El asunto de la feria escolar en verdad estaba resultando una molestia para Jin, la única forma de evadirlo era que estuviera enfermo el día de la misma, así que tendría que participar en al menos una de las opciones propuestas, no sabía nada de música, pero al menos ahí podia hacerle el coro a alguien y así participar sin presión alguna de tener una responsabilidad más en su espalda.
Se encaminaba a buscar al encargado de los números musicales después de preguntárselo a el presidente escolar, y el encargado de ello era una de las tantas chicas que habia rechazado, quizá no habia lugar donde no estuviera una chica que Kim Seokjin se habia dado el lujo de romper el corazón, solo que ella en particular, recordaba que lo habia abofeteado y dicho lo presumido y ególatra que era para luego gritar a mitad del pasillo que lo odiaba.
Si lo odiaba no seria problema quizá le diera una pésima actuación en un número y eso solo lo favorecería penso mirando a la chica en el salón de música con alguien más que estaba de espaldas agachado sobre lo que parecía ser un teclado, si lo mandaba al diablo habría testigos, penso este dándose ánimos para entrar al salón.
-Myoi - llamo Jin para tener la atención de la chica.
-Kim - escupió la chica mirándolo como si estuviera cubierto de excremento y en verdad apestara.
-Tú estas a cargo de los números de música y me interesa formar parte de algo relacionado y . . .
-Si, deja ver que puedes hacer - decia la chica buscando en su laptop - tienes suerte ahí dos cosas que puedes hacer.
-¿En serio? - preguntaba este interesado.
-Irte al diablo o largarte de aquí.
Debía saber que con ella no podría, lo que tenia de bonita lo tenia de rencorosa pensaba este dándole la espalda, iría a donde Jungkook después de todo la pintura no era difícil.
-Hey Kim!
Sonó la voz de Yoongi a sus espaldas, estaba delirando o es que el resfriado aun lo estaba confundiendo como el día anterior, pero es que el chico inclinado en el teclado era él, Jin se jiro encontrándoselo fulminando con la mirada a Myoi que poco lo importaba.
-Necesito un corista, ¿quieres el lugar? Le dije a Mina pero parece que no lo anoto en su preciada laptop.
-Tengo más cosas que atender - decia está saliendo del salón no sin ates arrempujar a Jin a un lado con el hombro.
-Es adorable - decia Yoongi - si quieres ser mi corista con gusto lo apreciare.
Jin asintió - Solo que no tengo idea de nada de esto.
-Descuida me tienes a mi para ayudarte en todo - decia Yoongi volviendo al teclado - creí que irías a otro grupo, Tae y Hobi se peleaban por ti.
-No iba a decidir por nadie - decia este mirando como Yoongi componía aquel instrumento - no quiero elegir entre mis amigos aunque . . .
-Terminaste eligiéndome a mi - respondía Yoongi sonriendo - gane el premio mayor, ¿he?
Esa sonrisa . . . y esos ojos que desaparecían tras ella cada vez que decidía mostrarla al mundo, Yoongi le estaba llamando demasiado la atención, Yoongi le atraía.
-¿Jin?
-¿Qué? - preguntaba dándose cuenta que de momento se habia quedado callado mirándole.
-¿Cómo sigues de tu resfriado? No es por nada pero te ves . . .mal.
Si debía de estar delirando a eso se debía que estuviera viendo atractivo a aquel chico frente suyo, sentía ganas de suspirar con solo observarlo, el medicamento en definitiva en lugar de ayudarlo lo estaba empeorando.
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Después de tus cartas.
Fiksi PenggemarSeokjin recibe cartas de amor anónimas todos los días, uno de tantos su admiradora secreta decide que es tiempo de que ambos se conozcan y lo cita, solo que al llegar al lugar del encuentro no resulta ser exactamente quien imagino . . .