❝𝒀 𝒄𝒐𝒎𝒐 𝒍𝒂 𝒍𝒖𝒏𝒂, 𝒅𝒆𝒃𝒆𝒎𝒐𝒔 𝒑𝒂𝒔𝒂𝒓 𝒑𝒐𝒓 𝒇𝒂𝒔𝒆𝒔 𝒅𝒆 𝒗𝒂𝒄𝒊𝒐 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒔𝒆𝒏𝒕𝒊𝒓𝒏𝒐𝒔 𝒄𝒐𝒎𝒑𝒍𝒆𝒕𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒏𝒖𝒆𝒗𝒐❞
Cassandra Harper, rota desde hacía mucho tiempo, con heridas que no cicatrizan y una mirada gélid...
Al salir el sol, Andrea seguía en la misma posición desde anoche. Seguía arrodillada junto al cuerpo inerte de su hermana, mirándola en silencio y acariciando su mano.
Vi como Lori se acercaba a decirle algo y decidí que era mejor alejarse. Por ello, cambié de dirección hasta encontrar a los chicos que remataban a los caminantes que había por el suelo.
Glenn y T-dog cogían a los rematados y los amontonaban en una hoguera para ir quemándolos a todos.
-¿Aún no se mueve? -preguntó Rick mirando a Andrea.
-Ni siquiera quiere hablarnos. Lleva ahí toda la noche -respondió Lori- ¿Qué hacemos?
-No podemos dejar a Amy así -habló Shane.
-No tardará en convertirse -asentí, mirando de nuevo a Amy, casa vez más pálida.
-Yo le diré lo que hay -dijo Rick, antes de acercarse a las hermanas rubias.
Lo vimos arrodillarse a su lado y justo cuando iba a hablarle, Andrea lo apuntó con una pistola haciéndole parar.
Solté una carcajada mientras Rick se alejaba poco a poco y Andrea lo seguía con la pistola, trazando todo el camino del hombre.
-¿Y ahora qué? -preguntó al llegar.
-Dejadme a mí -suspiré y me acerqué un poco a Andrea.
Sabía que me había oído llegar, pero no se giró hacia mí, solo dejó que me sentara a su lado y mirase a su hermana con delicadeza.
-¿Alguna vez te he dicho que yo también tengo una hermana? -Andrea me miró.
Tuve que respirar hondo un par de veces antes de mirarla.
-Bueno, la tuve.
Andrea no dijo nada, pero sus ojos estaban clavados en los míos. Estaban cristalizados, rotos y ella luchaba contra la necesidad de derrumbarse.
-Sabes lo que tienes que hacer -le dije, puesto que hablar de mi hermana no me apetecía demasiado-. No dudo de que lo harás.
Me levanté notando que algo me apretaba el pecho y Andrea miró de nuevo a Amy, que de momento no daba signos de levantarse de entre los muertos.
Empecé a contar mis respiraciones bajo las miradas de todos, que parecían algo confundidos por la forma en la que Andrea se había concentrado en mí.
-No hablaréis en serio. ¿Vamos a dejar que nos detenga? Ahora la chica es una bomba -se quejó Daryl.
-Es su hermana -repuse.
-¿Y qué sugieres? -cuestionó Rick mirando al chico.
-Cargárnosla. Limpio, en la sien, desde aquí. Joder, yo le acertaría entre los ojos desde aquí.
