XXXIII. Final Judgment

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—¿Qué?

Los hermanastros se rieron en un asentimiento de cabeza, viendo el asombro en su expresión.

—Aún necesitamos ver todo, no vamos a mudarnos aquí de la noche a la mañana. Quedamos dentro de los cincuenta primeros, por lo que quisimos darte una sorpresa.

—Lo que aún no conocemos son nuestras aulas ni la sede, así que... —Jimin intervino después de Hoseok, los tres sentados en el sofá— ¿qué te parece si hacemos un tours por la universidad? Así nos explicas cómo es todo esto.

Bueno...

—Dependiendo de la carrera. No puedo explicarles otras carreras fuera de la facultad de Ciencias Políticas —Jungkook comentó, sus ojos puestos en su hija en el regazo del pelirrosa.

—Yo postulé para administración de empresas internacionales y hyung en diseño gráfico.

Parpadeó asombrado, sus labios separados.

—Eso está del otro lado de la universidad, su ingreso es por la puerta cuatro.

—¿No podemos ingresar por la principal?

—Sí pueden, pero les quedaría demasiado lejos.

Tan solo recordar que Jimin es algo perezoso al caminar no le convenía para nada.

—Me compraré unos patines.

—Si te caes con tus propios pies, pues no me quiero imaginar con unos patines —Hoseok intervino y quizás el aludido podría lanzarle un cojín si no fuera porque tenía a Uju consigo—. En fin, ¿sabes si Seokjin hyung tiene algo qué hacer hoy?

—Creo que tenía su ultrasonido —Jungkook dudó—. Al parecer necesita medicación porque tiene fuertes náuseas y no deja de vomitar, ha bajado como cinco o seis kilos, e incluso vomita agua.

—Dios mío, que feo es estar embarazado —Hoseok dijo y tragó apenas los ojos de Jungkook recayeron en él— M-me refiero a las náuseas y eso...

—No, tienes razón, el embarazo no es lindo y los que dicen que sí lo es, es pura mentira —el menor le concedió, su voz seria—. No es lindo vomitar hasta desmayarte y no poder hacer mucho por la debilidad, no es lindo estar cansado todo el tiempo y aun así hacer cosas. Todo duele; los pies, la espalda, la cadera, las piernas. Incluso dormir es difícil. Será porque no tuve un embarazo agradable, pero en mi opinión, no es lindo.

Los mayores se miraron con una sensación extraña en el pecho, y Jimin giró hacia el aludido, con una sonrisa suave en sus abultados labios.

—Jungkookie sabes que lo que pasaste no es tu culpa, ¿verdad?

Y el omega suspiró, no porque se sentía mal, sino que lo sabía, pero de alguna forma era imposible evitar el estrujor de su pecho.

—Lo sé, sé que no es mi culpa, pero ya es cuestión mía. No se preocupen —les dijo apacible, para después dibujar una sonrisa en su boca cuando sintió las cabezas de los otros acostarse en sus hombros, cómo un confort.

Mas no esperó a que Hoseok se enderezara y abriera sus ojos y labios en demasía, fijos en cierto lugar que le hizo parpadear confundido.

—¿Qué pasa?

—¡Tienes una marca! —el mayor chilló perplejo, haciéndole llevar la palma de la mano a la zona.

—Es temporal, se borrará en dos meses.

—¿Estás seguro que lo es? No parece. Está tan bien hecha que podría pasar por alto como una. ¿Taehyung no se habrá pasado?

¿Qué?

SOMEONE I CAN LOVE | KTH&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora