los días y semanas de los chicos iban pasando con altibajos, los de Koney fueron de mal en peor pues a parte de verse sola en una casa tan grande, el agobio por todos los negocios fue en aumento.De repente el estar rodeada de riqueza y poder no la llenaba pues le faltaba lo más importante, sus hijos.
Al contrario que Korn, ella los necesitaba para algo más que llevar las riendas del negocio, ya que necesitaba sus besos y abrazos, los cuales durante años le habían sido negados.
Ni siquiera tenía la pintura, esa bella expresión de sus inquietudes, la cual siempre se le había dado muy bien pero ahora le era imposible.
En las horas del día, esta intentaba sobrellevarlo todo con la cabeza alta pues no podía mostrar debilidad ante sus empleados y demás miembros del clan mafioso tailandés.
Las noches en su contra, eran una tortura, mientras no se terminaba la botella de whisky, su única vía de escape desde que había regresado a esa casa.
Cada noche, a trompicones llegaba a la habitación, la cual había sido su jaula durante años y admiraba uno a uno sus cuadros, mientras de sus ojos brotaban lagrimas y su estómago recibía más alcohol del que podría soportar.
Luego se sentaba en su taburete y cogía el pincel y la paleta de colores en sus manos, sin embargo no podía hacer nada a derechas, ya que su mano temblaba, pintando rayones como los de un infante.
Frustrada se levantaba y rompía lo que sus manos alcanzaban a sujetar, hasta que ya no quedó nada que tirar en la estancia y entonces comenzó a destrozar una a una sus pinturas.
Korn volvía a su mente para atormentarla y por unos instantes pensaba en la posibilidad de hacer realidad la mentira que este había contado a todos.
Totalmente ida, devastada y hundida en su propia desgracia, una de esas noches, esta dio con el bote de pastillas con las que Korn la había adormilado durante años y en su desesperación pensó en tomarse el bote entero y acabar con todo.
Sin embargo era demasiado cobarde para quitarse la vida estando aún lúcida, por lo que finalmente se volvió a la habitación que había pertenecido su padre y se tiró en la cama.
Una mañana en la que esta llegó a la empresa, en la sala de reuniones, una vez más los jefes de los clanes la estaba esperando.
Tras resoplar con resignación, Koney entró y fue increpada para que dejara el puesto pues no la creían capacitada para ejercer el bastón del poder, luego de varios contratos con los coreanos y rusos.
Koney estaba furiosa pues aunque lo sabía, no quería reconocer su fracaso y mucho menos dar el poder, que su familia había tenido durante años a otros.
Tras discutir largo y tendido con ellos, esta terminó por sacar su pistola y encañonar al más molesto de los miembros.
...-Tranquila, no necesitamos llegar a esto-Le habló Kamon, el más anciano-....podemos hablar las cosas sin ponernos nerviosos. Solo decimos que al menos Korn y su hijo sabían lo que se hacía.
-¡Estoy harta de deciros que no dejaré el mando!, ¡Ese hijo de puta solo supo robarme durante años!, ¡Maldito el día que mi padre confió en él!- les gritó- ¡Joder, si mi padre estuviese vivo, me repudiaría por ser tan tonta y haberle dejado llegar a donde llegó!.
-Tu padre era muy blando para este negocio y por eso terminó así. El amor por vosotros fue su perdición- Masculló otro de ellos con una media sonrisa.
-¡No te permito que hables mal de mi padre!, ¡maldito desagradecido! -gruñó esta furiosa mientras movió su pistola y apuntó a este-... él dio su vida por la compañía...Si no llegara a ser así, todos seguirías siendo los mismos muertos de hambre que eráis antes de uniros a él...
Tras terminar la tensa reunión, la mujer salió de allí y se metió en su despacho, donde en un arrebato tiró con todo lo que había encima de su mesa.
-¡JODER!, ¡MALDITA SEA!
Koney sentía su sangre hervir y sus sentidos nublarse, entonces volvió a salir y seguida de su guardaespaldas, subió al coche para visitar la tumba de su padre.
Allí era donde algunas veces se derrumbaba y lloraba tendida encima del frío mármol, ante la confusa mirada de los demás mundanos que visitaban el cementerio.
Luego de eso, volvió a la oficina algo más tranquila sin embargo, al llegar al aparcamiento y salir del coche, alguien disparó desde la distancia a su guardaespaldas y mientras ella se agachó tras verlo desplomarse, alguien la agarró y le tapó los ojos y la boca.
Resultaron ser que unos encapuchados, los que la abordaron y tras darle un golpe en la nuca, la cargaron y la metieron en una furgoneta negra, según testimonio de los testigos.
El secuestró salió en las noticias de todo el país, aunque Los chicos no se enteraron hasta pasados dos días, cuando Mix y Tim regresaron a la isla con la noticia, luego de navegar a la costa por provisiones.
Los guardaespaldas lo habían escuchado en un informativo que estaban pasando en ese momento en la televisión del pueblo y rápidamente subieron a la lancha y cruzaron el mar con suma rapidez.
Rápidamente New y Gun quisieron regresar, así que Tay y Off y los tres guardaespaldas se fueron con ellos, mientras Mix se quedó con Earth.
Tras un viaje muy intranquilo, al fin llegaron a la mansión, donde interrogaron a todas las doncellas y entre lloros una de ellas les confesó que le habían ofrecido mucho dinero por darles información de los movimientos de la mujer.
Muy molestos, sus hijos la increparon hasta sacarle toda la información, por lo que supieron que habían sido hombres de Kamon, el más firme rival de su padre.
...-Debemos actuar con cautela o la matará sin remordimientos- habló Tay-Estoy seguro que esto es por el sillón de mandato. Llevamos años lidiando con él.
-Voy a matarlo, dime dónde vive ese cabrón -El mayor estaba furioso- puede que no sea la mejor madre pero es nuestra familia.
-Debemos llamar a Vegas y los demás. Cuantos más seamos mejor, porque esa casa es un búnker- sugirió el mediano de los Jumpol.
New asintió conforme y a continuación encerraron a la doncella en una de las celdas.
-Deberiamos matarla, se lo merece.
-Lo sé amor tranquilo. Primero rescatemos a tu madre, luego veremos qué hacer con ella.
-Yo quiero ir con vosotros-dijo Porchay tras ellos.
-No, nada de eso-se opuso rápidamente Off llegando también- tú te quedarás aquí. Nosotros iremos.
-Pero...
-Gun, es muy peligroso y necesitamos estar centrados y coordinados. Yo no podré si tengo que estar pendiente de tu bienestar, lo entiendes ¿verdad?
El más joven miró a su hermano quién le devolvió la mirada.
-Si hermano, mejor quédate, es peligroso.
Este asintió con pesar.
-Está bien pero tened mucho cuidado.
Los tres se miraron y rápidamente echaron a correr.
-Cojamos más armas, las necesitaremos.
-------------
No olvidéis votar y/o comentar
ESTÁS LEYENDO
9. Offgun : In love Terminada
Fiksi PenggemarOff Jumpol, es el tercer hijo de un jefe de la mafia y también el más curioso y misterioso de los tres hermanos. En busca de la verdadera razón, de que su padre haya contratado a un simple camarero para proteger a su hermano mediano, el cual está al...