Louis y Harry, ambos alfas dominantes, uno territorial y el otro posesivo.
¿Serán capaces de dejar su orgullo para escuchar a su instinto?
¿Quién será el que ceda su dominio y aceptar su verdadero destino?
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—Sé que va contra lo que eres y lo que se te ha enseñado, pero querido… —se acercó tomando sus manos—. Es necesario, no es por el futuro de las manadas, sino por el de ustedes.
Algo extrañado, Louis se quedó viéndolo —no me veas así, cachorro.
—No te estoy viendo extraño, es solo que me hiciste pensar.
—Solo digo, ahora que todos sabrán pueden intentar algo, con la mordida nadie podrá tocarlos, para todos las leyes lobunas son sagradas y tocar a una pareja enlazada es penado en cualquiera de las manadas, eso los haría intocables.
—Tienes razón, tengo que hablar con Harry con respecto a eso —dirigió su vista a Zayn—. Doblen los refuerzos, protejan todo. Que nadie salga ni entre sin mi autorización.
—Como mandes. —asintió con respeto y salió para empezar con lo estipulado.
Louis despidió a Mateo para que fuera a dormir, él tuvo un poco de insomnio y decidió salir a tomar aire fresco, no entendía el porqué, pero sentía algo extraño.
Vio unos matorrales moverse, se puso alerta al no percibir ningún olor segundos después Kity apareció de entre ellos —Hola, Louis.
—Kity —saludó viéndola.
—¿No puedes dormir?
—No.
—A tu alfa le falta un poco de uva fermentada para relajarse, ¿no es así?
—¿Tan evidente soy? —preguntó con una comisura elevándose.
—Es normal, ¿tienes tiempo? Tengo que hablar contigo.
—Claro que si, ¿gustas entrar, alguna cobija, comer o beber algo?
—Estoy perfectamente bien, gracias. —así ambos caminaron en el enorme jardín, Louis escuchando y tratando de descifrar cada palabra que la alfa decía.
—Entonces…
—No puedo decir más, solo ten paciencia y por lo que más quieras, Louis, abre bien los ojos. Tu destino y el de Harry quedó plasmado así como en el tablero, Rey frente a Rey, nunca fue para saber quien derrocaría al otro, no.
El alfa se quedó pensando en lo que escuchaba mientras ella continuaba —¿pero...?
—Pero hay quienes quieren meter sus artimañas en el juego que ya ha sido finalizado, algo donde no pertenecen, nunca han pertenecido y jamás pertenecerán, ¿entiendes?
—¿Usurpadores?
—Podría ser, no te fíes de nadie, ni lo que ha de venir será culpa de ustedes, incluso de mí. Todo es una obra de esta especie de araña que prepara su red para al final tenerlos y acabar con ustedes.
—Kity…
—Sabes que no puedo decir más, Louis.
Hablaron un par de cosas más hasta que ella se giró diciendo que era hora de partir, realmente Louis no comprendía muchas cosas, como por ejemplo a donde iba la alfa, ¿tenía hogar?, ¿quién era en realidad Kity? Y una gran duda se instaló en su mente al decir que no confiara ni de ella misma.
