Aflicción

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Por muy tranquilos que fueran los días en el Hotel Nokori, nada podía borrar la marca causada por la muerte en sus tres nuevos habitantes. Sus viejos amigos permanecían atados a sus recuerdos. Incluso cuando escapaban de ellos en las horas del día, no tardaban en dormirse para que los fantasmas siguieran atormentando a los vivos.

Debería haber dieciséis estudiantes felices riendo por algo mundano o intentando alcanzar torpemente un romance. No tres estudiantes traumatizados escondidos en un hotel vacío, volviéndose locos por el aislamiento, pero raramente con el valor suficiente para abandonar la seguridad de sus paredes.

Y es en ese estado, al borde del colapso total, en el que habían permanecido desde su llegada. Hablar específicamente de los demás no les era posible. Cualquier intento de hacerlo era respondido con más dolor y gentiles afirmaciones de que debían dejar el pasado.

Su cuidador había hecho mucho por ellos, pero no era demasiado empático.

Finalmente, tras semanas en este limbo, Himiko fue la que habló. "Todos nos hemos vuelto locos desde que llegamos aquí... Quiero hablar sobre los demás, no intentar pasar página... ¡No estoy preparada para hacerlo! ¡Quiero hablar de ellos! Quiero recordarlos y sentir cosas por ellos".

Shuichi levantó la vista de su libro con una mirada rota, y Maki dejó escapar un soplo por la nariz. "...No podemos seguir así". Dijo finalmente Shuichi, colocando un trozo de papel en el libro antes de ponerlo sobre la mesa. "Himiko, di lo que tengas que decir".

"Los extraño mucho... ¡Siempre que pienso en ellos, es como si los perdiera de nuevo! Pero no quiero dejar de pensarlos, porque si dejo de hacerlo... ¡Entonces es como si realmente fueran ficción y no importaran! Hay tantas cosas que quiero decir... Pero ya no puedo decirlas, y eso me entristece..."

"Todos estamos tristes, Himiko". Dijo Maki.

"¡Pero no sólo estoy triste! Estoy feliz por el tiempo que pudimos pasar juntos... Y..." Apartó la mirada de sus compañeros. "No sé por qué... Pero también estoy enojada. No sólo con Monokuma y Tsumugi, ¡sino que me siento así con todos ellos por estar muertos! Me duele y no puedo hacer que pare, ¡y no sé por qué!"

Shuichi se mordió el labio. "¿Tú también? Yo estoy furioso. No sólo por lo que el Team Danganronpa les hizo... Sino porque cada uno de ellos terminó participando en el asesinato mutuo. Los quiero a todos con todo mi corazón... así como también los odio". Shuichi moqueó. "Es muy jodido decir que odias a una persona muerta- ¡Especialmente a múltiples víctimas de terribles atrocidades! Pero Kaede me utilizó como parte de su trampa para matar a la mente maestra, Rantaro prefirió hacer todo él solo... Kirumi decidió que el mundo estaba mejor sin nosotros- Ryoma dejo que lo mataran- Kiyo tomo dos vidas sin razón..."

"Angie murió porque rompió su estúpida regla..." Dijo Himiko, frotándose los ojos. "Y Tenko murió en mi lugar..."

"Miu consiguió que la trampa de Kokichi funcionara. Gonta fue la única razón por la que salió bien". Añadió Maki.

"Kokichi... no sé ni por dónde empezar con lo enojado que estoy con él... Pero lo hizo para salvarnos- Y Kaito- Kaito era mejor que todos nosotros- ¡No se suponía que Kaito matara a alguien!" Dijo Shuichi, con lágrimas llenas de emoción que comenzaban a fluir libremente.

"Debió dejarme ser el culpable. Él no debería estar muerto, yo debería estarlo-"

La habitación se quedó en silencio cuando Maki finalmente dijo en voz alta lo que había estado pasando por sus mentes. "...Por eso estamos molestos..." Dijo Himiko. "Nos dejaron aquí así... Me hace mucha falta Tenko, Angie, Kaede, Kaito e incluso Kokichi y me duele... Y ya no están aquí para arreglarlo, ni para molestarme..."

"Nunca tuvimos tiempo de lamentarnos durante el juego". Dijo Maki. "Siempre había algún peligro o algo nuevo que descubrir".

"Ahora que estamos fuera, tenemos tiempo para procesar todo esto, para lamentarnos... Y tiempo para que esta vez nos duela de verdad". Shuichi murmuró.

"Todos somos terribles..." Himiko dijo con un sollozo ahogado. "¡Los llamamos nuestros amigos, a pesar de que acabamos de decir que los odiamos!"

"Hicieron cosas cuestionables en el mejor de los casos, y horribles en el peor". dijo Maki.

"...Fuimos creados para no poder procesar esto adecuadamente, para que haya más drama y tensión". Murmuró Shuichi. "Si fuéramos capaces de procesar toda esta mierda de forma sana y seguir adelante, no sería una historia interesante, ¿verdad?". Dejó escapar un suspiro y empezó a hojear de nuevo su libro. "Si no recuerdo mal, la ira es parte del proceso de duelo... Allá vamos".

"Es común que los que experimentan el duelo manifiesten sentimientos intensos de ira. Contra sí mismos por lo que hicieron o dejaron de hacer mientras su ser querido estaba vivo, contra la situación que condujo a su muerte, o contra los propios seres queridos por morir y abandonar a los afligidos."

"No puedo creer que nos hayas citado un libro de psicología, ¿de qué nos sirve eso ahora?" preguntó Maki.

"...No lo sé. Supongo que al menos demuestra que no somos completamente irredimibles por estar molestos con ellos, y que al menos aún hay algo de normal en nosotros."

"No me gusta estar molesta con ellos... ¿Podemos pasar ya a la siguiente fase?" Dijo Himiko, acariciando suavemente a su gatita.

"No creo que podamos apurarlo..." Dijo Shuichi. "Aunque me gustaría que pudiéramos saltar directamente al final ahora mismo..."

"Supongo que lo único que podemos hacer ahora es esperar a que las cosas mejoren..."

𝐒𝐓𝐎𝐑𝐈𝐄𝐒 𝐅𝐑𝐎𝐌 𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐔𝐑𝐕𝐈𝐕𝐎𝐑 𝐓𝐑𝐈𝐎 | ᴛʀᴀᴅᴜᴄᴄɪᴏ́ɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora