Capitulo 35

2.9K 375 41
                                    

- ¡Ahora sí, voy a matar a ese mocoso engreído! ¿¡Quién se cree que es para golpear a mi hijo!? ¡Espero que no esté pensando en que me quedare de brazos cruzados!¡Voy a quejarme con Fukuzawa en este instante!-Paul gritaba a los cuatro vientos enojado, sacudía sus puños y caminaba de un lado a otro soltando insultos hacia el príncipe heredero.

Por su parte Chuuya solo observaba el paisaje a través de la  ventana desde su lugar en el sofá, tenía un parche en su mejilla dañada e ignoraba todo el revuelo que estaba haciendo su padre. A su lado se encontraba Oda con el seño fruncido y una expresión pensativa mientras que Arthur trataba inútilmente de clamar a su padre.

- ¡Me encargare de que le corten la mano con la que golpeo a mi hijo! ¡¿Cómo se atreve ese bastardo de mierda?!-

-¡Paul querido trata de calmarte! ¡Si haces algo precipitado no servirá de nada tu enojo, van a echarle toda la culpa a Chuuya!- Detrás de Verlaine, Arthur trataba de hacer que al menos se sentara y recobrara la cordura.

FLASH BACK

Luego de que Chuuya y Oda se alejaron de ellos, pasaron todo su tiempo interactuando con viejos conocidos y algunos nobles interesados en negociar con ellos. Ya era bastante tarde en la noche cuando Rimbaud decidió que buscarían a los niños para marcharse a su hogar, caminaron entre la multitud en su búsqueda pero solo encontraron a Oda teniendo una conversación con Ango. Él tampoco sabía dónde se encontraba su hermano así que se despidió de su interés amoroso para ayudar a su padre en la búsqueda de su hermano. Pasó casi media hora y no había señales de Chuuya todavía, por la entrada trasera del salón observaron entrar al chico de blancos cabellos que acompañaba a Dazai, estaba  completamente empapado y ahí tuvieron un mal presentimiento. Poco después del chico Dazai también entro al salón con una expresión sombría y se acerco a ellos.

- Usted debería educar mejor a su hijo duque- Con esas palabras pasó de largo junto a ellos evitando incluso a Mori que se acercaba a ellos.

- ¿Qué sucedió?-Mori tampoco comprendía lo que sucedía pero supo que de seguro no era algo bueno. Al poco tiempo Chuuya ingreso al lugar con la mirada gacha y la ropa sucia junto a su cabello desarreglado.

-¿¡Chuuya!? ¿¡Qué te sucedió!?- Los cuatro corrieron preocupados a su encuentro, Paul analizaba su cuerpo en busca de alguna herida, hasta que miro su mejilla roja e hinchada. Su cuerpo se congelo y una inmensa furia comenzó a brotar de su cuerpo. A su lado Mori suspiro, ya se hacia una idea de lo que había pasado, todo se volvería un caos ahora.

- Mori, me puedes explicar ¿por qué tu mocoso golpeo al mío? - La voz de Paul tenía un timbre peligroso, no trataba de ocultar su enojo aun cuando se encontraba frente al monarca.- ¿¡Respóndeme!?-

- Paul por favor cálmate, no sabemos lo que sucedió realmente. Puede ser un malentendido - Trato de calmar el monarca.

- ¿¡ COMÓ QUE UN MALENTENDIDO SI CLARAMENTE...-Detuvo su queja al sentir como su ropa era suavemente tirada . Bajo su mirada hasta encontrarse con los oscuros zafiros de su pequeño.

- Padre, quiero irme a casa - Fue la frase que menciono el omega con una expresión neutra. Verlaine suspiro aún enojado pero si su hijo quería irse no daría más queja por el momento.

- Chuuya querido, por favor no le tengas resentimiento a Dazai sabes como es y...-

- Su majestad, solo quiero irme a casa- Mori callo sus palabras al ver la sombría expresión en el rostro del menor. En esta ocasión las cosas no se resolverían de manera fácil.
Los Nakahara se retiraron en completo silencio a petición de menor, pero sin duda esto se volvería un escándalo en cuanto Paul volviera a visitar el palacio.

La historia de cómo reencarne en este mundo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora