LALI
Discutir con Peter tenía que ser mi última preocupación, pero hacerlo lo quiera o no me movilizó para mal, ¡que tema de mierda el tema de la autoestima!
Acaricié la carita de mi hija que con los ojos cerrados sonrió cuando lo hice, no pude evitarlo, yo también sonreí.
-¿Vamos a comer?-le hablé y la cargué en mis brazos, me recosté en la cama matrimonial para darle el pecho, miré alrededor mío y me sentí algo sola, tomé aire y soltó un suspiro.
¿Cómo sería compartir algo así con un otro? ¿Con alguien que te ame?
Nunca lo iba a saber, porque todo se dio como nunca lo esperé y a pesar de eso no me arrepentí de mi hija, me era inexplicable como contarle a mis amigos lo que siento por ella, Juana es la luz de mis ojos, suena cliché, pero no puede ser más así.
Mi primera semana con mi hija en mi departamento fue dura, Juana dormía mal y yo tampoco dormía, tenía miedo por ella, miedo de que le pase algo.
NUNCA sentí tantas inseguridades y miedos juntos, ¿Peter? Apareció solo dos veces en la semana, para traerme comida y para ver si yo no había colapsado emocionalmente y del cansancio.
Me atreví a responderle los mensajes a mi hermano, le mentí que dije que había arrancado un trabajo nuevo y me tenía muy ocupada, que no tenía tiempo ni para dormir, el real trabajo real y no la mentira: ser madre.
Lo poco que dormía estaba liquidándome lentamente, Eugenia cuando podía intentaba ayudarme y cuidar a Juana, pero ella no sabía como cuidad a un bebé, amaba los nenes, pero realmente no tenía idea, su intención era buena, pero derivarle a otro el cuidado de mi hija me costaba mucho.
¿Joaquín? Un "amigo" de ella también hizo el intento de dormir a Juana para que yo pudiera dormir y sin éxito tuve que seguir despierta, malhumorada y con dolor de cabeza.
-Hola-saludé a Peter de mala gana, él elevó sus cejas- no dormí otra vez
-Me hubieses llamado-se cruzó de brazos y negué con la cabeza-¿porqué no?
-Si no te nace venir solito no voy a pedirte que vengas-me encogí de hombros- igual puedo aprovechar que viniste ahora, ¿cuidas a Juana por veinte minutos? Quiero bañarme, tomarme ese ratito para mi
-¡Claro! No te preocupes-asintió y le sonreí.
-Gracias
Di media vuelta y me encaminé al baño, una vez ahí me saqué la ropa, vi mi cicatriz que poco a poco seguro iba a sanar, tampoco planeé tener una cesárea, pero las cosas se dieron así.
Me di la ducha y me tranquilicé, fue tan lindo tener unos minutitos de paz.. Al salir me envolví en la toalla, salí del baño y desde el pasillo espié a que Peter estaba "hablando" con Juana que ni bola le daba, mi chiquita estaba re dormida, eso me causó gracia, me reí sola y rápidamente me tapé la boca para que él no me descubra.
Entré a mi habitación y me cambié lo más rápido que pude, me había aprovechado bastante del buen humor de Peter.PETER
Juana estaba dormida, abrió sus manitos y las cerró, toda chiquita la vi estirarse en su cuna y después se me dio por agarrarla y sostenerla entre mis brazos, la comencé a mecer.
-Hola bebé-le hablé en un susurro- le estamos dando una tregua a mamá, ¡muy bien!-le sonreí-¿te puedo contar un secreto?-elevé mis cejas, Juana claramente no me respondió- ¡sos muy linda! Seguro cuando crezcas vas a tener una larga fila de pretendientes, ¡pobre de tu papá! ¡Que laburito va a tener para cuidarte!
Al terminar de decir esas palabras me quedé procesando mentalmente lo que había dicho.. ¿Si Juana en algún momento iba a tener un papá él se ocuparía de cuidarla para que no le rompan el corazón? Según lo que recuerdo el primer "desamor" duele bastante, y sé que es parte de la vida que a veces pase, pero.. No se lo desearía a nadie.
-Bueno, ¡suerte a tu papi del futuro!-besé su frente y cuando lo hice su carita cambió, Juana se rió cómo si estuviese disfrutando de mi "cariño", también pensé en Lali.. seguro todo iba a ser muy difícil para ella, el cuidarla sola.. ¡Pero por ahora me tiene a mi!
-¡Ey!-saludé a Lali al verla ya cambiada, no se había secado el pelo con la secadora, lo tenía hecho una maraña- tenes un nido-le sonreí burlón y ella asintió con la cabeza dándome la razón.
-Perdí mi cepillo de pelo en el medio del desorden, ya voy a solucionar eso-se encogió de hombros.
-Tengo uno en lo de tu hermano, sostené a tu bebé-le pasé a Juana, no la dejé responderme que fui al departamento de Agustín, ahí tenía un cepillo de pelo que no era mío, pero podía servir de ayuda-tomá-se lo di a Lali.
-Pelo largo, ondulado y rubio.. ¿Cuando te teñiste?-me boludeo elevando sus cejas, se le asomó una pequeña sonrisa también burlona sobre sus labios.
-La verdad no sé de quién es, pero ahora es tuyo
-Ok.. puede tener piojos y..
-¡Sos rebuscada eh! Tal vez es de una novia o amante de tu hermano
-O tuya-siguió molestándome.
-Quedamos en no discutir-se lo recordé-¡no me provoques porque claramente me vas a encontrar! Y después terminamos molestos, y alguno de los dos llora
Lali tomó aire y soltó un suspiro.
-En eso tenes razón-se alejó sosteniendo a Juana, se sentó en una silla para darle el pecho, no sé porque me costaba mirarla..
Me senté al lado suyo después de agarrar el cepillo de pelo, le saqué los pelos rubios y lo lavé, al terminar con eso comencé a cepillarle el pelo a Lali que me miró a los ojos desconcertada.
-No podes hacer las dos cosas a la veces-le sonreí y ella también me sonrió.
Le cepillé el pelo en silencio y eso me llevó su tiempo, Lali lo tenía largo, liso y hermoso.
-¿Vos crees que tu hija va a tener tu pelo oscuro?-¡¿porqué pregunté?!
-Su "papá" biológico era castaño claro, no creo que sea tan oscuro cómo el mío, lo que sí se es que va a tenerlo liso-Lali acarició la carita de Juana y tiernamente se la besó- va a salir más linda que él, y más linda que su mamá
Verla a Lali mirarla a Juana era todo un espectáculo.. la miraba con.. amor, dulzura.. felicidad.
Me agarró una especie de escalofrío, ¿cómo se sentiría amar tanto a una persona? Ese amor del que hablan en las novelas de la tele, las películas y lo libros cliché.
Lali le llenó la carita de besitos a su hija y Juana se quedó entregada al amor de su mamá.
-Creo que.. ¿a que venía?-pregunté en voz alta y me quise morir, me reí nervioso.
-¡Si vos no sabes yo menos!-Lali también se rió y suspiró- ¿la comida? Me trajiste comida, ¿la dejaste en la heladera?
-Sí-asentí y me acerqué a Lali para besar su mejilla- me voy, tengo.. cosas-mentí- chau Juanita-saludé a Juana y me escapé.
No tengo idea de porqué tuve la necesidad de escaparme, tal vez porque sentí algo de responsabilidad al cuidarla a Juana por unos minutos, y la responsabilidad no es una estupidez, asusta.
Entré al departamento de Agustín y justo recibí una llamada suya, alterado bajé por las escaleras a las corridas y caminé hasta una cafetería cercana, si él me veía en su departamento.. ¿Sospecharía algo?
-¡Hola!-lo atendí y nos vimos cara a cara-¿la vida en Madrid que onda? ¿Ya te acostumbraste?
-Más o menos, hace unos días me respondió Lali, está rara, no lo sé, según ella no está en las redes por tener mucho trabajo... ¿Crees que esté saliendo con alguien? Ella toda la vida fue muy reservada con sus relaciones..
¿Cómo finjo que no tengo idea de lo que le pasa a su hermana?
-Hola-me saludó una mesera-¿vas a pedir algo?
-Una chocolatada con medias lunas-sonreí amablemente.
-Creí que ibas a cenar..-ella elevó sus cejas- sos el actor, ¿o me equivoco?
-Perdón pero estoy en una llamada-le mostré mi celular y ella se avergonzó, me pidió perdón mil veces y se fue, escuché a mi amigo reírse.
-Pasarán los años y vas a seguir conquistando a todo el mundo-Agustín sonrió-¿al final pasó algo con la modelo o desaprovechaste esa oportunidad?
-Yo...-el nerviosismo me volvió tartamudo, me costó responder, ¡¿desde cuando?!-estuve ocupado con.. un casting nuevo-mentira- entrevistas..
-Estas mintiéndome-si había algo que Agustín no era: tonto.
-Estoy medio distraído, tengo mucho por hacer
-¡Pero un encuentro no se le niega a nadie!-Agustín elevó sus cejas-¡te conozco! ¡Se que no dejarías pasar una oportunidad así! ¡Me estas mintiendo acerca de tu salud! ¿Estas enfermo?-acto seguido se puso serio, la preocupación en sus ojos me trajo cierta culpa.
-No estoy enfermo-le aclaré, tomé aire y solté un suspiro- estoy con cosas personales, pero no estoy enfermo
-Es que.. Algo grave te debe estar pasando para que no andes por ahí al "acecho"
-No soy un felino, ¡no voy por la vida tirándome a todo lo que camina! Ese era yo cuando era más chico, ya tengo treinta Agustín, no manejo los mismos pensamientos de antes.. Me gusta pasarlo bien, pero realmente tiene que atraerme la persona
-Siempre es más atractivo una persona inteligente y graciosa que una cara linda-Agustín me miró.
Yo coincidía con ese pensamiento, pero no iba a darle la razón.
-¿Vos conociste a otra persona? Estas solito en España-cambié de tema.
-Conocí a una chica divertida, es argentina y trabaja de bartender claramente en un bar, ¡es una genia! Capta la atención de todo el lugar
-¿Y su nombre sería?-me agarró curiosidad.
-Josefina, es muy buena onda, así que suelo recurrir a su lugar de trabajo y siempre le pido que me sorprenda con el trago, ¡a la guacha le gusta darme cosas fuertes para burlarse de mi cara!
-¡Tus caras son graciosas!-coincidí y me reí, Agustín hizo otro silencio y se volvió incómodo.
-Peter... Hay algo.. Yo..-su respiración se aceleró- el día que te conviertas en papá quiero ser padrino, leer el rumor de que eras "papá" me hizo pensar en eso, en que en algún momento de nuestras vidas vamos a compartirnos esas cosas, esas alegrías.. No sé cuando va a pasar pero espero que siempre seamos familia
Agustín sonrió emocionado.
-¿Pasa algo?-ahora quién se preocupó fui yo.
-Nada, solo me está pegando el estar lejos de mi país y mi gente.. ¡¿y si algún día pasa eso con mi hermana y no estoy para ella?!
-¡¿Qué te está pasando?!-ahora SÍ me alteré.
-Me encontraron algo raro, me vine a españa para que investiguen más mi caso, y bueno, lo del trabajo justo se dio, y es más que nada la "excusa", yo por ahora me siento bien, pero me hice clínicos y salió algo raro..-su mirada se entristeció- por eso quiero comunicarme con Lali, la extraño mucho, y no puedo evitar pensar en las cosas que voy a perderme si llego a morirme
-¡Ey! ¡No seas tan dramático! ¡Vas a estar bien!-lo "ubiqué" levantándole el ánimo-¡no vas a morirte estúpido! ¡No te dejes caer por algo que no sabes si es seguro! ¡Y si es seguro vas a seguir!
El silencio que se hizo me puso nervioso, y de la nada misma Agustín empezó a reírse fuerte cómo un desquiciado.
-¡¿Qué?!-no lo entendí.
-¡Caíste tarado! ¡Lo que te conté es mi nueva idea para la novela que arranqué a escribir! ¡También soy buen actor al parecer!
-¡No juegues con esta clase de "bromas"! ¡Sos un estúpido Agustín!-me enojé con toda la razón del mundo- ¡y no vas a ser el padrino de mi hija!
Los ojos de Agustín se abrieron ampliamente.
-¿Hija?
-¡Sí! ¡La hija de mi personaje en la película que seguro voy a protagonizar!-arreglé mi error a último momento, mi amigo no se quedó muy.. Convencido con mi respuesta.
-Pero según tengo entendido te fue para el culo en la audición-elevó sus cejas-¿si quedas vas a ser papá de una nena? No te veo
-Yo tampoco me veo, pero tal vez me sale bien-me reí haciéndome el estúpido- no vas a ser el padrino de mi hija ficticia ni en el hipotético caso de que en el futuro tenga una
-Hoy te noto raro... Estas forzando un discurso, ¡y te está costando! ¿Qué me estas ocultando Juan Pedro?
-Cuando te enojas y me decís así te pareces a..-tengo que cerrar mi boca- mi mamá, en fin, no está pasándome nada, ¡seguí con lo tuyo!
-¡La próxima vas a contarme que anda dando vueltas por tu cabecita! Y mejor hago eso, sigo escribiendo, ¡chau man!-me saludó con la mano y por suerte nuestra videollamada se terminó, la mesera me trajo lo que pedí y de la ansiedad comí y tomé todo rápido, pedí la cuenta y cuando me llegó tenía un "perdón" y un número de teléfono en un papel.
¡Cliché!
La mesera me sonrió y leí el cartel con su nombre que traía en su uniforme.
-Lola-le di la plata de la cuenta y le sonreí- lindo nombre-la saludé y me puse de pie, antes de irme le guiñé un ojo.
Caminé hasta el edificio de mi amigo, estaba por entrar cuando la chica Lola se acercó.
-¿No tenes que trabajar?-elevé mis cejas.
-Soy socia, trabajo de mesera porque me gusta conocer a mis clientes
-Claro.. ¿y a tus clientes siempre los seguís?-me reí, ella negó con la cabeza- buena charla, pero tengo cosas que hacer
-¿Vas a llamarme?-me miró coqueta- si no lo haces ahora sé donde vivís.. puedo pasear por acá.. trabajo en la esquina
-Eso sería acoso, y cree que no queres que te escrache en las redes sociales-le sonreí de manera educada, y de manera nada sutil la "ubiqué".
-Solo estaba jodiendo, no soy una acosadora..-estaba avergonzada.
-Todo bien, buenas noches Lola
La saludé con la mano y entré al edificio, cuando subí por el ascensor paré en el piso de Lali, ¿cuando toqué el botón de su piso?
Mi cabeza estaba enloqueciendo, toqué el botón del piso de mi amigo y cuando abrí la puerta Lali estaba llorando, Juana también estaba llorando.
-¡Tiene fiebre Peter! ¡No le baja! ¡¿Donde estabas?! ¡No me respondas! ¡Necesito llevarla a la guardia!
Alterados bajamos por el ascensor y Lali se sentó en el asiento de atrás del auto, Juana viajo en el asiento para bebés.
Nunca viví un momento tan estresante como el de ahora, tenía miedo de que algo malo pase, ¿y si Juana no mejoraba? ¿Y si antes de llegar a la clínica chocaba?
Traté de mantener mi mente en frío,
Entré a las corridas con Lali y por suerte nos atendieron rápido, un pediatra revisó a Juana y la dejó en observación hasta que le baje la temperatura.
Las horas pasaron, Juana dejó de llorar y Lali también, Lali estaba agotada, le hice señas para que recueste su cara sobre mis piernas, ella dudó pero terminó haciéndolo, se durmió solo por diez minutos, y al verla otra vez desvelada sentí compasión, y empatía.
-Juana ya está bien, dejó de tener temperaturas altas, va a quedarse un par de horas más y si todo está bien pueden volver-el médico nos hizo ese comunicado recién a las diez de la mañana del día siguiente, con Lali suspiramos al mismo tiempo y nos quedamos mirándonos, ¡me había pegado el susto de mi vida! ¡¿Qué onda con eso?! ¡¿Porqué?!
-Gracias por.. Gracias por haber actuado rápido y no haberte bloqueado, manejaste hasta acá con la presión de hacerlo rápido.. y me soportaste a mi..
-Lali-la llamé e impulsivamente dejé un beso sobre su frente- no estas sola.. Por ahora.. Por ahora soy tu compañero en esto, creo que estos momentos de miedo son parte de la vida de los padres, ¿no?
"Los padres reales" pensé para mi mismo.
Ella asintió y besó mi mejilla.
-Gracias por haber actuado cómo lo hubiese hecho un papá real, salvaste a mi hija-me sonrió emocionada y su carita se iluminó, ella se sentía aliviada.
Las ganas de pecar iban a volverme loco en el momento de volver al departamento y dormirme, ahora mismo quería probar.. ¿probar su boca? Pero no, no era el momento, no era el lugar, y el sólo considerarlo era un delirio.. el Peter persona tal vez sólo tuvo unos minutitos de fragilidad y sensibilidad, casi se confunde y comete un gran error, ¡pero por suerte no pasó! Lo último que quiero es joder mi futuro, y joder la vida de Juana y Lali.
ESTÁS LEYENDO
Antojo de ti
FanfictionPeter Lanzani tiene menos tacto con los niños que la villana de Disney Cruella de Vil con los cachorros Dálmatas. ¿Su siguiente desafío actoral? Ser EL papá del año en una película que será filmada para llegar al corazón de la gente.. Pero..¿cómo va...