No era la primera vez que esto sucedía...sin embargo, las sensaciones y el miedo eran igual o peor. Con mis ojos entrecerrados, pude ver a mi gran amigo tirado en el suelo, retorciéndose de dolor tras la serie de patadas que el CEO había descargado sobre él.- P...Pare... - dije a duras penas a la vez que agarraba mi cabeza con mis manos.
No fue hace muchos minutos, cuando este hombre - si se le puede llamar como tal - me proporcionó tal empujón agresivo que caí al suelo de nuevo y mi cabeza rebotó contra este.
Tras la explosión a gritos que tuvo el jefe, empezó a llenarnos de golpes, patadas y palabras malsonantes...se estaba desquitando con nosotros de una manera horrible...peor de lo normal. Y lo peor aún es que...no sabíamos exactamente qué habíamos hecho. Según lo que entendí, se trata sobre algo que diríamos en las charlas y entrevistas a lo largo del programa pero, por más que intente recordar...no habíamos dicho o hecho nada que perjudicase a la empresa.
De igual forma...solo nos quedaba aguantar hasta que terminara, pues no teníamos fuerzas ni valentía como para enfrentarnos contra él.
Probablemente fueron unos minutos, pero para nosotros fueron unas tortuosas horas llenas de dolor y sufrimiento...y gracias a que su "mano derecha" le dijo que se calmara y que ya era suficiente, sino, el CEO hubiera seguido maltratandonos.
- Escoria humana, sois de lo peor. Uno os ayuda pero vosotros sois unos desagradecidos - escupió.
Tras aquello, y con mala gana, se puso su chaqueta, el ayudante abrió la puerta, y se fueron de allí, no sin antes cerrar la puerta por fuera, impidiendo por completo que ninguno de nosotros dos saliera...o que alguien del exterior entre.
Miré a mi amigo, quien mantenía sus ojos cerrados.
- D...Dan - dije a la vez que limpie la sangre que salía por la comisura del labio - Dan... - volví a pronunciar a la vez que me acercaba hasta él.
Por favor, que solo esté descansando...que no esté inconsciente...
- Daniel, háblame - dije a la vez que movía su cuerpo una vez que llegué hasta él.
Pero no se movía...no daba señales de vida.
- ¡Dan, despierta! - grité cada vez más asustada.
- ¿¡Mary!? ¿¡Qué ocurre, Mary!? - escuché la voz de Chan al otro lado de la puerta.
- ¿Esto está cerrado? No puedo abrirla - escuché a otro de ellos murmurar.
- ¡Abre! - habló en voz alta Minho.
- ¡N...No puedo...! - dije controlando mi voz - ¡Estamos encerrados! - grité para que pudieran escucharme.
Que rompieran la puerta sería una auténtica pesadilla para nosotros...pues seguramente alguien de la calle los vería, comenzarían los rumores, y, aunque nadie viera que unos chicos quebraron la puerta, el CEO nos mataría si viera lo que "le hemos hecho a la puerta"...ninguna opción era buena...
Pero el tiempo de Dan cada vez era menor...
****
La situación se estaba saliendo de control. Tanto que, incluso en la calle, comenzó a haber más ruido de lo normal...y aquello hacía que mis nervios aumentaran cada vez más, pues eso solo significaba que la gente estaba empezando a darse cuenta de que algo sucedía.
- Vamos Dan – pronuncié casi en una súplica.
Al fijarme en él, pude empezar a notar la gravedad de sus golpes. A simple vista no se podían percibir del todo bien, pero si sabes que le han estado dando patadas y en su estómago empieza a aparecer una marca rojiza cada vez más oscura...podría llegar a ser una hemorragia interna y aquello podría ser de lo peor que podría suceder.
- Por favor... - repetí al borde del llanto.
Corrí hasta la puerta e intenté abrirla a base de empujones.
- ¿Qué está ocurriendo? – dijo Minho alterado.
- ¿Qué es todo esto? – preguntó esta vez Chan.
Yo no respondí a aquellas preguntas...no tenía la fuerza suficiente, por lo tanto, me quedé escuchando todas sus palabras a la vez que, entre todos, intentábamos forzar la puerta para poder abrirla...había una vida en juego y ya me daba igual lo que la gente de la calle comenzara a rumorear. Mi amigo era mucho más importante.
- ¡Empujad! – le gritó Chan a los chicos.
Entre todos, conseguimos doblar la apertura de la puerta y poder abrirla.
Nada más conseguir esto, nos quedamos mudos, mirándonos unos a otros, como esperando a que la otra persona respondiera o dijera algo, pero era como si estuviéramos completamente petrificados. Noté como los ojos de algunos de ellos se desviaron a lo lejos, detrás de mí, al cuerpo inconsciente de Dan.
- ¡Daniel! – gritaron algunos a la vez que corrían hasta este.
- ¿¡Qué os ha pasado!? – preguntó Chan a la vez que ponía sus manos sobre mis hombros y me movió.
- P...ue....El....Ceo....luego....cogió...Dan... - por alguna razón, era incapaz de pronunciar palabra alguna.
Ante esto, Chan se apresuró a abrazarme...noté sus brazos cálidos rodear mi cuerpo como diciéndome "no te preocupes, aquí estoy"...y aquello me dio la vida. Ahora si que tuve que luchar con todas mis fuerzas para no llorar en ese preciso instante.
Tras unos segundos abrazados, me separó de él y comenzó a revisarme la cara y algunas de las heridas más visibles que tenía.
- ¿El CEO hizo esto? – preguntó completamente anonadado a la vez que sostenía mi barbilla con su mano para revisar mi cara.
Yo miré hacia abajo y asentí.
- Tsk! – masculló enfadado - ¿¡Qué clase de persona...!? – empezó a gritar muy molesto...pero yo me asusté y él lo notó – Lo siento...ven, vamos – habló algo más animado para levantar el ambiente.
Nos acercamos hasta donde estaba Dan y el resto de los chicos, intentando hacer que reaccionara a la vez que Minho hablaba por teléfono.
- Vienen en quince minutos...este sitio está bastante alejado de todo – habló este una vez que colgó la llamada.
¿Qué?
- ¿Has...llamado a la ambulancia? – pregunté más preocupada que aliviada.
- Obviamente – respondió.
Caí de golpe, sentada en el suelo, mareada, sin saber como reaccionar a todo esto...
No podíamos ir al hospital...era un completo error.
Hasta aquí el capítulo de hoy ¡Espero que lo hayáis disfrutado muchísimo!
¡Muchas gracias por todo el apoyo! ¡Nos vemos en otras historias!
AUTORA DE: Kaori, la esfera mágica.
EDITORIAL: Ediciones Arcanas.
*Si quieres un ejemplar, háblame por mensaje directo, comentario *
♡¡Hasta pronto!♡
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Hasta la última canción - Bang Chan - Stray Kids
FanficDesde que nacemos, empezamos a desarrollar gustos. Poco a poco, tenemos nuestros primeros sueños: ¡ser una princesa! ¡Tener un dinosaurio! - estos suelen ser bastantes imposibles. Conforme crecemos, llegan los más realistas - ¡Policía! ¡Médico! ¡Vet...