Caballos y tomates

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—— Es muy peligroso... —— Miro a mi compañero de viaje, era uno de los encargados de hacer pequeñas exploraciones para conseguir cosas que nos faltaban en la comunidad, era joven, me atrevo a decir que mucho menos que yo.

Regreso mi vista a los caballos al otro lado del río. Estaban pastando muy tranquilos, un par tenían marcas en señal de que no eran totalmente salvajes.

—— Un par tienen de esas cosas para traerlos —— Analizo el río, por suerte no estaba con una corriente muy fuerte, pero el gran inconveniente era la profundidad, pasar a los caballos sería complicado y incluso para nosotros —— ¿De casualidad sabes nadar? —— Le pregunto al chico y el niega con la cabeza. Suspiro frustrada, yo tampoco tenía conocimiento para poder hacerlo y realmente morir ahogada no era una de mis metas realmente.

—— Hagamos esto, yo volveré a la comunidad, tu cuidaras de los caballos, volveré en unas horas con alguien que sepa nadar —— El chico asiente con la cabeza y yo comienzo mi camino de regreso a la comunidad, después de una hora caminando logro llegar a Alexandria.

Al llegar al gran portón que para mí sorpresa no tenía seguro y tampoco estaba la persona que se supone cuida de la entrada, abro para pasar, pero me vuelvo a quedar en mi sitio al chocar de frente contra Daryl.

—— Ups, perdón Daryl... Espera... ¿Daryl? —— Miro al maldito imbécil que me abandono a mi suerte para irse con el idiota de su hermano y le doy un fuerte puñetazo en la nariz haciéndole retroceder con la mano en la zona afectada de su rostro —— ¡Debería matarte por abandonarme! —— Le doy otro golpe Pero ahora en el estómago y siento como alguien me aleja cargando me desde atrás —— ¡Sueltenme! ¡Lo mataré!

—— ¿Grissella? —— Al escuchar mi nombre completo me quedo quieta y miro a el grupo frente a mí. Ellos estaban aquí.

Están aquí...

Suspiro para luego comenzar a reír, parecía el remate de un mal chiste, la persona que me había alejado de Daryl me soltó dejándome de pie en mi lugar, pase una de mis manos por mi frente limpiando el sudor que la cubría.

—— Bien alucinaciones, voy por mi medicamento —— Digo ignorando como "Matt" me llamaba. Camino a mi departamento y siento como alguien me toma suavemente del brazo, me doy la vuelta para chocar con la mirada azul del cazador de pocas palabras y cabello rubio.

—— Sigues con vida... —— Murmura muy suavemente, se veía como un gran desastre,  olía tan mal, parecía cansado. Miro atrás de el, los demás estaban allí, algunos nos miraban con curiosidad, entre ellos Matt, Maggie y una chica desconocida.

—— Si... No gracias a ti ¿Dónde está en desgraciado de tu hermano? —— Busco al mayor de los Dixon en el grupo, pero solo noto la mirada juzgadora de Michonne y como le dice algo a Rick —— ¿Dónde está? Le quiero devolver la cicatriz, solo que yo si clavare un cuchillo en su cerebro...

Conecto mi mirada con la de Daryl, el azul de sus ojos brillaba con frialdad, como si quisiera arrancarme la lengua por lo que acababa de decir, le sonrió divertida.

—— Tranquilo, ahora estoy medicado y si me disculpas debo buscar a alguien que sepa nadar... —— Me suelto de su agarre y cambio mi camino, de mi pequeño departamento a buscar a Eric o a Aaron.

Llegó a el pequeño almacén de la comunidad, normalmente solían estar allí, Pero estaba todo vacío, aunque para mí suerte encontré unos flotadores.

Bingo

Tomo los flotadores y me dirijo fuera de allí, deteniendo me al ver a Carl y a Carol, parecían estar viendo la comunidad, Carol vestía como los alexandrianos, como si fuera una ama de casa más.

Demencia | Daryl Dixon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora