Tsukishima

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-Vamos  ____, no seas así. Solo fue una vez, fue un error estúpido.-(le dijo su ex novio con cara arrepentida)-No volveré a hacerlo, sabes que te amo.

Ella se cruzó de brazos frustrada, llevaba más de tres meses tratando de deshacerse de ese sujeto. Estaban en una cafetería y no deseaba hacer una escena, aunque en el fondo de su corazón solo quería maldecirlo a todo pulmón.

-Te entregué todo lo que tenía.-(dijo la universitaria con la voz entrecortada)-Te di mi confianza, mi amor y hasta mi dinero. Sé que estabas pasando por un mal momento, pero estuve ahí para ti. O no me amaste lo suficiente, o tienes una visión del cariño totalmente distorsionada. En cualquiera de los casos ya no quiero saber más de ti. No me busques y no me vuelvas a hablar.

Se levantó para marcharse cuando el muchacho golpeó la mesa con su puño.

-¡¿Acaso eres la única que tuvo que aguantarme?! ¡¿Sabes lo insoportable que eres?! Siempre te haces la buena y haces que el resto queden como monstruos.-(gruñó llamando la atención de todos a su alrededor)-Eres una puta ____ y nunca amarás a nadie más que a ti misma.

La chica contuvo la respiración tratando de calmarse. Estaba completamente indignada y quería gritar y llorar.

-Ahhh, que patético.-(comentó una voz desganada)-Deberías dejar este show y aceptar que te terminan con dignidad. Das vergüenza ajena.

____ se giró hacía la dirección a donde se dirigía su ex amenazante. Un rubio con lentes sostenía un libro con tranquilidad mientras tomaba café. Tenía un aura tranquila y sus movimientos eran cuidadosos.

-¿Este maldito cuatro ojos busca pelear?-(se trono los nudillos para enfatizar su enfado)

El rubio se levantó mostrando su gran altura y sonrió con superioridad al ver cómo cambió la cara del joven.

-Woah, tus insultos son tan originales que deberían darte un premio nobel.-(se burló con malicia)-De todos modos, ya hiciste mucho el ridículo por tu cuenta. No creo que necesites de nuestra ayuda, así que ¿Podrías marcharte como la persona civilizada que se nota que eres?

____ soltó una risa involuntaria al ver la cara indignada del sujeto. Al final se fue mientras su cabeza sacaba humo.

-Eres Tsukishima, ¿Cierto?-(preguntó animada)-Estamos juntos en algunas clases de humanidades. Muchas gracias por intervenir, de verdad me salvaste.

Él desvío la mirada antes de sentarse para volver a su libro.

-No tienes que agradecerme, no fue nada.-(murmuró para sí)

Ella lo observó con curiosidad antes de sentarse en su mesa.

-Eres inesperadamente agradable.-(comentó con una sonrisa)-¿Te molesta si me siento contigo un rato? Seamos amigos.

Tsukishima la miró un poco confundido y miró a la joven con el ceño fruncido.

-¿Por qué alguien de la clase alta querría ser amiga de un sujeto como yo?-(interrogó con un bufido incrédulo)

-¿Clase alta? ¿Qué se supone que significa eso?-

-Perteneces al grupo de gente bonita y extrovertida que tiene un montón de amigos.-(explicó Kei sin despegar la mirada del libro)-En resumen, gente totalmente inalcanzable para alguien de mi nivel.

____ sonrió antes de apoyar su cabeza en su mano para analizar al alto muchacho.

-¿Te parezco inalcanzable? ¿Cómo amistad o algo más.....?-(se atrevió a preguntar)

-Como todo.-(concluyó el con tranquilidad)-Eres una flor en lo alto de las cumbres.

-Bueno, entonces no es que me odies o algo por el estilo.-(destacó con certeza)-Si no me odias, seamos amigos.

Tsukishima la analizó y descubrió que no le parecía desagradable.

-De acuerdo.-(concluyó con un suspiro)

Y la chica de verdad cumplió. Era seria con respecto a su amistad. Le pidió su número y siguieron en contacto, compartieron sus gustos. Y el rubio descubrió que tenían más cosas en común de lo que esperaba. A ambos les encantaba la música, leer y quedarse tranquilos en casa.

Se convirtieron en amigos. Pasaron meses juntos, compartiendo aspectos personales de sí mismos. Sus inseguridades (que eran muchas), sus miedos y sus sueños.

-____.-(llamó un día Tsukishima quitándole a la muchacha el libro que estaba leyendo)

-Estas muy serio.-(replicó ella estirándose en su sofá)-¿Pasa algo?

-Solo quería decirte que me gustas.-(declaró con una sonrisa)-Me gustas mucho, _____.

La joven estudiante de arte lo observó sorprendida antes de acercarse.

-¿Te gusto? ¿Cómo te gusto?-

-Como a un mono macho le gusta un mono hembra.-(se rió ante la cara de molestia de la muchacha)

-Eres tan romántico.-(replicó ella sarcásticamente)-Podria morir si dices algo tan bello.

Él se acercó y rozó sus labios con suavidad.

-Todo.....es más brillante cuando estoy contigo. Me siento estúpidamente positivo.-(dijo en un susurró)-Estoy loco por ti, ____. Corresponde a mis sentimientos por favor.

____ tocó el rostro del muchacho con cariño, subió su mano hasta llegar a sus lentes y se los quitó con una sonrisa.

-Me gustas Tsukki, con tu lengua afilada y tu sonrisa.-(contestó antes de lanzar sus lentes al sofá)

-Oye, no los rompas.-(se quejó feliz)

Ella negó acercándose a sus labios.

-Lo siento, pero me estorban.-(concluyó antes de besarlo)

Nota de autora

Buenas noches a todos mis queridos lectores, espero que estén súper bien. Vuelvo con un capítulo para esta historia que tenía un poco abandonada.

Ojalá les guste y si tienen alguna idea para otro capítulo siempre es bien recibido. ¡Nos leemos luego!

Haikyuu X TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora