La historia de cómo reencarne en este mundo

Capitulo 31

- Mañana será tu debut - Menciono con tono nostálgico Paul mientras se sentaba y posaba su brazo detrás de los hombros de su pareja.
- Es cierto, mañana va a ser una verdadera tortura - Expreso el omega de naranjos cabellos, estaba sentado en la alfombra del lugar junto a Oda. Desde hace un rato habían comenzado a jugar ajedrez en espera de que su padre culminara sus deberes diarios. Las reuniones en el pequeño salón que había en la planta baja de la mansión eran bastante frecuentes , al no poder verse en la mayor parte del día debido a que todos tenían que concentrarse en sus tareas asignadas , al caer la tarde lo cuatro se encontraban en ese lugar . Pasaban largas horas contándose lo que habían hecho en esos días o simplemente pasando tiempo juntos, el momento era tan cálido y placentero que sin duda todos lo esperaban con ansias.
- Tal parece que fue ayer cuando la partera te entrego en mis brazos... eras tan frágil y pequeño...aunque bueno, eso no ha cambiado- Rio al ver la expresión de enojo en su hijo menor
-Han pasado tantos años , tantas experiencias que nunca pensé que este día llegaría tan pronto - Chuuya alzo una ceja sin despegar su vista del tablero .
- Acaso estas sentimental, sientes que ya estas demasiado viejo o algo. No me digas que ya no tienes fuerzas para hacer a mi hermana, sin ella no hay trato de sucesión -
- ¡Chuuya!- Arthur se ruborizo y cubrió su rostro con ambas manos.
- Mocoso que estas insinuando, no soy un blandengue, por supuesto que tendrás a tu hermana y yo podre descansar tranquilamente mientras tú te ocupas de todo. Solo pensaba en todo lo que hemos vivido en estos últimos años, las cosas han cambiado mucho, nosotros mismos hemos cambiado. Ahora somos una familia unida y feliz. Me encantaría que estos días fueran eternos.-
- ¿Estas preocupado por lo que sucederá mañana? No tienes que preocuparte papá , yo no me voy a dejar pisotear por ese principito engreído .-Menciono con seguridad
- En el peor de los casos los tengo a todos ustedes conmigo así que no necesito nada mas -
- ¡Ooh...Chuuya querido! - Arthur se conmovió ante las palabras del menor y Verlaine sonrió acariciando los cabellos de su hijo.
- jaqué mate- Dijo Oda de repente rompiendo el cálido ambiente.
- ¡¡¡NOOOO!!! ¡ESTABA POR GANAR MALDITA SEA, ES TÚ MALDITA CULPA VIEJO! - Señalo a Paul.
- ¡Mía! qué culpa tengo yo de que seas malo en ese juego - Comenzaron a discutir entre ellosdos, sacando risas a los otros presentes.
- Su alteza, lamento interrumpirlos pero ha llegado una entrega del palacio - Sebastián entro en la escena, con su típica cara de amargado. Si se sorprendió o no por la peculiar escena de Chuuya y Paul jalando sus cabellos simultáneamente, no lo demostró.
-Jaaaaa... ¿Por qué razón tienen que interrumpir en los mejores momentos? . Trae lo que sea que hayan enviado aquí - Ordeno el duque separándose de su hijo para volverse a sentar correctamente y esperar.
Sebastián entro nuevamente en el salón seguido de varios sirvientes que traían consigo una caja de madera de considerable tamaño. Incluso la caja parecía cara así que todo eso era muy sospechoso. Los criados dejaron la caja en el centro del lugar y se retiraron.
-Admito que tengo miedo de saber qué es lo que hay dentro de esta cosa , lo último que enviaron no fue algo agradable y estoy seguro de que esto será algo parecido - Verlaine examinaba la caja con sumo cuidado , buscando en ella alguna clase de truco o peligro .
- Nuestro Chuuya no ha hecho absolutamente nada malo en todo este tiempo, ni siquiera ha molestado al príncipe. Entonces porque no pueden dejarlo en paz aunque sea un momento - Arthur también observaba la caja con desconfianza, parecía que en cualquier momento la echaría al fuego como hizo el omega más pequeño con el cuadro del príncipe.
- Ustedes saben que van a seguir molestando hasta que puedan deshacerse de mí por completo, así que mejor tomamos las cosas con calma. A decir verdad estoy muy curioso por ver qué fue lo que envió esta vez - Chuuya se acerco a la caja y jalo de una de las cintas que mantenían la forma del objeto. La caja se desarmo dejando caer al suelo todas sus caras, revelando lo que había en su interior.
- Esto debe ser una broma -
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PALACIO IMPERIAL