I'm A Survivor

Capitulo: 43

Desperté con los rayos del sol chocando en mi cara, me cubro la cara con la manta que estoy usando. Me muevo un poco y sin querer le doy en la cara a alguien.

-¡Carajo!- Escucho la voz de Abe provocando risa en mí.

Poco a poco nos estamos levantando para comenzar con este nuevo día. Ya los Grimes estaban despiertos y listos. Yo me pongo de pie y me estiro. Agarro mis botas para y me las pongo, busco mi cuchillo pero recuerdo que ya no lo tengo. Me acomodo el cabello en una dona y salgo con una manzana en la mano, Carl se fue a explorar la comunidad con Judith en un coche. Yo camino a su lado y los dos sonreímos, unas personas mayores llaman a Carl con una sonrisa en sus rostros pidiéndole al chico si pueden ver a la bebé. Por la reacción de sus rostros asumí que no han visto a un bebé en mucho tiempo.

Yo decidí seguir caminando y llegue hasta un gran lago. Era hermoso, caminé hasta el borde y me senté el césped. La fría brisa de la mañana chocando con mi rostro, cierro mis ojos y respiro profundamente y sonrío. Esto es real, estoy en un lugar seguro. Me quedé ahí sentada por una hora cuando decidí volver a la casa.

En el camino veo a Noah, Tara y Glenn con dos hombres hablando. Decido ir hacía donde están ellos y uno de los desconocidos me habla.

-Ashley, ¿Cierto?- yo asiento quedándome al lado de Glenn. -Soy Aiden Monroe-

-¿El otro hijo de Deanna?- Pregunto y el asiente con una sonrisa.

-Estaba hablándole a ellos sobre ir allí afuera y mostrarles más o menos el territorio, ver como ustedes se manejan allí afuera. ¿Interesada?-

-Claro- digo y el choca sus manos.

-Perfecto, ahí abajo podrán buscar sus armas. Los veremos en la salida.- Dice Aiden

Los cuatro bajamos las escaleras hacia la armería, ahí se encontraba Olivia organizando las balas en un cajón. Glenn aclara su garganta para hacerle saber a la mujer de nuestra presencia. Ella se da la vuelta y se sorprende al vernos.

-¡Oh! Lo lamento no los escuché entrar dice y yo simplemente le sonrío.

-Queremos nuestras armas, iremos afuera con el hijo de Deanna.- dice Glenn y ella asiente.

-Síganme- Olivia nos lleva a otro cuarto donde se encuentran todas las armas, las de la comunidad y las nuestras. -Pueden coger todo lo que quieran pero una vez regresen deben devolverlo.-

Yo rápidamente agarro mi espada y mi cuchillo colocándome la espada en mi espalda mi cuchillo en mi cinturón. Los demás rellenan las pistolas de balas y Glenn me da la mía. Yo la agarro y la guardo al lado contrario de mi cuchillo. Una vez estamos listos caminamos hacia el portón de la comunidad donde vemos a Aiden y Nicholas, un hombre haciendo guardia nos deja salir y nos adentramos al bosque siguiendo al los hombres.

-¿Cómo construyeron esos muros?- pregunto mirando alrededor alerta de cualquier movimiento o ruido que no provenga de nosotros.

-Mi padre era profesor de arquitectura.- dice Aiden -Para nuestra suerte no tan lejos de aquí había un supermercado en construcción. Con la ayuda mía y la de mi hermano comenzamos con los primeros muros. Luego más gente llegó y seguían llegando hasta que se convirtió en lo que hoy tenemos.-

-¿Osea que ustedes han estados ahí desde el comienzo?- pregunto a lo que el asiente con una sonrisa. -Tu gente, ¿han tenido que luchar contra ellos?-

-El lugar es seguro, nada ha entrado a nuestra comunidad. No hemos tenido algún incidente en mucho tiempo.-

Yo solo asiento y escucho el gruñido de un caminante. Aiden saca su pistola pero lo detengo. -No es necesario que desperdicies balas si es solamente uno. Yo me encargo- digo sacando mi katana.