🔞 Hasta que te conocí 🔞 ( Kookmin)

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Cuando termino de comer, se acercó a su amor, tomó su mano le dio miles de besos lo llenó de lágrimas de nuevo y acarició su rostro.

-Ya me voy bebé, te prometo que regresaré mañana aunque me digan que debo estar en casa y reposar no puedo, nuestros bebés -tocó su vientre-Son tan fuertes como tu, y si soportaron todo eso y siguen aquí-palmeo muy suavemente su abultado lo vientre-Es porque no les toca marcharse como sus hermanos que ahora nos acompañan como angelitos. No te dejaré solo, cuidaré de nuestros bebés, pero también de tí.

Tomó sus manos de nuevo beso ambas con cariño no queriendo irse, pero no le queda de otra. Jimin salio luego, pidió un taxi y regresó a casa solo. Parece que su padre no pudo ir por el.

Tocó la puerta, una sirvienta le abrió, solo le sonrió, Mimi entró, se sentía tan cansado, desea acostarse y no levantarse hasta tener que ir se ver a su amor al otro día, pero no sabe ni donde va a dormir, llegó a la cocina, pero su madre no estaba ahí, no está ni Jin, así que buscó en la habitación de sus padres y ahí estaba ella, estaba en el escritorio donde suele leer también.

-Ma-dijo Jimin sin entrar.

Ella miro, se veía imperturbable luego volvió su vista al libro que estaba leyendo.

-Puedes quedarte en la habitación de huéspedes, hay mantas y ropa limpia- dijo sin mirarlo, ni un hola como estás, ni un lo siento por tu pérdida, o por lo de tu pareja. Nada. Como siempre.

Jimin ya sabe eso, su madre siempre fue así, pero esto. Esto es diferente, Jimin no está de visita como otras veces, el y su novio fueron atacados por un montón de lobos, perdió dos bebés, su pareja esta en coma con posibilidades de sobrevivir casi nulas, de paso perdió su hogar. Entonces Jimin supo lo que a estado ignorando todos estos años, su madre no lo quiere ni un poco, parece que también como otros lo odia y es un poco normal con el, quizás por su padre. Su corazón se estrujo de nuevo y dolió mucho.

Cuando estuvo en la habitación de huéspedes, lloro y lloro. Hay tantas cosas que le lastiman y en ese momento, que Kook no está para el, se siente solo.

Se durmió, pasaron horas y nadie llegó a verlo, ni siquiera Jin cuando regresó de la Universidad, ni cuando tuvieron que cenar, hasta que su padre llegó. Antes de eso escucho como en un sueño una discusión.

-Jimin -dijo el señor Park, moviendo con cuidado a Jimin -¿Estás bien? -preguntó al verlo despertar del todo.

-Pa... -Jimin lo abrazó necesitado, el señor park le devolvió el abrazo.

-¿Has comido algo? Te ves pálido.

-Comí en el hospital.

-A que hora llegaste? Perdón por no poder ir por ti, tuve mucho trabajo-

-Tranquilo pa, lo entiendo. Tomé un taxi luego de ver a Jungkook hace un ratito.

-¿Como está el, y mis nietos?

-Bien en lo que cabe. Ayer apenas le quitaron el coma inducido y apareció un donante, el doctor dijo que sólo queda que sea compatible.

-¡Oh cariño eso es bueno!

-Si, y mis bebés están bien, sólo debo cuidarme.

-Claro, por eso vamos a cenar cariño-dijo y lo levantó con suavidad.

Ambos comieron tranquilos sólos en el comedor, Jin estaba en su cuarto su madre igual, pero Jimin se sintió bien con sólo tener a su padre, porque además de Jungkook su padre también lo ama.

Jimin se durmió a eso de las 3 de la madrugada, no dejaba de pensar en Jungkook, lo imaginaba solito en ese hospital, se preguntaba si tenía frío, o si estaba calentito como el, si lo vigilaban cada cierto tiempo, y en que quería ver su hermosa sonrisa torcida. A las 6 de la mañana Jimin ya estaba listo para ir a verlo, y se sentía ansioso por saber si el donante es compatible con su organismo.