Capítulo 36

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Llevo un rato sin saber que hacer, Harry salio a buscar algo, no se que pero aqui sigo, haciendo lo que el me dijo bien claro, más bien me ha prohibido que salga, pero me apetece salir a correr, y dado que la última vez que me dejo sola, me intentaron atacar, decido hacer lo que me viene en gana, además, el no tiene derecho a mandarme.

Tengo que irme de aquí, aunque no quiera, por decisión de Harry, no se donde me llevara, pero aun así siento que debo hacerle caso, seran cosas de manada.

Me cambio a ropa de deporte y meto la ropa ordenadamente, no se como ha pasado todo esto en mi vida, yo era feliz, aunque no me puedo quejar, hay gente que lo esta pasando realmente mal. Cierro la maleta y la dejo al lado de la puerta.

Me pongo los únicos zapatos que me he echado, y los únicos en los que me siento comoda y me decido entre salir a correr o tumbarme en la cama, prefiero salir a correr, necesito despejar mi mente y asimilar todo lo que se acerca, me decido a salir y abro la puerta, pero así de la nada aparece Harry y se pone en frente.

-¿Dónde vas? -pregunta mirándome de arriba a abajo.

-Voy a salir a correr -al escucharme deja de escanearme y me mira a los ojos con una sonrisa de lado- ...¿que?

-Si quieres correr... puedes hacerlo de otra manera... -sus ojos se oscurecen y desprende deseo por cada poro de su cuerpo.

-HARRYYY... -digo y noto como mis mejillas se tornan a rojas, él sonríe y se va a acercando lentamente.

-Bueno, aunque quiera... -me quedo mirandolo y muerdo mi labio mientras bajo la mirada decepcionada- ...ven aquí pequeña... -me coge de la mano y une sus labios con los mios, haciendo que todo se revuelva dentro de mi.

Sus besos son apasionados pero lentos, el calor que expande me arropa y siento que me voy de la vida, pasa una de sus grandes manos por mi pierna y me levanta para que enrolle las piernas al rededor de él, mientras la otra recorre toda mi anatomía.

Deja mis labios y nuestras frentes se unen por inercia mientras intentamos recuperar el aire.

No se como hemos llegado a la cama, pero no me importa, lo único que quiero es que no pare, sus manos recorre todo mi cuerpo, y por una parte siento vergüenza, mi cuerpo no es nada en comparación con otras, pero él pasa su manos por mis inexistentes curvas, en un leve susurro me dice que lo mire mientras me levanta la barbilla con uno de sus dedos.

Se ve excitado y parece estar pidiendo permiso, lo miro a los ojos, esos ojos de los que cualquier ser del sistema solar se enamoraría y me quito la camiseta por encima, él se aleja un poco y desabrocha el cordón del pantalón, lo empieza a bajar lentamente mientras deja un camino de besos con forme va bajando.

Cuando por fin me los ha quitado me mira con una sonrisa y se va acercando lentamente hasta juntar sus labios a los mios y dar un beso para luego separarse, se deja caer en sus rodillas y con un solo movimiento me da la vuelta, dejandome boca abajo, se vuelve a acercar y siento su cálido aliento en mi cuello, un escalofrío me recorre todo el cuerpo cuando absorbe y va haciendo un camino hasta llegar a mi sujetador, en el que no me da tiempo a rechistar cuando un crujido hace el silencio.

-¿Por qué has hecho eso? Era de mis mejores sujetadores... -gruño, me vuelvo a dar la vuelta y su diversión es notable.

-No tiene por donde abrirlo... -dice y mi ira aumenta.

-Si, si lo tiene, se abre por al ante. Así de fácil. -le enseñó como se hace y me lo quito para que vea lo fácil que es.

Su sonrisa desaparece, y me doy cuenta de que lo había hecho a caso echo, en un movimiento rápido, me sujeta las manos y empieza a besarme descontrolada mente.

Maybe is a dreamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora