DESTINO | JK&TH

03

Me quedé encima del cuerpo muy formado del Alfa. Nos miramos el uno al otro y nos mantuvimos en esa posición hasta que escuchamos un grito.

—¡Heeseung! ¡Espera que te encuentre y me conocerás! ¡HEESEUNG!

Me acerque más al cuerpo del Alfa que tenía abajo de mi y sentí un aroma muy delicioso, ¿Estas son las feromonas? Huele muy bien a cítricos, es una fragancia muy refrescante.

—¿Te escapaste? — su pregunta me sacó de mis pensamientos.

—¿Podrías no moverte mucho? Me va a ver y esta vez si que moriré. — no se lo que pasaría si ese pelado llega a encontrarme.

Aún seguía oyendo sus gritos y cuando sentí sus fuertes pisadas cerca, mi corazón latió con más rapidez.

De pronto siento como una mano sostuvo mi cintura y me giró. Había cambiado las posiciones. Ahora me encontraba abajo de el alfa, y estoy muy seguro que nadie me veía por su gran cuerpo que tapaba todo de mí.

—No dejaré que mueras. — su aliento chocó con mi rostro y juro que lo sentí excitante. —Chanyeol, conduce. — ordenó sin quitar su mirada de la mía.

Cuando estuvimos los suficientemente lejos, nos sentamos correctamente. Sentí el clima helado, no me di cuenta que hacía frío y corría mucho aire. Me abracé a mi mismo para darme algo de calor.

Sentí un peso en mi espalda, algo caliente que no dejaba el frío pasar. Él.. me había colocado su abrigo.

—Así que ..¿Hee Seung? — me preguntó mientras terminaba de acomodarme su abrigo.

Me sentí algo nervioso, no se por qué.

—Ah... — que puedo decir.

—No. —interrumpió el otro alfa. Cierto, estaba conduciendo. Qué vergüenza, vio todo.

Sentí mi cara arder y vi como el alfa pelinegro endurecía su mirada con el conductor ¿ah? por qué lo haría. Creo que vi mal.

—Si me disculpa Joven Jeon, hace un momento quería hablar con el omega, ya que no me dio tiempo.. pienso decírselo ahora. — no veía su rostro pero por su tono de voz se notaba serio. —El no es Hee Seung.

Y me quedé helado. Ahora el abrigo no ayudaba mucho con el frío, sentí bajar mi temperatura ¿Acaso el lo sabe? ¿Heeseung se lo dijo? ¿Me harán algo si lo admito?

Respiré hondo y controle mi expresión, soy bueno en eso.

—No me siento cómodo, ¿Pueden dejarme por aquí? — quise intentar abrir la puerta del auto y huir pero una mano en mi muñeca me detuvo.

El pelinegro me dio una mirada tranquilizadora que me hacía sentir a salvo y protegido. Dios.. ¿Que me pasa?

—No tienes a donde ir, déjame llevarte a mi casa y hablaremos más cómodos
¿si? — asentí y oí una tos del otro alfa.  Al parecer se atoro con su saliva.

¿Serán de confiar? Si les cuento todo...no, Taehyung, tu no eres de confiar en desconocidos.
Mire a mi derecha donde se encontraba el alfa pelinegro y lo examine por un momento.

Tenía el pelo muy negro, algo ondulado y largo, una mirada penetrante y oscura, unos labios muy hermosos y lunares en perfectas posiciones, ... y que hablar del cuerpo ... muy bien formado...

Me di cuenta de mis pensamientos y sacudí mi cabeza para reaccionar, Dios, ese hombre es la lujuria y el pecado en persona.

No me importaría pecar... además, el cielo no tiene espacio para mi.

—En que tanto piensas. —su voz grave provocó que no pensara en nada más y tenía toda mi atención.

Sonreí suavemente.