La mamá de mi mejor amiga [caché] - Adaptación

Capítulo 29

Poché POV

Maldición... Valentina ya lo sabía todo, y me había dejado bastante claro cuánto me odiaba y todo lo que me despreciaba luego de que el director de su colegio me llamó para contarme que mi hija había dejado inconsciente a Calle después de agarrarla a golpes.

No sabía el motivo de su agresividad hasta que llegué al establecimiento y fui recibida por una furiosa Valentina y un desconcertado director, tan confundido como yo.

Estaba enojada por su actitud, bastante enojada. Vale no era de peleas, y mucho menos con Daniela, su supuesta mejor amiga.

Estaba bastante preocupada por Calle pero no podía demostrarlo. Ahora debía estar enojada con Vale por golpearla ¿Cómo era tan salvaje para dejarla inconsciente? ¿Qué demonios pasaba por su cabeza?

Al principio pensé que habían peleado por una estupidez, pero cuando íbamos saliendo de su colegio luego de hablar con el director, ella de la nada me enfrentó diciendo que sabía que yo estaba con Calle y supe que todo se había ido al carajo.

No sabía que hacer o que decir, así que sólo dejé que se desahogara y expresara su enojo. Lo entendía... y sabía que tarde o temprano este momento llegaría.

Me insultó de todas las maneras posibles. No intenté explicarle nada, sabía que eso la enojaría más. Luego se puso a llorar, estaba bastante exasperada y no tenía control sobre sí misma.
Deseaba con todas mis fuerzas poder consolarla pero eso no era una opción. Tuve que aguantarme las ganas de hacerlo.

Solamente la dejé tranquila hasta que se le quitó y se fue sin esperar una respuesta de mi parte hacia la salida de la escuela. Tampoco esperaba que quisiera irse conmigo así que supuse que se iría en su automóvil a casa... a contarle todo a Johann.

No quise pensar en eso... en lugar de detenerla, me dirigí a la enfermería en donde estaba Calle.

Al entrar hablé un poco con la enfermera que me contó brevemente como habían pasado las cosas, que Daniela aún no había despertado y que menos sabía cuando lo haría.

Me acerqué a su camilla donde estaba recostada con los brazos a sus costados.

Mi princesa estaba con un ojo completamente morado e hinchado como la última vez. Su mejilla izquierda estaba rojísima y múltiples contusiones cubrían su rostro por todas partes.

No sabía si estaba peor o igual que cuando mi ex jefe le pegó. Por lo menos ahora no tenía cortes, excepto por uno pequeño en el puente de su nariz.

Mi pobre ángel... por qué tenía que pasar por todo esto... no se lo merecía en absoluto. Seguramente Valentina ni siquiera se había molestado en decirle por qué le pegaba, sólo llegó de la nada y la atacó. Debía haber estado tan confundida.

Me hubiera gustado quedarme ahí junto a ella hasta que despertara, pero debía irme en busca de Valen y Johann para hablar correctamente con ambos y evitar que hicieran algo impulsivo.

Ambos eran igual de cavernícolas y eran incapaces de controlar sus impulsos.

Dejé un beso en su mano y otro en su frente, acaricié sus mechones castaños apreciándola con amor por unos minutos y luego me fui sin decir nada. Estaba a punto de llorar y no quería que esa extraña señora me viera hacerlo sin ningún motivo aparente. De todas maneras no soportaba verla así por más tiempo, me sentía culpable y debía descubrir cómo es que Vale se enteró que Calle era mi amante.

Me partía el corazón verla en esas condiciones, su alma pura no se merecía todo ese dolor y sufrimiento.

Salí de ahí sin poder aguantar más y me fui a mi auto a toda prisa.