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El ambiente en Phillips-Town estaba siendo muy tenso, en cuanto sonó el timbre todos salieron rápido y sin decir una palabra. Incluso los profesores evadían cualquier tipo de conversación.

Los salones comenzaban a estar vacíos, solo que en el aula 13 aún se encontraba Momo guardando sus libros. Sana no la esperó y se fue. Al principio no le dio mucha importancia, pero cuando vio que estaba sola empezó a preocuparse.

Buscó su celular para llamar a sus amigos y escuchó un silbido que la dejo congelada.

-Mi día si que mejoró- miro hacía la puerta y allí estaba, Lucas.

-No esperaba encontrarte aquí, sobre todo porque no está contigo el marica de tu novio- Caminaba muy lento hacía ella, el cuerpo de Momo no reaccionaba.

-No entiendo como un tipo como Elliot puede tenerte en su cama, eres mucha mujer él- le acarició la cara.

-No me toques- su voz salió tan débil que Lucas se río de ella.

-Ya lo hice una vez, y no te imaginas lo bien que se sintió- el estómago de Momo daba vueltas al sentir las manos de Lucas sobre su cintura.

-Por favor, no me toques- intentó zafarse pero solo consiguió que Lucas la empujara contra una mesa.

-No puedo evitarlo, tengo una adicción con tu cuerpo desde que estuve dentro de ti- la besaba en el cuello y le apretaba las piernas con mucha fuerza.

Quería gritar pero su voz no salía, tenía nauseas y no se lo podía quitar de encima, sintió aún más miedo cuando vio que Lucas comenzaba a quitarse el cinturón. Lo peor se acercaba y deseaba con todas sus fuerzas morirse en ese precisó instante. 

Cerró los ojos para no ver lo que pasaría pero un grito la hizo reaccionar.

-QUE MIERDA ESTAS HACIENDO- su ángel de la guarda había llegado.

Dejo de sentir presión en su cuerpo y abrió los ojos de inmediato. Lucas se retorcía de dolor en el piso. Mina tenía en sus manos lo que parecía ser la escoba del conserje.

-OTRA VEZ TÚ?- Le gritó antes de recibir otro golpe en la espalda.

-LA VUELVES A TOCAR Y JURÓ QUE TE MATO A GOLPES IMBECIL DE MIERDA-

-HIJA DE PERRA- No pudo aguantar su irá y lo golpeó repetidas veces hasta quebrar el palo de la escoba.

-Mina ya basta, vámonos de aquí antes de qué alguien más venga- Momo trataba de sujetarla, por suerte Elliot llegaba y entre ambos la sacaban a rastras del salón.

-ESTOY HARTA DE ÉL DEJENME MATARLO- parecía una niña haciendo berrinches, sino fuese por la fuerza de Elliot tal vez si hubiese regresado.

-NO DEJAREMOS QUE ARRUINES TU VIDA POR SU CULPA- Elliot la llevaba casi cargando, pensó que sería difícil tranquilizarla pero a lo lejos vio a alguien que sin duda iba a calmarla.

-¿POR QUÉ LA TRAES CARGANDO? ¿LE PASO ALGO?- Chaeyoung se acercaba rápido a ellos.

-No le paso nada, pero, trata de calmar a tu pequeña bestia- Bajó a Mina, quiso correr pero la atrapó de nuevo e hizo que se sentara en una banca.

-Explícame porque parece que tuvieras rabia- Chae se cruzó de brazos tal como si fuese su madre.

-ES QUE, LUCAS, ÉL, ESTABA- no se entendían las palabras que gritaba.

-Minari, estas muy alterada, necesito que te tranquilices o te quitaré la pulsera que te regalé- señaló el objeto que tenía en su muñeca.

-ES QUÉ-

-Minari, ya dije, o mejor sabes que haré? Dejaré de acariciarte las piernas- se escuchaba tan inocente, pero por la cara de Momo y Elliot parecía algo un poco pervertido y extraño.

Se tranquilizó tal como le pidió y le contó lo que había pasado. Chaeyoung no podía asimilarlo, es decir, si sabía que Lucas era muy idiota pero no a ese grado, y hasta cierto punto era entendible la reacción de Mina.

-Creo que la salida de mañana nos vendrá bien para olvidar lo que pasó- Elliot se sentaba junto a ella.

-¿Por qué no vienes con nosotros Chaeyoung? Iremos a un antro- Momo era inteligente, ya se había dado cuenta de lo que pasaba entre ese par.

-No lo sé, no creó que mis padres me den permiso, además aún no tengo identificación- era un de los tantos problemas que podía tener.

-Bueno pero eso se puede arreglar, nosotros usaremos identificaciones falsas- respondió Momo, a pesar de lo ocurrido lucia tranquila.

La bocina de un auto llamó su atención, la madre de Chaeyoung había llegado por ella.

-Debo irme, mañana les digo si voy o no- se dio prisa y cruzó corriendo la calle.

Pudo ver que su madre estaba distraía con su teléfono, casi llegaba al auto cuando sintió que sujetaron su mano.

-Hasta mañana pequeñita- Mina había ido tras ella solo para darle un beso en la mejilla y le sonrió antes de regresar corriendo a donde estaban sus amigos.

-¿QUE ES LO QUE ESTA PASANDO ENTRE USTEDES?- le preguntaron una vez que vieron que el auto se puso en marcha.

-De que hablan?- intento disimular buscando su celular para escribirle a su madre.

-No somos tontos Mina, hay una tensión entre ustedes- Elliot le quito el celular y lo escondió detrás de su espalda.

-Por favor solo, somos amigas- quiso quitárselo pero su amigo era más alto y le fue imposible alcanzarlo.

-Pues yo tengo amigas y no voy corriendo hasta ellas solo para darles un beso- Elliot le daba el celular a Momo.

-En serio, solo somos amigas- trataba de quitárselo pero cada vez su amiga se alejaba más de ella. Era como ver a dos niñas jugando.

-Si tú lo dices, pero no te dejaremos de molestar- Momo le entregó su celular y pudo escribirle a su madre.

Acompañaría a sus amigos a buscar las identificaciones; tomaron un autobús que los dejara cerca del centro comercial South Wilde. Por lo que les dijo la hermana de Momo tenían que buscar a un chico alto pelinegro que reaccionara al nombre V.

-¿Sera él?- Elliot señaló a un chico bien vestido que tomaba un café junto a otra persona.

-No puede ser cierto- pensó Mina al ver que Jungkook estaba allí.

-Disculpa, V?- aquel chico volteo y los miro de pies a cabeza.

-Se les ofrece algo?-

-Soy la hermana de Mako, tenemos un encargo contigo- habló un poco tímida.

-Vaya, con todo respeto las hermanas Hirai sí que son hermosas- la sonrisa de V hizo sonrojar a Momo, pero detrás de él Jungkook lucia algo molestó.

Sacó de su mochila dos paquetes blancos y les explicó lo que tenían dentro. Les pareció extraño que solo fueran dos identificaciones si son 3 personas.

Mina les dijo su edad y en verdad se sorprendieron, sobre todo a Jungkook, no le pareció muy correcto que su hermana se fijará en alguien mayor a ella.

(...)
Cuando Chaeyoung llegó a casa intento disimular su emoción, pero es que no podía, su corazón dio mil vueltas por aquel beso. Ahora si comenzaba a sentir más que una atracción sexual.

La tarde caía, eran casi las 7:30 pm y la cena estaba lista, la familia Son se encontraba en el comedor conversando sobre las clases y trabajo hasta que salió a relucir el tema de Daniell.

-No me puedo imaginar lo que sintieron al encontrar a su hijo muerto- La señora Son tomaba la mano de su hija.

-Si alguien llegase a molestarte prometo que lo torturare- Jungkook mordía de malas ganas su sándwich de mermelada.

-Creí que no me querías- su hermano la miró de inmediato y entrecerró los ojos.

-Eres mi hermanita, te quiero aunque parezcas enanita de Blancanieves- incluso su madre se río por ese comentario, Chae quiso golpearlo pero al no alcanzarlo mejor le tiró un pan en la cara.

El teléfono de su padre sonaba en alguna parte de la sala, se levantó de la mesa y fue a contestar.

-Confirma nuestra asistencia por favor- regresaba ya con el teléfono en la mano.

-¿Pasa algo? ¿A dónde irán?- preguntó su hijo.

-Mañana tenemos una cena con el presidente en Greensboro, estarán todos los psicólogos y analistas del estado de Georgia, nos iremos mañana por la mañana y regresaremos el sábado por la noche- miró a sus esposa y después a sus hijos.

-Nos quedaremos solos entonces- Jungkook se dirigió hacía su madre. Mientras, la mente de Chaeyoung comenzaba a unir los puntos, tenía una oportunidad para salir.

-Así es, les dejaremos comida lista y dinero por cualquier emergencia. Eso sí, no quiero nada de fiestas ni extraños en casa, solo pueden invitar máximo a dos de sus amigos, no más- esta vez la señora miraba a ambos.

-Tal vez su hermana llegué el sábado por la mañana, nos avisó hace media hora- el señor Son aprovechaba para servirse más carne.

-No puede ser, me cobrará el dinero que le debo- Jungkook se tomaba de la cabeza.

-Nuestra hermana viene de regreso y a ti solo te importa eso?- para ella la noticia era más que buena, extrañaba demasiado a su hermana, sobre todo porque así ya tendría con quien hablar mientras su madre no esta.

-Chaeyoung no lo entiendes? ME GOLPEARÁ CUANDO ME VEA- actuaba como si fuese a perder la vida.

(Casa de los Myoui)
Mina salía de bañarse y estaba lista para terminar su tarea. Al llegar a casa lo primero que hizo fue comer porque en serio moría de hambre. Pasaron 40 minutos en los que leía y leía su libro de química pero no entendía nada. 

Loser & Lover     °Michaeng°    (G!P) ☢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora