Capítulo 19

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LALI

Cuando el avión aterrizó en Argentina y salimos por la puerta después de agarrar las valijas me encontré con una sorpresa que no esperaba.
Mis papás estaban esperando y se pusieron a llorar llamando la atención de todas las personas que estaban a nuestro alrededor.
-¡Lali!-mi papá me abrazó llorando.
-¡Sos una pelotuda!-mi mamá me puteó- ¿esta es tu hija?-se volteó y vio a Peter cargando a Juana-¿qué haces acá Pedrito?
-Hay cosas que necesito explicarles pero no acá...-me puse muy nerviosa.
¡Para colmo varios se dieron cuenta de que estaba Peter Lanzani y se le tiraron encima para pedirle fotos! Mi hija empezó a llorar y la tuve que cargar yo, mis papás seguían puteándome y Juana estaba asustada.
-¡¿Pueden dejar de hacer todo este show?! ¡Juana se asusta!-los miré mal, di media vuelta para irme, pero no pude hacerlo porque no tenía manos para arrastrar mi valija, a Peter no lo habían liberado y solo tenía una opción: que mis papás me ayuden con todo.
Mis papás finalmente me ayudaron con mis cosas y tenían el auto en el estacionamiento, cuando Peter terminó con las miles de fotos llegó corriendo.
-¡Toni! ¡Julia!-saludó a mis papás con una sonrisa y ellos lo miraron desconcertado-¿cómo están?
-Mal-mi papá cuando quería podía ser trabajo-¡nuestra hija tuvo una hija y casi nos la ocultó por tres meses! ¡Si no era por nuestro hijo no nos enterábamos!
¡Agustín! Mi hermano al estar dolido me clavó un puñal por la espalda y les contó a nuestros papás mi secreto, saber lo obvio me dolió, jamás creí que él iba a hacer algo así, contuve las lágrimas que estaban amenazando con salir por mis ojos y me hice la fuerte.
-Vamos a nuestra casa Lali-¿mi mamá pensaba obligarme a ir a la casa de ellos? Elevé mis cejas y negué con la cabeza-¡no vas a cuidar a tu hija sola! Agus nos contó que sos madre soltera
-No es madre soltera-Peter se adelantó y habló por mi- soy el papá de Juana, no biológico pero en definitiva soy el papá, yo fui quién estuvo en su nacimiento y estuvo en todo momento con ellas
Sentí una emoción inmensa cuando escuché a Peter defenderme, él dijo las palabras que siempre soñé que alguien dijera por mi, él, aunque sea de manera ficticia asumió el "rol" de padre.
-¡¿Vos?!-mi mamá abrió ampliamente sus ojos impresionada-¿son pareja? ¡¿Porqué nos perdimos de tanto Lali?!
-Sí, somos pareja-Peter siguió con la mentira y me mordí los labios, todo iba camino a empeorar más y más, pero en el medio del desastroso caos y a su "manera" él estaba defendiéndome, todo para que me sintiera mejor.
-¿Es cierto?-mi papá dudó, asentí con la cabeza nada segura y Peter dejó un besito protector en mi frente.
-Entonces.. ¿Lali volves a casa?-mi mamá se cruzó de brazos.
-Vuelvo a mi departamento, estamos viviendo los tres juntitos-seguí inventando mentiras, Peter me miró de reojo y no dijo nada, mis papás de mala gana aceptaron llevarme a mi edificio, una vez ahí bajaron las valijas, se quedaron mirando a Juana.
-Es tu copia-mi papá se quedó estático, serio-¿y el padre?
-El padre es Peter-solté un suspiro.
-El biológico-mi papá aclaró.
-Un estúpido que se borró, otro día les cuento todo, ahora estoy muy cansada, Juana por suerte se durmió, Peter también tiene sueño
Peter asintió dándome la "razón" y mis papás se resignaron a seguir obligándome a conversar, me saludaron de manera fría y se fueron.
Una vez sola y en el ascensor me permití llorar un poco, supe que se me formó un puchero porque Peter también se puso mal.
Bajamos del ascensor y abrí la puerta de mi departamento, al ingresar llevé a Juana a su cuna y después me desplome en el sillón del living.
-¿Querés hablar conmigo?-Peter se sentó a mi lado.
-¿Hablar de qué? ¡¿Hablar de cada una de las mentiras?! ¡¿Hablar de que mi propio hermano me traicionó?! ¡Mi hermano Agustín!-seguí sin poder creerlo, pasó un tiempo y dejé de decir cosas en caliente- gracias por... por no haberme dejado sola y salir a defenderme, a defendernos a Juana y a mi
Sentí una caricia en una de mis mejillas y Peter me la besó.
-No mereces toda la mierda que recibiste.. Sos buena persona, sos amorosa, siempre pensas en los demás.. ¡sos una madraza que no necesita de nadie para ejercer su rol! Y encima tus papás juzgaron tu capacidad, lamentablemente tuve que decir que estábamos juntos para que se "calmen" pero ambos sabemos que podes con todo sola.. Desde el principio estuviste sola..
"Sola" sí.. desde el principio estuve "sola", me angustié.
Quería admitir que realmente no sentía que podía con todo sola, pero no iba a hacerlo para no hacer que Peter me tuviera pena.
-A lo que voy..-lo noté nervioso-¡estoy tratando de encontrar las palabras justas para expresarme!-se rió- sé que podrías con todo sola, porque tenes una energía única, una fuerza increíble... y sé que aunque no lo creas sí sos la mujer maravilla, a tu manera-me sonrió- y me fascina eso... Me fascina haberte conocido más a fondo, me fascina ser el padre "ficticio" de Juanita, sobretodo porque de todas las cosas que me pasaron en este último tiempo ese papel se transformó en mi realidad.. Es papel me gusta, no sé si lo hago bien, pero quiero seguir haciéndolo Lali
Y las lágrimas se me escaparon de los ojos.
-Siento que no sos consciente de nada, ¡de que trata la vida! Peter mi hija es mi más valioso tesoro... No es un juego, ¡no digas estas tonterías! No sos su papá y..
Me interrumpió.
-Quiero ser su papá, ya lo decidí Lali-¿podía estar emocionado? Su emoción me emocionó, y mi cuerpo se volvió vulnerable, mis sentimientos se volvieron vulnerables- aunque nosotros no seamos nada quiero asumir esa responsabilidad, ¡se que se vienen retos difíciles pero estoy dispuesto a eso!
Mi corazón estaba palpitándome demasiado rápido, se me revolvió el estómago de los nervios.
-Juan Pedro, ¿estas seguro?
Él asintió con la cabeza.
-Estoy seguro Mariana-me sonrió, se le formó una sonrisa hermosa y eso me hizo cambiar mi forma de ver todo.. tal vez, solo tal vez no era una mala idea, hasta ahora Peter demostró ser bueno, y lo quiera admitir o no se encargó de cuidar a Juana... y mi hija lo adora.. solo espero que él no le rompa el corazón, que lo que él dice que es serio siga siendo así.

PETER

Lali se quedó dormida después de darse una ducha, yo no supe que hacer, lo que sí sabía es que lo más prudente era sacar mis cosas del departamento de Agustín antes de que se de cuenta de que se lo usé todo este tiempo, corría el riesgo de que cambie la cerradura.
Agarré mis cosas y momentáneamente las dejé en el de Lali, cuando ella se despertó y miró alrededor suyo su carita de no entender nada fue muy notoria.
-¡¿Y esto?!-elevó sus cejas.
-¡Ya me voy eh!-me "atajé" de entrada- busqué mis cositas del departamento de tu hermano para irme-suspiré- mañana tengo el estreno de mi obra, así que me vuelvo a mi departamento
-Todo... ¿Todo este tiempo tuviste un departamento y le ocupaste a mi hermano el suyo?
-Tengo, pero sigue en obra, creo que solo tengo terminada mi habitación, hay olor a pintura por todos lados y supongo que no tengo agua.. el baño lo estoy haciendo de cero
Lali se quedó evaluándome y después se llevó las manos a la cabeza.
-Podes quedarte, sólo por UN mes, UNO solo-fue cien por ciento clara- vos dormís en el living.. y Juana y yo en mi habitación
-¿Puedo dormir en la habitación de Juana? Ella no la usa.. compro un colchón de los inflables.. así no ocupo el living
-¿Realmente vas a mudarte conmigo Juan Pedro?-suspiró- esto es cualquiera
-Es cualquiera pero no es una idea descabellada,vas a poder estudiar tranquila, cuando no tenga obras de teatro voy a cuidarla a Juana.. Normalmente tengo función solo por la noche
-Peter, ¿estas seguro?-volvió a dudar y por poco se muerde las uñas, le alejé la mano de la cara y me gané su cara de culo.
-Sí, ¡con Juanita nos vamos a divertir mucho!-le sonreí para que se relajara, para traerle calma- esta semana tengo muchas entrevistas, voy a tener que ir a programas de la tele, radios online.. Pero voy a hacerme tiempo para estar presente
Cada vez que yo abría la boca y soltaba palabras que componían oraciones serias me sorprendía de mi mismo, me salía tan natural que eso me daba miedo, quería poder cumplir con todo eso, la intención la tenía, el resto iba a hacer todo lo posible para llevarlo a cabo, ser responsable.
Acaricié con uno de mis dedos dulcemente la punta de la nariz chiquita de Lali y ella me sonrió, de un momento a otro la energía que estaba en el aire cambió, ella me abrazó y me dejé llevar por el momento, la abracé fuertemente porque eso me gustaba, me gustaba mucho abrazarla.
-Gracias Peter
Yo le guiñé un ojo y la hice reír.
-¿Pido comida? Ya casi es la hora de la cena-elevé mis cejas y ella asintió.
-Busco a Juana, ella come y después nosotros, ¡nuestra primera noche cómo una especie de familia!
Tuve el impulso de corregirla y decirle, una especie de familia no, una familia, pero sabía que era un tema delicado y Lali no estaba lo suficientemente estable emocionalmente para escuchar algo así, era fuerte enterarte de un momento a otro que tu hija ya iba a tener a un papá para siempre.
No pude contenerme, y cuando me encerré en el baño lo hice para llorar, las emociones me "atacaron" y lloré por varias cosas, la impotencia de la reacción de mi amigo, el sufrimiento de Lali y por último la responsabilidad más importante de mi vida: ser papá, un papá real.
Segura era la locura más grande que me había atrevido a hacer, pero el tema es el siguiente, Juanita me enseñó cosas y me las hizo ver, me hizo notar que es lo importante y muchas veces que es lo que quiero, me trajo calma, diversión, buen humor y.. un cariño inmenso..  Me despertó e hizo "abrir" los ojos al demostrarme que no todas las mujeres son iguales, me hizo conocer a su mamá en una faceta que me parece hermosa y me gusta, más de lo que admitiría en voz alta.
Aproveché y me di una ducha, cuando salí de ahí la comida ya estaba en la mesada de la cocina, Lali se había adelantado y llamó al delivery, ¿tanto tiempo estuve llorando en el baño?
¡Que débil!
Sonreí cuando Lali con la mirada me señaló mostrándome que había puesto la mesa, no podía señalar nada con las manos porque estaba abrazándola a su pequeña abrojito.
Juana estaba apoyada sobre el pecho de su mamá y también me miró de reojo le hice caras y la escuché reír.. Sí, definitivamente las cosas ya habían cambiado, y seguramente iban a seguir cambiando.

Antojo de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora