Capitulo XVII

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Se encontraba comiendo helado. En su departamento contemplando su miserable existencia.

Ya, el amor tenía algo contra él. Si no era un sacerdote era un omega marcado.

A esta edad, se sentía patético.
Sin pareja y sin hijos como lo había planeado.

—Nikolas—Acaricio los cabellos blancos—No me puedes marcar, porque ya estoy marcado—Hablo con tranquilidad.

Se alejo del pelí-negro y este empezo a desabotonar la camisa, para luego mostrar la herida algo reciente.

—O sea que tienes pareja—Señalo.

Esto ya era el colmo ¿Podría ser peor? La persona que le gustaba estaba marcada.

—De echo, un Omega, Osamu, mi compañero de departamento—Aclaro para volverse a acomodar la camisa.

No, esto ya era demasiado. Casado y gay.

—¿Algo más que no sepa?—Pregunto con burla.

—Es una relación poliamorosa en donde también participa un alfa por parte de Osamu—Contesto cansado y con los ojos cerrados.

Esto ya...

No sabía cómo describirlo realmente. Si era por parte del castaño entonces el peli-negro no tenía tanto interés por los alfa realmente.

¿Tenía ganas de llorar? Sí, se hubiera nacido como Omega fuera tenía más oportunidades de las que tuvo en esta vida como alfa. Pero no.

¡No es justo Roberto!¡Yo siempre te he amado!—Grito la señora en la novela que estaba viendo.

—Yo también lo ame—Susurro para meter otra cuchara de helado a su boca.

Si hubiera nacido Omega, hubiera salido con aquel chico en preparatoria. Si hubiera nacido Omega aquel sacerdote no hubiera visto su amor tan repugnante y si hubiera nacido Omega tal vez el peli-negro le hubiera parado más.

¿Si quería una relación? Sí, una bien bonita.

¿Que ya había pensado en una vida juntos? Sí, ya tenía el nombre para sus hijos y perros. Y los apodos que le pondría a Fyodor.

¿Que tan malo sería entrometerse en una relación de alguien más?

Era una pregunta que dependía de cada quien y de la situación.

Pero no se veía tan mal entrometerse en la relación de alguien mas...

Era para el bien de las humanidad!

Dos Omegas no podían tener hijos, por lo tanto la familia Dostoyevsky se quedaría sin descendencia por tener solo un hijo ¿Dejaría que una familia desapareciera cuando el podría tener la oportunidad de ayudar? Eso no sería moralmente correcto¿Verdad?

Y así ha surgido una idea.

Dejo su helado de lado y fue rápidamente a vestirse a su cuarto. Tenían más de un mes sin hablar con el peli-negro, por lo tanto esto podría ser una disculpa.

Tal vez tres no sea un mal número Donde viven las historias. Descúbrelo ahora