Han pasado tres días desde la última vez que vi al grupo, mi pierda dejo de sangrar pero duele como si tuviera la flecha aún clavada allí. Camino con dificultad sosteniendo me de los árboles, me siento un momento para descansar y saco un poco de comida, por suerte aún me queda un poco.
Cómo recuperando algo de fuerzas y me levanto para seguir mi camino. De repente llegó a una autopista, está completamente vacía y eso está bien, realmente lo que menos me gustaría ahora es pelear por sobrevivir. Lo único que quiero es que aparezca una farmacia frente a mi sin ningún vivo o muerto para poder curar mi herida.
Sigo mi camino, tranquila, sin ningún tipo de apuro, logro llegar a una gasolinera, está completamente vacía, hay un auto pero sin cauchos y los cristales rotos, entro al local vacío en el que casi no queda nada, bueno, nada que me pueda servir, todo está viejo y vencido.
Suspiró agotada y solo me acuesto a dormir escondida en un estante.
× × ×
-- ¿Eres un médico real? -- Carl mira desconfiado a Matt que no se a apartado de mi lado mientras mira levemente asustado al grupo.
-- Si, solo que sin título y con poca experiencia -- Responde y despeina sus rizos. Parece nervioso y luego me mira de reojo -- Las pastillas -- Me susurra, yo solo asiento y saco el frasco de mi bolso para tomar una a secas.
-- ¿Qué estás tomando? -- Pregunta Lory confundida, le sonrió amablemente, ella fue la única que se preocupó por mi cuando me tenían atrapada.
-- Son para la esquizofrenia, mantienen las voces y las alucinaciones al margen -- Le respondo y Matt me da una botella con agua. Tomo un poco del agua y recuesto mi cabeza de su hombro.
-- ¿Ustedes dos...? -- Beth parece aún más curiosa ante esa pregunta y escucho a alguien mofarse tras nosotros. Carol no deja de mirarnos aunque ya no parece estar molesta, solo interesada en la conversación como casi todos los presentes, aunque me doy cuenta de algo rápidamente.
¿Dónde está Dale, el resto de la familia de Hershel y Andrea?
Aunque la curiosidad me está matando por preguntar eso, me muerdo la lengua para evitar pronunciar palabra alguna.
-- No estamos juntos como pareja, solo somos buenos amigos -- Sonrió ante las palabras de Matt, el si sabe que decir en los momentos adecuados. Yo pude terminar gritando o peor golpeando a alguien, tal vez tenía que hablar yo, así todo esto se volvía más interesante.
-- Bueno, es un poco tarde, deberíamos descansar, mañana será un día ocupado -- Dice Hershel amigable, eso me recordó a la actitud tranquila de Dale ¿Dónde está?
-- Si, tiene razón, vamos a descansar -- Afirma Lory y todos comienzan a ir a dormir, me separó un poco de Matt y le sonrió. El está por hablar pero con mi mano cubro su boca.
-- Mañana nos iremos, tranquilo ¿Si? Si quieres puedes hacer la guardia -- Beso su mejilla y el me sigue hasta el lugar que se transformó en nuestro hogar y que por desgracia vamos a tener que abandonar.
Al subir miro por la ventana, ya apagaron la fogata y todos menos Daryl, estaban acostados en sus tiendas para dormir.
El hombre de la ballesta estaba sentado en el mismo lugar en el que estuve minutos antes, dejando ver todo su perfil, su cabello estaba mucho más largo de lo que recuerdo aunque eso no le quitó lo atractivo. Sonrió para mí misma y mis dedos viajan a mis labios recordando aquel beso robado después de una sobredosis de pastillas.
Pasan las horas y el no se mueve supongo que está haciendo guardia. Me asomo en la puerta y sonrío con ternura mirando a Matt dormir sentado junto a la puerta con un arma al lado.
Con cuidado se la quito y le coloco una manta echa de varias chaqué para cubrirlo del frío nocturno y a su lado dejo una almohada.
Bajo de dónde estaba y me hacerco a Daryl con una sonrisa.
El me mira desde el momento en que bajo de las escaleras por completo. No distingo su expresión a la distancia en la que nos encontramos. Pero no dejo de sonreír y le muestro un termo plateado, animada corro en su dirección y me siento a su lado entregándole el termo.
-- Traje café, está frío pero algo es algo -- El solo me mira con sus hermosos y profundos ojos azules que brillan de una manera tan extraordinaria por la luz de la luna -- Lastima que hoy no tengo masa para panqueques -- El sonríe, por primera vez en todo el tiempo que nos conocemos, sonríe y dioses si que se ve muy bien sonriendo.
-- No importa, con el café está bien -- Y después de eso, silencio, pero no incómodo, todo lo contrario, es un silencio muy cómodo a decir verdad, los dos disfrutamos del frío café en silencio y miramos el cielo nocturno disfrutando de este pequeño momento de paz.
× × ×
-- ¡Si! -- Rio para mí misma mientras acelero a toda velocidad dejando a los caminantes atrás, había conseguido cientos de suministros en ese pequeño paseo por la ciudad.
Paso casi dos semanas y mi pierna sigue sin curarse, pero ya podré arreglarlo con todo lo que conseguí.
Me detengo de repente al ver a alguien en medio de la carrera con una mano arriba, estaba pidiendo un aventón.
Un hombre de piel morena y muchos rizos estaba frente a mi esperando a que alguien le de una mano. Sonrió y abro la puerta a lo lejos veo como se hacerca un pequeño grupo de caminantes.
-- ¡Vamos! ¿O prefieres que te atrapen? -- Pregunto divertida, el no lo duda mucho y sube corriendo al autobús y se sienta a mi lado, yo acelero para perder otra vez a los caminantes -- Eso estuvo cerca -- Suspiro pero no dejo de sonreír, detengo el autobús cuando ya estamos lo suficientemente lejos de la ciudad y los caminantes.
-- Si... ¿Estabas saliendo de la ciudad? -- Comienzo a reír por lo estúpida que sonó su pregunta. El encambio se sonroja avergonzado y cubre su rostro con sus manos -- P-perdón, es que... Y-yo... -- Contengo la risa y le extiendo mi mano para presentarme, el después de unos segundos la toma.
-- Soy Gris -- Le digo sonriendo lo más amable que puedo. El me sonríe devuelta.
-- Es un gusto, soy Matt y gracias por salvarme de los muertos -- Dice aún sonrojado.
-- No fue nada, ¿Sabes algo de medicina? Necesito ayuda con esto -- Le muestro mi pierna, el parece horrorizado por mi herida.
-- Estás de suerte soy médico, bueno, un casi médico y voy a salvar tu pierna -- Los dos nos sonreímos entre nosotros y dejo que haga su magia de medica.
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Demencia | Daryl Dixon
RandomTodo se descontroló de una manera espectacular, primero lo pasaron por las noticias; caníbales, probablemente una septa, estaban atacando a las personas en la calle, a algunos los mordieron y a otros les abrían el estómago y los devoraban. Después...