𝑪𝒉𝒂𝒓𝒍𝒊𝒆//𝑻𝒘𝒊𝒍𝒊𝒈𝒉𝒕

𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 37:

Vi Bella salir de la casa y pude leer un fragmento de su mente, tenía una pista para encontrar a Alice y Jasper. Gracias a lo que puse atención del entrenamiento de Bella, ahora soy capaz de cerrar mi mente. Por lo que esa pista debería bloquearla como si nunca la hubiera visto.

— ¿Todo en orden?.- me preguntó Emmett y yo asentí.

— Solo pensando en todo este asunto de los vulturis.

— Quería hablar contigo de algo.- dijo serio y yo lo miré, usualmente no era serio.- quiero aclarar que Rosalie es más mía que tuya.- solté una carcajada al escuchar eso.

— Claro Campeón.- lo miré burla y él soltó un bufido.

— Es en serio, yo la conocí primero, además que soy su esposo.- reí, pero luego me calle al verlo serio.

— Emmett, sé que Rosalie nos ama a los dos, por igual que tú la hayas conocido primero no cambia nada.- aclare.- yo amo a cada una de esas mujeres por igual, sé que puede ser difícil compartir, pero jamás escucha, jamás le pediría a Rose que se aleje de ti.- di pequeñas palmadas en su hombro.- Rosalie es nuestra.- el suspiro pero asintió.

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Mire Bella guardando unas cosas en una mochila y al leer su mente suspiré viéndola desde la puerta escribir una carta.

— Así que eso fue lo que pasó.- murmuré haciendo notar mi presencia.- ¿Solo Jacob y Nessie?.- pregunte con un nudo en mi garganta.

— Char.- volteo espantada.- me espantaste... ¿Cómo lo sabes?.- señale su cabeza.- eso es invadir mi privacidad.

— No lo hago queriendo, solo pasa y lo vi sin querer, además tranquila, nadie puede meterse aquí si yo no quiero.- señale mi cabeza.- al parecer si es mi don.

— Interesante.- pero su mirada perdida me hacía darme cuenta de que necesitaba un abrazo, por lo que me acerque a ella y la abrace con fuerza.- No veré crecer a mi niña.- dijo con lágrimas en los ojos que no caerán.

— Quiero una cosa Isa.- murmuré.- Camille irá con Jacob y Nessie.

— Pero dijiste que los dones de Camille nos ayudaran en la pelea.- me dijo confundida.

— Camille es una chiquilla, merece vivir más.- suspiré.- tener más aventuras.

— La amas, es verdad que tu lazo con ella es como...

— El que imagino que una madre siente por una hija, el que me hace querer cuidarla y el que me hace pensar solo en ella antes que en mis propias compañeras... Las amo, pero sé que si algo me pasará ellas no podrían vivir sin mí, y si algo les pasará yo no podría vivir sin ella, pero Camille es joven y aún tiene que encontrar a su compañero o compañera, así que puede vivir sin nosotras y yo quiero que sea feliz, como tú quieres que Ness lo sea.

— Camille irá con Jacob y Nessie.- la miré agradecida aún en el abrazo.

— Es una noción romántica.- dijo Alister sorprendiéndonos a ambas.- que un par de virtuosos desafíe al mal.- se acercó a nosotras.- lo admito estuviste a punto de convencerme por un minuto.- se rio.- buena suerte la necesitaran, adiós.- y se fue.

Ambas nos miramos sin saber qué decir y yo solo bese la frente de mi gemela.

— Todo saldrá bien.- traté de convencerla y convencerme a misma.

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Tanto Kate como Tanya me acompañaron a pasar el día con papá.

— Toc toc.- dije abriendo la puerta y papá me miró con una sonrisa.

— Mi niña aquí estás.- me abrazo con fuerza.- te pintaste el cabello, te queda hermoso.

— Gracias papá, también te extrañé.- le di un beso.

— Pásenle, Leah, Seth y Sue están en la sala con Reneesme.

Pasamos a la sala, saludamos y vi a mi hermana viendo por la ventana, suspiré al leer sus pensamientos.

— ¿Todo bien?.- pregunto Leah a mi lado y yo hice una mueca.

— Solo queda un día y no sé cómo terminará.- apretó mi mano tratando de hacerme sentir mejor y yo la bese.

— Es momento de abrir los regalos.

Todos abrimos los regalos, Jake le regaló a Nessie una pulsera, yo le regalé a Seth unos videojuegos, mis rubias me regalaron un kit de cámaras, entre ellos estaba un regalo para mi papá y Sue fueran a pescar para alejarlos de la pelea. Después de un rato agradable en familia, nos despedimos de papá.

— Papá.- lo llamé antes de que se metiera a la casa.- No olvides que te amo y eres el mejor papá que pude tener.- el frunció el ceño y lo abrace con fuerza.

— Me estás asfixiando.- se quejó y yo reí para separarme.- Te amo también solo me iré 5 días, no para siempre.- dijo divertido y yo asentí.

— Solo quería que lo supieras.- sonreí para besar su mejilla.- lo siento, es la primera navidad que paso en casa, me puse sentimental.

— Entiendo.- dijo el con una pequeña sonrisa.

— Nos vemos.- deseé que ese nos vemos fuera cierto, el entro a la casa y Kate me abrazo con fuerza.

— Todo saldrá bien cariño.- susurro en mi oído.

— Eso espero.- murmuré para alejarme de allí.

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Vi a todos reunidos en una fogata contado historias, me empecé a sentir ahogada.

— ¿Estás bien?.- me preguntó Irina.

— Sí, solo iré a caminar.

— Te acompaño.- escuché tres voces y yo negué con una sonrisa.

— No es necesario, amores, solo necesito un tiempo a solas.- ellas hicieron una mueca, pero asintieron, mire como Camille reía con Jacob y Benjamín. Los rumanos comenzaron a contar su historia, podía escucharlos aunque estuviera alejada.

— Patrañas.- murmuró una vampira a lado mío, tenía una linda voz.

— ¿No te agradan los rumanos?.- pregunté divertida, sabiendo que a nadie le agradan, observé a la chica al lado mía, su cabello castaño oscuro, sus ojos rojos brillaban con intensidad y tenía una sonrisa maliciosa en ellos.- No sabía que habían reclutado más vampiros.

— Viene a conocer a la híbrida del momento, mitad mortal y mitad inmortal, pero aún no he tenido el placer.

— Duerme en este momento, es demasiado para una niña pequeña.

— Una pena.- murmuró ella.- ¿Tú eres su madre?.

— No.- negué riendo.- soy Charlotte Swan.- me presenté y ella sonrio.- pero puedes decirme Charlie.

— ¿Hermana de Isabella Swan?.- yo asentí.- Interesante, un placer soy Gianna.

— Lindo nombre.- hablar con ella era muy tranquilo.- ¿Qué piensas de la situación hasta ahora?.

— Gracias, solo quiero saber que la niña no será un peligro para nosotros y nuestro secreto.- yo negué.

— Cuando conozcas a Ness te darás cuenta de que esa niña está lejos de ser un peligro.

— Tal vez podrías traerla para que la conozca, realmente no me llevo bien con los demás vampiros.- ella me sonrió.- créeme, puedo ser de mucha ayuda si me demuestras que esa niña no será un peligro.- la mire algo confundida por la manera en la que decía todo.