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Voy rumbo al norte gracias al mapa que me ha dado donde sale el camino más rápido para llegar al reino de Freya. Tardo alrededor de una semana más o menos en poder llegar a los dominios de Freya y por lo que puedo ver debe de hacer bastante frío pero yo no siento absolutamente nada, espero que aún me recuerde. Veo a lo lejos un enorme castillo blanco hecho creo que en parte de hielo, me acerco al patio y veo a varios hombres y mujeres entrenando con niños y adolescentes de gran variedad de edad entrenando muy seriamente y muy duro, casi sin compasión aunque yo lo haría de otra forma. Llego a la entrada y soy el centro de atención de todos, unos hombres se acercan y me apuntan con lanzas.

-¿Quién sois?, ¿y qué queréis?- pregunta seriamente, hago la lanza a un lado de mi rostro y arqueo una ceja

-He venido a ver a vuestra reina, vengo de parte de su hermana, y para que me crean díganle que su hermanita ha venido a verla- sonrío levemente al saber que ella me reconocerá así, el que habló le hace una seña al otro y este se retira y va hacia el castillo y entra en el edificio, tarda un tiempo y regresa con rapidez

-Dice su majestad que la dejemos entrar y atendamos su caballo- el otro a regañadiente baja el arma y me permite el paso, bajo del corcel y se lo llevan al establo, cojo lo necesario y me guían hacia el interior del edificio principal y estamos directamente en el salón del trono y la veo justo sentada en su trono, se le ve mucho más fría de lo que recuerdo, me acerco a ella con una leve sonrisa, está vestida con una gama de grises en su vestuario con partes metálicas brillantes y su cabello blanquecino con un leve recogido

-Cuanto tiempo sin vernos Freya- comento mientras me acerco y parece que está mirando tras de mí como si buscara a alguien- no, no ha venido, sólo yo, por mi seguridad me ha ordenado venir a aquí mientras que se acerca una guerra en el reino- explico desanimada

-Bueno, no pasa nada, ella buscará la manera de regresar al mundo de los vivos, es bueno verte aquí, has cambiado mucho desde mi partida, ¿qué ha sido de ti?- pregunta con una leve sonrisa

-Pues he pasado de ser Capitana a General y mano derecha de la reina, ahora soy la General Woods gracias a la victoria arriesgada que tuvimos en el bosque contra el rey Edward- le explico con orgullo

-Me he enterado de esa batalla, mis hombres han dicho que fue muy epica e impresionante y ahora no me sorprende que haya sido idea tuya, ¿has mejorado con tu magia?- 

-Sí, muchísimo- de repente siento un fuerte impacto en el pecho que hace que me encoja y caiga de rodillas preocupando a la peliblanca y ya sé lo que esto significa- al final tenía razón, el reino acaba de caer, la han matado- digo con lágrimas

-¿A quién han matado?- se agacha preocupada

-A Ravenna, a mi reina, mi amada reina- digo con lágrimas en los ojos mientras se escuchan los truenos de una tormenta acercarse bastante rápido, ella me rodea con sus brazos y hace que quede sobre su pecho mi cabeza y percibo una leve brisa, supongo que está bajando la temperatura por su tristeza

-Sé que duele perder a un ser querido, pero sé que ella regresará con nosotras, buscará la manera de hacerlo ya lo verás Cali, mientras tanto puedes quedarte aquí conmigo y mantener tu puesto como General y podrás si quieres, entrenar a mis soldados y buscarla- dice mientras me ayuda a ponerme en pie una vez me he recuperado

-Gracias Freya, de verdad, pero me gustaría poder descansar un poco, he tardado una semana en llegar y no he podido pegar mucho ojo, de verdad que no quiero ser grosera ni nada- 

-Claro, ven conmigo, le diré a una de mis guerreras que te traiga tus cosas mientras te guío a tus aposentos- llama a un cazador y le da la orden

-Gracias- digo decaída y seguimos hasta llegar a la segunda planta y frente a una gran puerta

-Espero que sea de tu agrado- abre la puerta y me deja pasar para ver una habitación bastante grande como la que antes tenía en el castillo Ravenna, con una enorme cama al fondo, un pequeño cuarto de baño y un gran armario junto también una gran terraza con barandilla

-Gracias Freya, es muy bonito- asiente con una leve sonrisa

-No tardarán en traerte tus cosas, aún falta tiempo para la hora de la cena, cuando sea el momento mandaré a alguien para que te guíe y con la misma también para que te enseñe donde puedes asearte y demás-

-Está bien, gracias por todo- asiente antes de retirarse y cerrar la puerta, me acerco a la terraza y me apoyo en la barandilla

-Hasta que nos volvamos a ver, mi amor…….-

Mi ReinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora