Capítulo 14

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Después de la comida me metí a nadar un rato o algo más de una hora. Pero ahora estaba bajo la sombra de la sombrilla, me había quitado los pantalones cortos para nadar y quedar en bikini, justo como estaba ahora. Eran ya las 17:38 horas y apenas el sol había comenzado a descender.

Oye Luna, recorrimos la playa y encontramos un lugar donde hay tortugas —. Se acercó Foolish sentándose a lado de donde estaba con Tally, quién apenas escucho lo que dijo se emocionó.

¿Dónde está? Tallulah ama las tortugas —. Pregunté sentándome en mi lugar debido a que estaba descansando mi cuerpo en el suelo.

Deben seguir por ahí, habrá unas rocas apiladas como en forma de pirámide; solo tienen que rodearlas, caminar unos dos minutos y estarán frente al lugar —. Comenzó a dar indicaciones y asentí. Tally tomo su cámara y yo me coloqué la camisa a botones con la que llegué.

Vamos por tu papá, Tally —. Le di la mano y fuimos a dónde estaba Wilbur con Bad y Roier hablando.

Le contamos lo que nos dijo el pelinegro y nos fuimos a dónde indico. Realmente no estaba muy lejos de dónde estábamos y tal como dijo Foolish, después de las rocas estaba un pequeño riachuelo con tortugas de diferentes tamaños.

¡Son tortugas! ¡Tortugas! —. Tally chillo emocionada haciendo que ambos adultos sonriamos por su felicidad.  La pequeña desde una distancia considerable comenzó a tomar fotos cuidando de no encender el flash.

Cuando tomo algunas más dejó la cámara para acercarse a ellas lentamente para no asustarlas; y como si de una verdadera guardiana del bosque se tratará, las tortugas más grandes se acercaron a ella dejando que las tocará.

Esa es nuestra pequeña luz del bosque encantado —. Le hablé a Wilbur y recosté mi cabeza en su hombro mientras ambos disfrutábamos de la escena tan mágica con una sonrisa. 

No duramos mucho tiempo ahí debido a que ya se estaba haciendo más tarde y no queríamos quedarnos en la noche lejos de la cabaña. Caminábamos tranquilamente por la arena de la playa hasta que me di un pequeño susto con lo que parecía un alga pero justo cuando la vi creí que era una serpiente.

Al parecer Wilbur no noto mi susto pero Tally sí, solo coloqué mi dedo sobre mis labios para que no dijera nada y dibuje una sonrisa maliciosa en mi rostro tomando el alga sigilosamente.

¡Cuidado, una serpiente! —. Dije al mismo tiempo que le lanzaba el alga a Wilbur quién obviamente se asustó haciendo que comenzará a reírme a carcajadas.

¡Me metiste un tremendo susto! —. Respondió con un gesto serio hasta que lo cambio por una risa. Seguimos el camino de arena algunos metros hasta que Tally me detuvo haciendo que me girará a verla.

Dime ¿Sucede algo? —. Pregunté y sentí unos brazos tomarme de las piernas despegando mis pies del suelo. Wilbur me tomó y me llevaba en dirección al agua.

Esta es mi venganza —. Dijo tocando el agua. Entré risas de los tres comencé a forcejear para que me soltará, y finalmente cedió bajándome quedando frente a él con la mitad de nuestros cuerpos cubiertos por el agua.

No sé porque dejamos de reír y en un momento estar tan cerca el uno del otro mirando el alma de cada uno a través de nuestros ojos. El sol había descendido dando al cielo el característico color dorado que hacía la perfecta combinación con él.

Estábamos siendo movidos justo como las olas mueven lo que esté en ellas, sin control sobre sí mismos. Las respiraciones, los latidos, y la extraña energía magnética que había entre los dos se estaba haciendo demasiado fuerte.

𝐖𝐄𝐋𝐂𝐎𝐌𝐄 𝐓𝐎 𝐓𝐇𝐄 𝐐𝐒𝐌𝐏 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora