Capítulo 27 - Un nuevo propósito

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EVELYN

Ya sabía que mis amigos habían acabado siendo el grupo de música famoso que son ahora a base de esfuerzo y talento. Y créedme, no lo dudaba.

Y aun así, no puedo evitar sorprenderme con esto.

Desde que Sandra volvió al trabajo todos están muy nerviosos. Después de meses inactivos, la presión que supone su vuelta es, nada más y nada menos, que colosal.

Sí, los fans esperan algo bueno. Pero es que el resto del mundo solo está esperando ese pequeño momento de debilidad. Hubieran sido bastante más crueles si no hubieran conseguido vender a Sandra como una mujer fuerte que sí, podía cuidar a su hijo y ser una estrella del rock a la vez.

Así que quieren algo grande, algo mucho mejor que lo que ya han sacado, que para mí y medio mundo, era insuperable.

Pero se han superado. Esta canción es una flipada, literalmente.

Es tener ganas de ponerte a cantarla a gritos como un loco y a la vez te destroza de unas maneras increíbles. Es la combinación de dos rupturas con un chico enamorado. Es la crudeza de los orígenes del grupo, aportada por John y Sandra, y esa esperanza que han tenido más recientemente, por parte de Luca y Damiano.

O sea, que me ha explotado la cabeza por partes que no sabía ni que tenía.

- ¿Y qué tal? - Pregunta Damiano.

Los cuatro me miran, nerviosos.

Querían una opinión ajena a los "expertos en música". Bueno, sé que no intentaban ofenderme. Y aunque lo hubieran hecho no puedo mentirles.

 - Es... ¿maravillosa? ¿Increíble? ¿Fantástica? ¡Ni siquiera sé si hay una palabra que pueda describirla! - Los cuatro se sonríen, orgullosos. - Vale, pero ahora tengo que irme a una reunión. - Recojo mi bolso y le doy un abrazo a cada uno.

- ¿Te veo esta noche? - Le pregunto a Damiano cuando llegó hasta él. 

Desde que hablamos siento que estamos mejor que nunca. Aunque hace unas semanas me daba un miedo terrible, me alegro de verdad.

- Hoy no, pero prometo verte mañana. 

- Te tomo la palabra.

Y con ello, paso a la única que me queda, Sandra, que me pide que hablemos fuera.

- Ahora vuelvo. - Les dice a los demás.

Antes de cerrar la puerta, me sorprende descubrir que el único que también está sorprendido es Damiano.

- Vale, no sé si lo sabes, pero el cumpleaños de Damiano es en dos semanas.

- ¿Qué? - No tenía ni idea.

- No me extraña. Ni siquiera sabemos cuando es el tuyo - me sonrojo un poco. Es cierto que pensar que no pasaría mi cumpleaños este año con mi s padres y las chicas... bueno, tampoco me ilusionaba-. Pero, no importa. Él hace como que no le importa mucho. Todos los años quedaba con nosotros pero de noche se iba de fiesta. Sin embargo, ahora que ya eso no le va tanto, habíamos pensado en celebrarlo como Dios manda. Su cumpleaños de verdad es el sábado, pero lo celebraremos el miércoles para que sea una sorpresa.

- Eso es genial Sandra. ¿En qué puedo ayudar? - Mi amiga sonríe. Sé que es porque esperaba que dijese justo eso. Le encanta que todo salga como ella espera.

- Vamos a organizarle una fiesta sorpresa, así que necesitaremos sitio, comida, decoraciones... te avisaré. Por ahora, podrías pensando en un regalo. - Asiento y con ello, da la conversación por terminada.

Vuelve a entrar sin decir nada más.

Bien, ¿y qué le regalo yo a mi novio?

DAMIANO

Tenemos un añoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora