Las chicas estos dias estuvieron llendo a trabajar norman mente, ya nos habían contado que el gordo estaba encaprichado en buscar a todas las que se escaparon pero mas a mi, le tuve que contar parte de mi pasado a todas y la relación que tenia con él.Era fin de semana, estábamos practicamente solas, nona se habia ido a dormir temprano.
** Estoy aburrida -- dijo Megan tirándose en el sillón, ya habíamos terminado de acomodar lo de la cocina y ya no sabíamos que más hacer--
** Veamos que hay en la tele -- comenzamos a investigar y encontramos Netflix y encontramos una película bastante divertida--
Cada dos por tres nos levantamos para traer cosas para comer, realmente nos costaba no hacer nada durante la noche, ya que era costumbre que los fin de semana es donde más cliente entraba, no solo para beber sino también para el servicio de cuarto, entendía la incomodidad de las chicas, aveces llegas al punto que te acostumbras y al no tenerlo te hace falta.
** Tendrán algo para beber en la casa ??-- bien si había, pero las bebidas fuertes estaban en otro lado --
** Si hay algunas en la cocina escondidas, Nona una ves me contó que carga allí la mayoría de la casa, ya que la señorita Alexa es de consumir demasiado alcohol en momentos no gratos -- era sierto pero sus bebidas más fuerte fuerte estaban en su despacho, Ruth me pidió que le indicará y si encontramos algunos, asique comenzaron a tomar, yo no quería por el momento, soy poco tolerante al alcohol y sabía que solo un vaso y no aguantaría.
** Y dinos señoría Anabella que honda con Alexa -- siempre de curiosa Brenda --
** Nada, solo nos conocemos por unas cosas que pasaron, pero se que un poco me odia por ser igual a mi hermana, diría que nos conocemos por culpa de ella -- en la cual parte agradesia, pero no dejaba de odiar a mi familia igual--
** Dudo que te odie, hasta ahora a demostrado otra cosa -- si pero igual nuestra historia no comenzó de la mejor manera-- asique dinos que pasa entre ustedes -- asique tendré que contarle, pero no sabía bien por dónde empezar --
Asique entre trago y trago fui contándoles, hasta llegaron por un momento a odiarla pero al recordar que me salvó primero de un abuso y maltrato, nos salvó a todas de ese infierno, aunque no fue sola, fue parte del plan.
** Dios necesito algo más fuerte si me duermo otra ves sin nada fuerte en mi organismo me suicidare por las pesadillas -- eso es verdad necesitaban tener algo fuerte en sus cabeza--
** Bueno yo sé dónde hay algo fuerte -- les dije entre susurro y las tres me miran como diciendo apura a contar-- en el despacho de la señorita Alexa hay una vinoteca con varias bebidas fuertes -- no termine de formular la oración que Melody corrió escales arriba ya que recordaba el lugar--
Todas salimos tras ella, si hacia lo que pensaba estaríamos en problemas, se que no le gusta que toquen sus cosas, mucho menos la vinoteca.
Al llegar entró sin basilar, una ves que logramos estar todas las chicas miraban a todos lados buscando las bebidas hasta que la encontraron.
** Maldición tiene hasta bebidas importadas -- exclamó Ruth tocando una botella prácticamente llena, era obvio que eran para tomar con moderación, cosa que ninguna haría eso--
** Bien por cuál arrancamos -- oh no, eso no--
** Oh no chicas tan así no era la idea, tomemos una sola y salgamos por favor -- dije algo frustrada ya que esto será para problemas-- salgamos rápido de seguro que ya estarán por llegar y nos retaran si nos ven-- trataba de ser racional pero creo que no funcionaria--
** Oh vamos Anabella solo una copas no hará daño -- veo como extiende un vaso con algo, dude pero lo tome--
Una copa se transformaron en varias, no sabíamos ni cuántas ya que nos reiamas de cualquier cosa, trataba de poner orden pero lo menos que mi cabeza pensaba era en ser mandona. Hasta que un grito hizo que nos asustemos y peguemos el grito en el cielo, las chicas ya habían llegado, aparte de cansadas se las veían algo malhumorada, mucho más a Alexa ya que estábamos en su despacho, trate de coquetear con ella pero me rechazo feroz mente, nos llevaron a nuestro cuarto aunque de verdad no quería ir, luego de un rato que nos dejarán, mi cuerpo empeso a sentirse caliente, solo pensaba en ella y las ganas de que me tocará, asique no dude y fui a su cuarto, verla acostada boca arriba solo con una sábana sobre sus pies dejando todo su pecho con una camisa, verla de ese modo mi entre piernas se humedece, que me sucedía porque me pasaba esto, pero el alcohol en mi sistema me estaba dando el valor.
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Todo por un error
RandomAnabella es una chica sencilla y humilde, solo le importa recibirse y cumplir dos de sus grandes sueños, ser una gran modista, pero también ser una excelente cocinera, a pesar de tener una familia que no la toman en cuenta para nada, ser maltratada...