𝐀𝐍𝐆𝐄𝐋 𝐎𝐅 𝐃𝐀𝐑𝐊𝐍𝐄𝐒𝐒 | 𝐖𝐄𝐃𝐍𝐄𝐒𝐃𝐀𝐘

𝐕

≺≺   𝐃𝐮𝐧𝐤𝐞𝐥   ≻≻

Michelle entró por segunda vez a la oficina de la directora, esta la esperaba con una caja de cartón con unos orificios en la tapa. 

—Es de parte de tu padre —le extendió la caja—, habló conmigo y llegamos a un acuerdo, siempre y cuando no ataque a otro estudiante se puede quedar.

Recibió la caja y salió del despacho no sin antes agradecer. Cuando llegó a su habitación se encontró con la vampira. 

—¿Qué es eso? —curioseó acercándose a la ojiazul, ella no respondió, simplemente abrió la caja encontrándose con su amigo, provocándole un susto a su roomie. 

—¡¡¡AHHHHHHHHHH, E-ESO, E-ES UNA SERPIENTE!!! —se oyó un estruendo resonar en la habitación. 

—¿Estás bien? —preguntó hacia la vampira que yacía en el suelo boca abajo, esta solo levantó el pulgar y se levantó sobándose la frente por el impacto. 

—¡¿Por qué carajos tienes una serpiente?!

—Es Dunkel, mi mascota —dijo acariciando la cabeza de la serpiente.

—No me va a morder ¿o si? —Yoko indagó con miedo.

—Claro que no colmillitos, a menos que me des motivos para hacerlo —contestó Dunkel sorprendiendo a Yoko que nuevamente se cayó pero esta vez se tropezó con un lápiz, rápidamente se levantó.

—¡¿Puedes hablar?! 

—Nooo, ¿Cómo crees? —expresó sarcástica la serpiente.

 —¡Wow! ¿Cómo puede hacerlo? —cuestionó maravillada la chica.

—Es de Hellish Erd, la mayoría de las criaturas pueden hablar en ese lugar —aclaró Michelle.

—Y eso no es todo —comentó Dunkel enrollándose en el cuello de su dueña pero sin llegar hacerle daño—. Puedo convertirme en otros animales, pero mi transformación solo dura una hora.

—¡Asombroso!

🔥 🔥 🔥

La azabache caminaba en dirección al club de tiro con arco mientras su serpiente estaba enrollada en su brazo, recibía varias miradas de miedo o confusión por el reptil que llevaba, pero eso no le impidió llegar al patio frontal de la escuela. 

Xavier al ver su acompañante agrandó sus ojos exageradamente, pero no dijo nada.

—Hola bonita, ¿Quién es tu amigo? —preguntó haciendo referencia a Dunkel 

—Es Dunkel —el anterior nombrado levantó su cabecita y observó al castaño, este no podía desprender su vista de los orbes negros que traía. 

—¿Este es el chico del que tanto me hablabas ayer? —inquirió mientras poco a poco se estiraba para llegar por los hombros del chico y pasarse por su cuello. Xavier no demostraba ninguna clase de pánico por el acto del animal, sin embargo, por dentro estaba que temblaba del miedo, no quería que lo mordiera. 

—Dunkel —dijo con advertencia la pelinegra para que la víbora se bajase del chico y posteriormente se transformara en un gato. 

—¿Cómo? —dejó la pregunta al aire mientras buscaba una explicación en la chica.

—Es una de mis cualidades —respondió con soberbia el ahora felino, por poco y le da un ataque al chico de no ser porque Dunkel se frotó contra sus piernas y empezó a ronronear—. Hueles bien —mencionó haciéndole gracia a Michelle.

—¿Gracias?

—Más te vale no hacerle daño o si no te morderé y envenenaré de verdad —amenazó Dunkel volviéndose a convertir en una serpiente —Iré a escuchar a BTS en la habitación.

—Bien, pero ten cuidado - la joven dejó una leve caricia en la testa del animal. 

Al momento en que se fue, la chica volvió hablar. —Lamento si te incomodó, Dunkel suele acercarse a las personas que están en mi entorno, según él, es por seguridad —sonrió ligeramente a boca cerrada.

—¿Le hablaste de mí? —Thorpe tenía una sonrisilla juguetona en su rostro

—Sí —admitió sin vergüenza. Una de esas cualidades eran las que maravillaban al chico, su forma de decir las cosas, sin miedo a expresarse, lo asombraban de buena manera. 

—Oye. 

—¿Si?

—¿Oíste que el día de hoy habrá una feria en Jericó? —miró a su acompañante.

—Sí, ¿por qué? —no entendía a que venía todo esto.

—Me preguntaba si, ¿Quisieras venir conmigo?

La chica pareció dudar un segundo logrando hacer que el chico poco a poco se arrepintiera de su propuesta. —Está bien —accedió con una sonrisa.

—¡Genial! Entonces ¿Paso por ti hoy a las cinco?

—De acuerdo —antes de irse dejó un beso en la mejilla de Xavier dejándolo con las mejillas sonrojadas y con el corazón latiendo frenéticamente.