24: El Golpe Al Corazón

181 28 9
                                    

POV VINYL

Amanecí con Joseph a mi lado, se veía tan guapo durmiendo. Después de aquel maravilloso dibujo que me había hecho nuestra atracción no aguantó mucho más.

Me quedé mirándolo unos segundos pero un estruendo hizo que los dos nos asustáramos, hasta Lucifer despertó de su profundo sueño.

-¿Qué narices?-Se levantó con rapidez Joe para examinar lo que había pasado.

Un ladrillo con una nota estaba en el suelo, este había roto la ventana que daba del exterior a la habitación , alguien lo había lanzado. Quinn agarró el material y vio que llevaba una nota, la leyó.

-¿Qué pone?-Pregunté nerviosa, no sabía lo que estaba pasando.

-Nada, cariño, nada.-Quiso evadir el tema.

-Joseph, dímelo.-Exigí mientras mi gato venía a acurrucarse en mis brazos.

-"Si entras ya no sales."-Leyó.

-¿Qué mierda significa eso?-Esto ya comenzaba a cabrearme.

-Vinyl, es la secta...-Confesó con tristeza.

-¿Por qué?

-Quiero salir de ella, me he dado cuenta que no sirven para nada esos estúpidos sacrificios.

-Joe, sabes que esa gente es peligrosa, y sé que no quieres hacer esos rituales, pero si no te harán daño.

-Lo sé, pero no voy a volver, ¡Estoy harto de ser su estúpida marioneta!-Se puso furioso y lanzó un jarrón a la pared. Mis ojos lo miraron con preocupación.
-Perdón, preciosa, perdón...-Sus ojos no pudieron soportar más y comenzaron a gotear.

-Rey, no está todo perdido...

-Sí lo está.

-No, tú tienes la suerte de tener dinero, poder... Puedes permitirte el lujo de cambiarte de país, de continente si quieres...-Intenté dar soluciones, pero era complicado.

-Pero no quiero, vida mía, no quiero dejarte atrás.-Sus lágrimas descendían sin parar.

-¿Pero por qué de repente quieres salir de allí?

-Porque todo lo que he hecho no ha servido para nada.

-¿Pero cuál era el objetivo que no has podido cumplir?

-Enamorarme, Vinyl.-Apretó sus ojos con fuerza.

Joseph me explicó su historia con la rata de Stella Arwen, sabía que mi intuición con ella no fallaba. Luego de contarme aquello se quedó muy pensativo, eso no me gustaba.

Me sentí muy mal por él, al parecer sí estaba enamorado de mí de verdad. ¿Pero yo sentía lo mismo que él? Toda mi vida había dependido de mí, sin fijarme en tener amistades, ni en relaciones, ni en nada de eso... Pero Joe me hacía sentir cosas diferentes, ¿Aunque a caso eso se llamaba enamoramiento? No lo sabía, pues nunca había sentido eso. Lo cierto es que sí que me gustaba bastante estar con él, le tenía mucho cariño, quería estar a su lado, su presencia se me hacía algo adictiva... Pero tal vez todo esto era demasiado acelerado, estaba confundida y para colmo no quería aceptar del todo la realidad.

-Estoy muy enamorado de ti, te amo Vinyl.-Mis oídos fueron bendecidos por esas palabras.

-Creo que yo también, Joseph...-Me acerqué a él a paso lento pero él se apartó con cautela.

-Joder, Vinyl, no digas eso, por favor, no lo hagas.-Se puso de rodillas y abrazó mi cintura, pues yo estaba de pie consolándolo.

-¿Por qué?

-Vinyl, no sientas nada por mí, por favor, y si lo sientes no me lo digas.-Volvió a llorar y se me contagió.

-¿Qué insinúas, Joe?-Hablé apenada, sabía que algo estaba mal.

-Mi amor, no puedes estar a mi lado y eso es lo que más me duele. Ellos vendrán a por ti si estás cerca de mí, no puedo dejar que te hagan daño, a ti no.

-Cielo, no me pasará nada.-Levanté su mentón para que me viera a los ojos.

-No, no te pasará nada porque me alejaré de ti. Te amo tanto, Vinyl, tanto...-Me rompía verle así, pero lo que me acababa de destruir es que yo sentía algo por él y ahora ya no podíamos estar juntos.

-Joseph, si me amas tanto como dices, no te alejes, por favor.

-Dejar ir también es una forma de amar, vida.

-Si me dejas ir, me harás daño.-Afirmé mientras lloraba en silencio.

-Más daño te harán ellos si te hacen algo, preciosa.-Me hablaba con tanta delicadeza.

-Eso no es verdad.-Mi llanto aumentó.

-Cariño, tú sabes bien que ni siquiera me amas, al menos no tanto como yo, no pasará nada por no estar a mi lado.-Intentó convencerme y autoconvencerse para no herirse más a él mismo, supongo que era más fácil aceptar un...

"No estamos juntos porque ella no siente lo mismo."

Que un...

"No estamos juntos porque no quiero que le hagan daño a ella, pero aún y así, si fuera por nosotros dos estaríamos teniendo nuestra vida perfecta."

Así que lo acepté, por mucho que Joseph no tuviera razón sobre mis sentimientos, tuve que aceptar lo que dijo como la verdad absoluta para no herirlo más. Sabía que si le soltaba un "te amo" él se sentiría peor que si le decía un...

-Tienes razón.-Solté con un nudo en la garganta, no, él no tenía razón.

Él sonrió con tristeza y me agarró las manos suavemente.

-Te amo.-Fue lo último que dijo antes de besarme e irse fuera de la habitación.

Recogí mis pertenencias mientras lloraba como una condenada, al parecer sí que estaba enamorada, pues si no no creo que me hubiera afectado tanto. Yo era una chica bastante dura y me costaba llorar cuando se trataba de algo ajeno, así que no podía estar solo llorando por haberle roto el corazón a Joe, yo misma también me había roto el mío al decir tal mentira.

"Tienes razón."

"Tienes razón."

"Tienes razón."

No, Joseph, no la tenías.

....................................................................
....................................................................

Hoy os traigo un capítulo algo tristón, no hay tanta acción, pero sí emociones.

Obra de hoy: El Golpe Al Corazón de René Magritte (1952)

No olvides votar y comentar ;)

Muchos besos💋

El Misterioso Señor Jota | Joseph QuinnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora