Capítulo 14: ¿Por qué has vuelto?

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La guinda del pastel de aquella despedida de soltera era la noche. Una noche de fiesta que Clarke esperaba que nunca olvidasen.

En esta ocasión no solo iban a participar las amigas más íntimas de la pareja, sino todos sus amigos. Quería una fiesta por todo lo alto con toda la gente que le importaba.

Se reunieron en el club de Anya, que había sido cerrado exclusivamente para realizar aquella fiesta privada. El lugar perfecto donde estar tranquilos y hacer lo que quisieran.

En cuanto entraron al local las recibieron el resto de amigos, saltando, abrazándolas y dándoles la enhorabuena, aunque ya lo hubieran hecho. Se notaba que estaban absolutamente felices por su futura unión ya que todo el mundo estaba esperando desde hacía tiempo

El alcohol comenzó a aparecer en escena, se hizo una ronda de chupitos para entrar en calor entre risas y bromas y enseguida la música comenzó a sonar a todo volumen.

De los chupitos pasaron a las copas y a bailar en medio de la pista como si no hubiera un mañana.

Hasta que de repente las luces se apagaron junto con la música dejando a todo el mundo en silencio y mirándose entre ellos totalmente confundidos.

Un foco de luz se encendió enfocando la plataforma que hacía las veces de escenario donde se podía ver una figura vestida con una túnica negra que la cubría por completo, incluso la cara que la tenía agachada y oculta tras una capucha. Difícilmente se podía ver quien era esa persona, aunque Lexa empezó a sospechar que era lo que iba a ocurrir a continuación.

Todo el mundo comenzó a prestar atención, intrigados, mientras que Lexa buscó con la mirada a Anya y la localizó en la pista de baile, prestando atención a lo que estaba sucediendo, pero Raven no estaba por ningún sitio.

Clarke apareció de repente en el escenario con un micrófono en la mano y vestida con un increíble vestido azul claro que le llegaba por la mitad del muslo, dejando sus increíbles piernas a la vista.

-Bienvenidos todos a esta despedida de soltera –comenzó a decir sonriendo ampliamente emocionada.

Todo el mundo comenzó a vitorear.

-Hemos tenido un día lleno de sorpresas y esto aún no ha terminado –continuó hablando cuando la gente se calló de nuevo- ¿Dónde está Anya? –preguntó de repente mirando entre la multitud.

Anya intentó esconderse algo avergonzada pero sus amigos no se lo permitieron, la cogieron de los brazos y la llevaron hacia el escenario.

Clarke aprovechó ese momento para acercar un taburete y colocarlo en medio del escenario, justo en frente de la figura tapada que aún no había movido un músculo.

-Creo que todo el mundo sabe cómo se conocieron Raven y Anya en el club de estriptis –prosiguió Clarke indicándole a Anya que se sentara en el taburete cosa que hizo con claro nerviosismo- Así que hoy queremos volver a aquel momento, aunque haciéndolo un poco diferente –se giró para dirigirse a Anya- Disfruta –dijo simplemente mientras le guiñaba un ojo.

La música comenzó a sonar y la figura tapada empezó a mover las caderas al ritmo de aquella música sin mostrar todavía de quien se trataba.

Se acercó con un andar sensual mientras Anya la observaba intensamente queriendo ver a través de aquella tela y completamente hipnotizada. No podía dejar de mirarla, de admirar cada movimiento que hacía, la forma en que la tela caía por aquel sedoso cuerpo dejando intuir las curvas del mismo.

Aquella persona rodeó a Anya rozando sus hombros con sus dedos para que la sintiese, pero sin dejar que se girase para verla. Cuando estuvo detrás de ella se inclinó acariciando el cuello de la otra con sus labios mientras se movía lentamente detrás de ella, dejando que sintiese los movimientos contra su espalda.

Si, mi Comandante (Clexa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora