Tras su muerte, el abuelo Lee dejó su herencia para uno de sus cuatro nietos mayores. El único requisito es que tendrán que dejar la casa de los padres e irse a vivir a la mansión del anciano por un año, y claro, tendrá que fingir estar en una relac...
El fin de semana llegó muy rápido y con él las malas noticias.
—Me rechazó. —Chenle estaba aplastado como un bulto en la cama de Donghyuck. Estaba boca abajo con las piernas y los brazos abiertos mientras hacía berrinches sobre la almohada.
Donghyuck lo veía con los brazos cruzados. Estaba sentado en una silla mientras veía a su "pequeño bebé" sollozar. En cierta manera entendía lo que significaba ser dejado por alguien que te gustaba, pero por otra parte, en el caso de Chenle, era mejor así.
—Le dije que dejara de jugar contigo, me alegra que me hiciera caso. —Mencionó Donghyuck con un suspiro resignado. —Él no te quería, te iba a romper el corazón.
—Yo quería que me lo rompiera, incluso le ofrecí dinero, podía compartir con él mi herencia y comprarle cosas, ¿No dicen que todos buscan dinero y eso? —Chenle se escuchaba decaído.
—Las personas que realmente te aman no buscan tu dinero, Chenle. —Explicó Donghyuck con seguridad, él, más que nadie, sabía el peso de esas palabras.
—¿Pero qué clase de persona te rompe el corazón para no lastimarte en el futuro? —Chenle frunció el ceño. Ni siquiera le habían dejado intentarlo, él estaba seguro de que podía hacer feliz a Sungchan, pero ni siquiera se lo permitió. —Eso es de cobardes.
—No sabes lo que dices, romper el corazón antes de que haya grandes consecuencias es preferible. —Donghyuck cerró los ojos y soltó un suspiro cansado, a veces es mejor dejar ir, antes de que todos salgan lastimados. —Es de valientes, pero en ese caso, Sungchan no te quería, Chenle, solo le parecías entretenido...
—¿Cómo sabes qué no me quería? Me trataba bien...
—Mark y yo también te tratamos bien. —Donghyuck suspiró, no podía decirle a Chenle que Sungchan se le había declarado unas horas antes de que Zhong apareciera y eso lo enojaba bastante, nadie se metía con su hijo y con él al mismo tiempo. Jung debía ser sincero con sus sentimientos y le alegraba que fuera claro con Chenle, así como él fue claro diciéndole a Sungchan que amaba a Mark. —Y nuestro amor es muy diferente.
—Lo sé. —El menor bajó la vista. —¿Ya me dirás por qué Mark se fue de la casa? —Su voz se oía tan triste y dolida que a Donghyuck no le gustaba oírlo así.
—Él y yo terminamos. —Su voz fue pesarosa, casi en susurro porque si lo decía en voz alta se hacía más real y el hecho de que se hiciera real decía que Donghyuck podría haber perdido al canadiense para siempre.
—¿Dejaste de quererlo? —Preguntó Chenle con decepción.
—No, él dejó de quererme a mí. —Habló con tristeza.
Chenle se quedó callado, ¿Por qué Donghyuck decía eso? Mark se veía tan preocupado por Donghyuck la última vez que lo vio. ¿Qué estaba pasando entre ellos?
—Solo dime que no fuiste tú quien lo golpeó. —Mencionó Zhong con una cara llena de arrepentimiento por su pregunta, no le gustaba dudar de su "padre". —Y que por eso no terminaron, porque odiaría que fueras un novio violento...
Donghyuck abrió los ojos con sorpresa. No esperaba esa pregunta. No esperaba que Chenle confirmara sus sospechas.
—¿Cómo sabes que Mark fue golpeado? —Cuestionó levantando la ceja.
Zhong le sonrió. Estaba seguro de que Donghyuck no había sido y también estaba seguro de que Donghyuck no era un cobarde como para dejar escapar al amor de su vida.
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