Del mismo club / Gavi

7. Discoteca

Pablo Gavi

Cuando estaba escribiendo a Val, Sira se acercó a mi.

- Valeria es una chica muy maja - dijo y yo levanté la mirada.

- ¿La conoces? - pregunté extrañado.

- La he conocido ahora, hemos estado todo el partido juntas.

- ¿Y dónde está?

- Hablando de eso, me dijo que te dijera que no hacía falta.

- ¿Que no hacía falta el que?

- Dijo que lo entenderías - se encogió de hombros y se fue con Ferrán.

Si Val estaba con Sira, pero Sira llegó sola a vestuarios y además dijo que no hacía falta, eso solo podía significar una cosa.

No me podía creer que se fuera sola, cuando le dije que no. La calle estaba llena de gente, no me hacía ni pizca de gracia que estuviera sola por la calle a estas horas.

Borré el mensaje que estaba a punto de enviar, y le escribí Val, dije bien claro que no ibas a volver sola.

Poco después, respondió Pablo, habéis ganado y ahora seguramente vayáis a celebrarlo, no pinto nada ahí. Enhorabuena, y felicita a Pedri.

¿Que felicite a Pedri de su parte? Ni que lo piense, vamos.

Val era para mí, no para mi supuesto mejor amigo.

Yo solía tener líos de una noche, y tenía pensado que Val fuera otro más. Ninguna chica podía resistirse a mis encantos, y estaba claro que ella tampoco lo haría.

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- Bueno, ¿qué? ¿Nos vamos de fiesta? - propuso Pedri.

- ¿Disco? - preguntó Ansu.

- Pues claro, pillamos un reservado - contestó Balde.

- Pues venga, vámonos - gritó Eric.

Ansu, Ferrán, Sira, Balde, Eric, Pedri y yo nos arreglamos un poco y nos fuimos a la discoteca de siempre.

Al llegar fui a la barra con Pedri para pedir.

- Dos cubatas - pedí al camarero.

Mientras esperábamos, una chica se acercó y se puso a mi lado.

- Hola guapo - puso su mano derecha sobre mi hombro.

Me giré y la miré de arriba a abajo. Estaba todo oscuro, pero gracias a las pequeñas luces que recorrían todo el local, pude ver como era.

Era rubia, con los ojos de color verde y un poco azul, tenia pecas y lleveba un vestido color granate con una chaqueta negra.

- Hola guapa - le sonreí.

El camarero dejó los dos vasos de tubo sobre la barra, cogí el mío y antes de que pudiera darle un trago, alguien me tiraba de la muñeca.

Antes de subir las escaleras donde estaba el reservado, paré y me solté de su agarré.

- ¿Pero qué haces? Estaba hablando con una chica - me quejé a Pedri.

- No hagas tonterías, los dos sabemos que cuando te lies con ella luego le vas a dar la patada. Además, ¿quieres que se filtre un video besándote con una chica? ¿Otra vez?- Que no pasa nada - bufé.

- Siempre dices eso, te da igual que se filtren 5 videos a la semana besándote con chicas, y en cada video sale una diferente.

- Cállate y déjame - le di un leve empujón y subí las escaleras.