Louis y Harry, ambos alfas dominantes, uno territorial y el otro posesivo.
¿Serán capaces de dejar su orgullo para escuchar a su instinto?
¿Quién será el que ceda su dominio y aceptar su verdadero destino?
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Las almas gemelas son las energías más fuertes que existen en el universo y al encontrarse embellecen las vibras en el mundo entero.
Cerró con fuerza su portátil dejándola
caer sobre su cama, Louis se refregó el rostro con ambas manos.
Niall se ha contactado con él para informarle de una desaparición de otro alfa en su manada, en el territorio de Míriam se encontró una omega flotando en un lago con algunos meses de gestación.
El alfa se quedó viendo al tablero de ajedrez, había una leve capa de polvo sobre él, era casi imperceptible, pero Louis la podía notar.
Se sentó en la silla viendo directo las piezas, de pronto la risa de su padre se hizo presente en sus pensamientos, recordó cuando le enseñaba a realizar movimientos claves, “siempre debes analizar a tu oponente, visualiza Louis, fíjate bien, no siempre debes ser rápido para ganar, en ocasiones es necesario sentarse y observar”.
Suspiró dando un leve toque a uno de los alfiles que estaba de su lado, sobre el tablero solamente quedaron dos piezas y nunca tuvieron la dicha de terminar la partida —Todo sería más sencillo si estuvieras aquí, ¿qué debo hacer?
No tuvo conciencia de cuanto tiempo pasó en esa misma posición hasta que fuera de su habitación, Mateo golpeaba la puerta, con cuidado se alejó del tablero para que nada se moviera de su lugar.
—Pasa.
El omega asomó el rostro —hola, Lou, ¿cómo te encuentras?
—En el borde, Mat, no sé qué hacer o dónde buscar, hasta ahora los espías no han dado reporte alguno y al parecer alguien más apareció muerto.
—No me digas eso, ¡qué desastre! —Se lamentó preocupado.
—Lo sé, debo ir a verificar el reporte del forense.
—¿Solamente tú? Si quieres puedo acompañarte.
—No te preocupes, debo verme con el infeliz de mierda y no quiero perturbarte.
—Lou, si estar cerca de Harry te está empezando a afectar deberías…
—No, todo esto es por las manadas, lo demás vale una mierda, lo sabes.
—Solo ten cuidado, le tengo cariño a Harry igual, su padre fue un buen líder y no quiero el mal para ninguno de los dos.
—Debemos solucionar muchas cosas, Mat, ya veremos que sucede.
—Falta mucho, cachorro, los concejales volvieron a tocar el tema de tu descendencia y sin ánimo de perturbarte, creo que tienen razón, las estaciones avanzan y no has encontrado a tu pareja. —Con pena habló.
