Alexa -- 41

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Después de tener semejante encuentro en el bar con ese bastardo que casi mato, ver a mi bebé en mi cama esperando me, seguramente, me trajo toda la tranquilidad que necesita.

** Quédate quieta intento curarte -- me moví ya que me ardía la cara--

** Lo siento bebé -- la mire a los ojos y se pone colorada, dios porque se pone colorada??--

** Sigo sin entender porque le seguiste el juego, acaso son cavernícola?? -- no tan así pero el bastardo me provocó, primero con que le devolviera el doble del dinero que perdió por no tenerla, luego salir con esa boludes de que si la encuentra la hará saber lo que es el verdadero placer de un hombre--

Aunque eso no fue lo que me dejó fuera de si, sino el desir que le dejaría el cuerpo marcado para que lo recordara, en eso mi mente dejo de procesar mi cordura, entonces recordé el como ya lo tenía y que fue justamente por dos inveciles que se atrevieron a tocarla, estalle en furia y me desquite con el. Era obvio que el no se dejaría, aunque no todos los golpes fueron de él, sino dos idiotas más que saltar a defenderlo, aunque a los primeros golpes dados se rindieron.

** Bien ahora acuéstate y reviso tu cuerpo -- su vos me saca de mi burbuja, bien porque se sonroja ahora cuando no es la primera ves que me ve desnuda--

Me acomode para desabrochar mi camisa, pero ni llegué a tocar ni un botón ya que empezó a hacerlo ella, sentir sus suaves dedos sobre mi piel, me estremecí y provocó una corriente que llego hasta mis entrañas, mi sangre comienza a hervir, luego sus manos rozan mis hombro para sacarlo, porque me provoca? Porque tengo este deseo sobre ella? Porque demonios sus pupilas se dilataron, su respiración se escucha agitada??

No sé ni siquiera en que momento logro subirse arriba mío, que le sucedía??

** Ana .... -- trate de hablar, sus ojos no se apartaban de los míos-- que sucede bebé?? -- le dije para ver si al menos reaccionaba, pero creo que fue peor--

** Alexa... Te deseo -- fue lo único que escuche ya que luego fundió su boca en la mias, aunque me dolía un poco, no me resisti y seguí su beso, si que lo necesitaba, pero algo más pasaba--

** Anabella, bebé -- hable entre sus labios, notaba su desesperación, su deseo, como si estuviera... Drogada --

Tuve que frenarla, la empuje un poco y vi sus ojos, estaban demasiado dilatados, su respiración seguía agitada, su cuerpo emanaba calor, estaba exitada era obvio, pero como? No tenemos drogas acá? Cómo fue que las consiguió??.... Oh Maldición

** Anabella tocaste las pastillas que tenía en el cajón?? -- su sonrisa me desia que si-- maldición Ana reacciona, porque las tocaste??

Me levanté con ella como pude, ya que no se resignaba a salir de encima mío y más cuando me frotaba su cuerpo, pero cuánto tomo? Con todo el dolor de mi cuerpo me levanté de la cama con ella en mi regazo, necesitaba bajarle el calor del cuerpo, como pude llegué al baño.

** Ana trata de reaccionar, no es bueno esto y si tomaste más de una píldora tendré que llamar al médico -- notaba que no hablaba pero sus jadeos no solo me exitaban sino me hacía comprender que estaba fuera de si, no era como aquella ves, maldición que idiota fui--

Trate de llegar a las duchas y abrí el agua fría, no quería ser mala pero era lo mejor, tenía que hacerla reaccionar de alguna forma.

** Bien esto no te gustará asique te aguantas -- pero era como hablar con la pared no me contestaba, todo lo contrario seguía manoseando me y queriendo atacar mi boca-- Ana tienes que ayudarme o nos caeremos -- pero nada, todo se estaba complicando--

Así que no dude y entre con ella, si que estaba helada el agua, en eso escucho sus quejidos, sabía que no le gustaba, su cuerpo está tan caliente que es obvio que le molestaba.

Todo por un errorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora