OCHO

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La máquina de latidos era lo único que se escuchaba en la habitación, no sabía cuántas horas llevaba conectado a esa máquina ni quién lo trajo al hospital; suspiro cansada mente viendo como su uniforme se encontraba en un sillón al frente de la cama, Henríquez se encontraba dormido en un sillón al lado de la ventana.

Cerró los ojos pensando en cuánto demoraría el médico en darle de alta, la herida le dolía un poco, pero el Dolor agudo que sentía cuando llegó había disminuido bastante en el transcurso de las revisiones de los médicos. Martínez entró en la habitación con una taza de café, se acercó a Leonardo con una sonrisa feliz de encontrarlo despierto; Leonardo lo miró también con una sonrisa, encantado.

_me alegra que ya estés despierto _ sonrió mientras tomaba su mano

_es difícil dormir con el ruido incesante de esa máquina _ apuntó con un dedo hacia la máquina

_con esa máquina se ve que si estás vivo o no_ comento sonriendo_ tu familia ya viene en camino

_¿Por qué les avisaste?_ pregunto algo molesto_ sabes cómo se ponen cuando saben de estas cosas, van a ser un escándalo

_son tu familia y deben saber lo que sucede_ suspiro_ se preocupan por ti..... A igual que Benjamín lo hacía.....

El ambiente se volvió silencioso, solo la pronunciación de ese nombre los hacia ponerse triste; si Benjamín estuviera aquí, todo sería tan diferente. Leonardo sin darse cuenta comenzó a llorar en silencio, las lágrimas no dejaban de caer; Martínez se dio cuenta de eso, provocando que pusiera una silla al lado de la cama sentándose en ella y tomando de la mano a su oficial.

_no llores _ sonrió_ no quise hacerte llorar, pero......¿Te imaginas lo que diría?

_¡Eres un completo idiota!_ comento Leonardo sonriendo levemente_ ¡Siempre te gusta estar entre la vida y la muerte!

_¡Acaso quieres matarme!_ continuo Martínez, ganándose una risa de parte de Leonardo.

_siempre me regañaba cuando terminaba en el hospital_ Leonardo seco las lágrimas de sus mejillas, echó su cabeza hacia atrás apoyándola en la almohada.

_no te preocupes_ comento Martínez_ todo acabará bien, Benjamín estaría furioso, pero aquí nadie estarás bien

Luego de unos minutos la familia de Leonardo llegó a su habitación del hospital, todos abordaron a Leonardo quien ya se comenzaba a sentir acosado; su hermano menor lloraba en el regazo de su hermano mayor, Raphael se esforzaba para no llorar, Donatello se secaba las lágrimas cuidadosamente, mientras su padre lo miraba con preocupación.

_no se preocupen, son afanes del oficio_ comento leonardo_ me hicieron transfusión de sangre, no tengo ningún órgano perforado, estoy bien y posiblemente me den el alta mañana

_¿Le dijiste a Karai?_ pregunto su hermano menor

_no quiero mortificarla_ le dijo_ espero que a ustedes no se le salga ninguna palabra, ¿Escucharon?

_si leo_ comentó

Leonardo se acomodó en la camilla intentando mejorar el dolor de espalda, sus hermanos se quejaron al escuchar como su hermano gruñía de dolor ante tal movimiento; lo regalaron diciéndole que no se moviera mucho, pero a Leonardo ya le dolía el trasero por estar todo ese tiempo acostado.

Los médicos le habían comentado que debía estar reposando para que la herida no se abriera y así tener que operarlo, aunque no quisiera tendría que quedarse quieto para no empeorar las cosas.

Una enfermera se les acerco, indicándole que ya debían irse.

_las horas de visitas ya terminaron_ comento mirando a la familia _ si desean, pueden irse a su casa y mañana en la mañana vendrán para llevarlo a su casa

TOMAR NUESTROS CAMINOS  [TEMPORADA 2]✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora