Extra final.

38.3K 1.6K 979
                                    

Este va antes del extra número 2, después del extra número 1

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Este va antes del extra número 2, después del extra número 1.

Contenido +18

*

Los declaro marido y mujer

29 de abril, 2024

Jamás en la vida había sentido que mi cerebro se paralizaba como lo estaba justo en este momento, o que mi corazón parecía sufrir alguna crisis nerviosa que no se detenía por nada del mundo. Por el contrario, parecía que los latidos de ese órgano que me mantenía con vida estaban confabulando para alterar mi poca cordura, o mejor dicho, dejarme sin ella.

En otras palabras, me encontraba tan nervioso que podría desmayarme y no tendría de otra que simplemente dejarme llevar.

No mentía, para nada.

Era cien por ciento real.

Después de todo, estaba a punto de casarme.

Y no, esto no era absolutamente comparado a la vez anterior donde tuve que usar un traje negro por obligación. Ahora mismo vestía un smoking, uno bastante elegante incluyendo el dichoso corbatín, una flor en mi bolsillo, mi cabello corto y peinado hacia atrás. Todo donde debía estar a la perfección... y por supuesto, esas ganas de salir corriendo por esta habitación en busca de mi amada.

Solté una lenta bocanada de aire, removiéndome en mi lugar. Abrí y cerré los puños extremadas veces en un intento de contener la ansiedad que quería jugar en mi contra.

No era un ser humano cuerdo en estos momentos. Y supongo que la persona frente a mí lo notó, pues dejó su palabrería de lado para darme una confusa mirada

Sentí un tirón en mi cuello

—Au —pronuncié, despacio

—¿Acaso no me estás prestando atención?

—No, desde que llegaste —fui sincero

Su mirada reprochadora no se hizo esperar

—No se supone que eso me haga sentir mejor.

Esbocé una pequeña sonrisa, permitiéndole seguir arreglando mi traje de manera que no hubiese ni una sola arruga. Sí, yo lo había decidido así, no quería ni un solo error en el día más importante de mi vida.

—¿Nervioso? —sonrió ella

—Mucho —admití en una exhalación. Ojeé la puerta—. Te daré el obsequio a la mejor madre del mundo si me dejas ir a su habitación

Negó, sonriendo un poco

—Eres muy parecido a tu padre.

—Mamá, esto es diferente —detuve su mano para que ya no continuara—. Necesito verla, me han castigado desde anoche y eso que fue la boda civil. Al menos... debes dejarme hablarle.

La última de las estrellas ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora