Entré a la sala del año anterior.A la primera persona que vi fue a Natalia, la mejor amiga de Giovanni.
Me acerqué a ella y fingí estar perdida.
— Hola, ¿esta es la sala de cuarto grado?
Ella volteó a verme y dejó de mirar su teléfono.
— ¿Eres nueva? — me preguntó.
— Sí, lo soy.
— Ah. Sí, esta es la sala — me contestó de manera desinteresada.
— Está bien, gracias.
Me senté atrás de ella, pero entonces Natalia volvió a hablarme.
— ¿Por qué te sientas allí? Está ocupado.
Bueno, y aquí comienza todo.
Para ganarme su confianza y bueno, especialmente la de Giovanni y la de los demás.
Solo tengo que ser como ellos, solo una más de su estúpido grupo.
— Bueno, no eres la dueña de esta sala. ¿O sí?
— Te recomiendo que no me provoques. Porque si lo haces, saldrás llorando de este colegio — me dijo con un tono amenazante.
— ¿Vas a amenazarme solo por una silla? No seas infantil.
Natalia se quedó callada.
Tocaron el timbre, y llegó Giovanni, quién presenció la conversación desagradable entre Natalia y yo.
Solo me miraba con una sonrisa y como esperaba, se sentó al lado mío.
— ¿Eres nueva?
— Sí.
— Bueno, bienvenida. Me llamó Giovanni — estiró su mano para presentarse.
Lo rechacé.
Giovanni sonrió nuevamente.
— ¿No te presentarás, chica misteriosa?
— ¿Por qué debería presentarme? Este es un colegio, no un club social ¿no?
— Bueno, tienes razón. Pero quiero saber tu nombre.
— No lo haré.
— Tu voz se me hace conocida. ¿Ya nos habíamos conocido antes?
— No lo creo.
¿Este idiota no olvida las voces de las personas a las que les hizo la vida imposible?
Bueno, parece que no.
Pasó un rato desde que la profesora nos estaba recordando la materia de antes.
Estábamos pasando el lenguaje figurado.
— ¿Eres inteligente?
— ¿Por qué preguntas? — le contesté mientras escribía en mi cuaderno de apuntes.
— No recuerdo qué era esto. ¿Me enseñas?
— ¿Me ves cara de profesora?
Giovanni sonrió.
— Tal vez.
— Eres insoportable. Pásame tu cuaderno, yo te enseño.
— Gracias, chica misteriosa.
— No me llames así.
— No lo dejaré de hacer hasta que me digas tu nombre.
— Como quieras.
— Entonces, ¿cómo es?
Suspiré.
— Mira, el lenguaje figurado es cuando decimos las palabras de otra manera a las que son nombradas normalmente. Bueno, el lenguaje figurado se puede presentar en libros, y todo lo que tenga que ver con literatura....
Pasó un rato y tocaron el timbre. Era el primer recreo.
— Entonces, un ejemplo de lenguaje figurado, es: ”Cuando te vi, me perdí en tu mirada”.
— Sí. ¿Era difícil de entender?
— No — sonrió —; no lo era, te entendí mucho mejor que la profesora.
— Sí, bueno, ahora me iré — me levanté de mi asiento.
— Oye, chica misteriosa — se levantó de su asiento también.
Suspiré nuevamente y volteé a verlo.
— ¿Y ahora qué quieres?
— ¿Quieres que sea tu guía?
Accedí y nos fuimos al primer piso para empezar.
— ¿Por dónde quieres comenzar, chica misteriosa?
— Giovanni, ¿puedes dejar de llamarme así?
— Entonces dime tu nombre.
— Vaitiare. Mi nombre es Vaitiare, ¿contento?
— Sí, bastante. ¿Quieres que seamos amigos? Te prometo que no te arrepentirás.
— Si con eso paras de llamarme 'chica misteriosa' , entonces sí.
— Lo que tú digas, Vaitiare — sonrió.
Primera parte del plan: lista.
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La chica que lastimaron
AcciónAlice es una joven de diecisiete años que vivía con su abuela en un pueblo, todo iba de maravilla, hasta que su misma abuela decide que ambas se vayan a otra ciudad por sus estudios. Cuando Alice ingresa al colegio, Giovanni y sus amigos comienzan a...