Heirs (JT, MH, NM, DT)

Capítulo XLVII

—¡Me rechazó! —Chenle estaba haciendo pucheros mientras le contaba la historia al mayor.

—Es un tonto. —Mark acarició la cabeza de su niño. —¿En serio? ¿Quién podría alejarse de un niño tan precioso?

Mark jaló las mejillas de Chenle y Zhong solo sonrió con puchero adorable. El corazón de Mark se sentía consolado de ver al niño y de tenerlos al menos un instante con él, pero tendría que ser sincero.

—Tú. ¿Cuándo regresarás? —Mencionó Zhong con un destello en su mirada.

—No voy a regresar, Chenle. —Mark fue directo, ya no quería seguir mintiéndole a su pequeño. —En cuanto pueda pararme de aquí, voy a salir del país y no regresaré nunca.

Ya no era un lugar seguro, si Yuta lo encontraba seguramente lo mataría. Sabía bien que Yuta tenía lazos con gente peligrosa, no dudaba que hubiera aprendido muchas tácticas de tortura de su clan.

Chenle abrió la boca, estaba decepcionado de oír esas palabras por parte del mayor.

—¡No! —Zhong casi se ponía a llorar. —No te puedes ir. ¿Jamás te volveré a ver? No me hagas esto. Es como si estuviera destinado a perder a cada "padre" que tengo...

—No soy...

—Lo eres, mis padres eran biológicos y se fueron, mi tío Baekhyun era mi padre adoptivo y se fue, y tú eres mi padre y hermano mayor en el juego de la herencia. ¿Por qué te tienes que ir?

—Prometo no morir...

—¡Eso no me ayuda! ¡Te quiero conmigo! —Gritó. Chenle en verdad no quería perder a nadie más, no podía, no era tan fuerte como todos creían. —¿No puedo ser un poco egoísta? ¿No puedo pedirte que te quedes?

—No puedo hacer eso, sería ponerlos en peligro. —La voz de Mark sonaba tan decepcionada, lo había pensado, lo mejor sería huir, lo mejor sería volver a alejare de todos para no arriesgar todo.

El canadiense podía entender a Chenle, por una parte, él nunca había entablado relaciones demasiado profundas, sus amistades eran compañías de juego, excepto Johnny, porque sabía que Johnny tenía los medios, recursos e inteligencia, para protegerse; pero Chenle, Donghyuck y sus nuevos amigos de la mansión, ellos no tenían la culpa de las malas decisiones que había tomado en el pasado.

—¿Y qué pasará con Donghyuck? ¿En serio lo vas a dejar así? —Preguntó Zhong. —Ustedes se aman.

—Él encontrará a alguien más y me superará. —Le dolió decir esas palabras. — Se olvidará de mí en unos meses y podrá rehacer su vida, posiblemente me odie y odie a Johnny por no hacerlo ganar la herencia, pero Johnny es un buen sujeto, ellos de verdad deberían arreglar sus problemas. Necesito encargarle a Donghyuck a Johnny. —Mark negó con la cabeza tratando de pensar con claridad. —¿Puedes decirle a Johnny que entre? Necesito hablar con él, quiero pedirle un favor.

—No sé dónde esté. —Chenle suspiró.

—¿Qué no te trajo él? —Cuestionó Mark.

—No, Jeno condujo todo el camino, queríamos verte sin que Johnny se enterara...

—¿Jeno querían verme? —Cuestionó Mark. —¿Él también?

Chenle negó con la cabeza, Jeno se encontraba en el auto esperando a que salieran, Chenle le pidió el favor de que fuera su chófer y lo llevara a la pequeña clínica a las afueras de la ciudad donde se encontraba Mark.

—No él, Chenle y yo queríamos verte. —Mark sudó frío cuando lo vio entrar por la puerta, su respiración se agitó. —Chenle, ve con Jeno, tengo que hablar con Mark a solas.