27 de mayo de 2022
La semana había pasado rápido.
El martes había ido a las oficinas de Mónaco Lux a hablar con la marca y habíamos llegado al acuerdo de que sería la nueva cara durante el próximo año. Me pagarían una buena cantidad por cada publicación que subiera con prendas de sus colecciones, y es que en Mónaco, todo se hacía a lo grande.
El miércoles Naia se quedó a dormir. La noté un poco inquieta, pero decidí no preguntarle, igual eran cosas mías o simplemente no quería contarme.
Hoy por fin me habían sacado la venda del pie y podía andar con normalidad.
Ahora mismo acababa de salir de casa, ya había comido y me dirigía al paddock que esta semana había invadido las calles de mi ciudad.
Pasé los controles y me dirigí al box de Ferrari. Hacía calor, así que había elegido una ropa veraniega de Mónaco Lux, aprovechando para hacer promoción, y lucía con orgullo sobre mi cabeza una gorra del equipo que Charles me había dado.
Saludé a algunas personas que conocía y caminé directa hasta el box, me coloqué a un lado y puse los auriculares sobre mis orejas para escuchar las radios.
Generalmente, los libres eran aburridos, pero cada vez que Charles salía a pista centraba toda mi atención en la pantalla.
Para él, este fin de semana era el más importante de la temporada. Era su Gran Premio de casa, todo el mundo quería que Charles Leclerc ganara en Mónaco y sonara el himno del Principado al finalizar la carrera.
Mi teléfono vibró cuando el primer libre acabó.
Helena
Los niños quieren verte.
¿Quedamos fuera del box de Red Bull?
Respondí con un breve sí.
Entre Helena y yo no había ningún problema. Aprovechando que estas semanas habían estado aquí, quedamos bastante con mis hermanos.
Charles bajó de su coche y se quitó el casco para hablar con sus ingenieros. Como había llegado cuando los libres ya habían empezado, todavía no nos habíamos visto en todo el día.
Después de unos minutos se acercó y me dio un beso corto.
Todo el mundo sabía de nuestra relación desde que Charles subió la publicación a Instagram, ni siquiera me avisó, pero me hizo muy feliz abrir la aplicación y encontrar la foto.
- Voy a ir con mis hermanos - le informé.
- Tengo algo de trabajo, pero si puedo me paso luego.
Nos despedimos y caminé hasta donde había quedado con Helena. Brandon, al verme, salió corriendo y me agaché para alzarlo.
- Dios mío - besé su mejilla - cada día pesas más.
Caminé hasta Helena y la saludé, dejándolo en el suelo.
- ¿Y el otro? - miré a mi alrededor.
- Dentro - respondió.
Asentí y miré hacia el interior.
No tenía pase y, aunque lo tuviera, no entraría.
- ¿Cómo están mis pequeños favoritos? - se acercó Arthur, que pasaba por allí - bueno, mi pequeño, porque falta uno - despeinó a Brandon.
Se unió a la conversación y unos minutos después Alex salió de dentro con alguien de la mano.
- ¡Bibi! - me saludó - mira, este es Mason.
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RED BLOOD - CHARLES LECLERC
Fiksi PenggemarBianca y Charles tienen una relación cargada de odio desde que se conocieron en el colegio. A lo largo de los años, su odio se ha mantenido, incluso compartiendo el mismo lugar de trabajo en la actualidad. A pesar de tener un vínculo en común, ya q...