El enlace comienza, con el oficial Park dando el correspondiente sermón de cada boda, haciéndoseles a todos los minutos excesivamente largos, Taehyung no puede más, Jin tiene las orejas rojas de rabia, Hoseok está con el ceño muy fruncido y Namjoon agarra con algo de fuerza la mano de su esposa.
Todos saben que si Jung Hoseok ha ido a esa boda es para que su menor no se sienta tan mal por tener que estar allí, pero en cuanto él se vaya, se irá detrás de él.
La parte esperada por todo amante de los dramas que se precie llega en ese momento, haciendo a Yoongi tragar duro ante lo que dice el oficial Park, con un nerviosismo opacando su ser.
- Si hay alguien que esté en contra de este enlace, que hable ahora o calle para siempre – Dice en voz excesivamente alta.
Porque claro, Jin también le ha ido con el chisme a Bogum. El momento es tenso, todos los que saben de la historia de estos dos inevitablemente llevan sus ojos al organizador de bodas, incluso el mismo Yoongi no puede evitar mirarlo de reojo, rogándole con sus hermosos orbes oscuros, que se oponga a la boda.
Taehyung se siente demasiado presionado, pero se mantiene en su sitio, no va a quedar de ridículo delante de todo el mundo por algo que está más que muerto.
El oficial Park al ver que el menor no va a decir nada, suspira, haciendo que Suran frunza el ceño, está segura de que hay demasiada gente allí en contra de esa boda que se está celebrando.
La ceremonia continua y entonces llega otro momento tenso para todos.
- Shin Suran ¿Quieres recibir a Min Yoongi, como esposo, y prometes serle fiel en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarlo y respetarlo todos los días de tu vida? – Dice el oficial.
- Sí, quiero.
- Min Yoongi ¿Quieres recibir a Shin Suran, como esposa, y prometes serle fiel en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarla y respetarla todos los días de tu vida? – Dice de nuevo.
Dicen que la esperanza es lo último que se pierde y eso es precisamente lo que le pasa a Taehyung, un leve, mísero y minúsculo rayo de esperanza se crea en su interior cuando Yoongi no contesta, siendo esos los segundos más largos de su vida, uno que rápidamente se rompe.
- Sí, quiero.
- Puede besar a la novia – Termina el oficial.
En el momento en el que los labios de ambos se juntan, todo rastro de amor, compasión, esperanza y sentimiento a favor de Yoongi que pudiese quedar en su interior, desaparece exitosamente.
- Oficialmente declaro a Min Yoongi y Min Suran, enlazados en matrimonio – Sentencia Bogum, mirando con derrota a Taehyung.
Rápidamente el rubio se marcha de allí para empezar a organizar el cáterin para que repartan la comida entre los invitados.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cuando todo está perfectamente organizado, Jin ya se ha marchado y la cena ya no necesita de su supervisión, Taehyung decide que es el momento para irse a llorar de una vez a su casa.
Se acerca hasta Hoseok y Namjoon que están bebiendo vino mientras cogen comida repartida por los camareros y les sonríe con derrota.
- Chicos, yo me marcho ya – Anuncia, apretando la parte de abajo de su chaqueta.
- Espérame, que nosotros también nos iremos, yo te llevaré, bebé – Le dice Hoseok con voz severa – Antes iré a despedirme de Yoongi.
- Claro, te espero fuera – Asiente, marchándose hacia fuera con Namjoon y su esposa.
El castaño manteniendo su rostro lo más neutro que puede, busca al novio que está hablando con sus padres, con una cara de derrota total, pero le da exactamente igual.
- Yoongi ¿Podríamos hablar un momento? – Le pregunta, tocándole el hombro.
- Claro, Hobi – Asiente, agradecido porque vuelva a dirigirle la palabra – Ahora vuelvo, papá, mamá.
Los dos asienten y los ven marcharse, notando la tensión entre ellos, que podría cortarse con un cuchillo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Salen al jardín en el que no hay casi nadie porque hace frío y mirando al muérdago absurdo que Suran se ha empeñado en mantener, Hoseok carraspea.
- Debería pegarte, Yoongi – Suelta con enfado – Pero ni eso te mereces.
- Hazlo, probablemente me sienta mejor – Suspira, apretando un poco la copa de vino en su mano.
- Eso es lo que te vendría bien, pero yo no quiero que te sientas mejor – Hoseok le mira con una cara que le asusta – Te voy a decir de una vez todas esas verdades que tanto te has empeñado en averiguar.
- ¿Tiene que ser ahora? ¿De verdad me vas a hacer esto en mi boda? – Gruñe con incredulidad.
- Sí, me he mantenido paciente durante estas dos semanas, esperando a que fueses tan ridículamente tonto de ir a casarte con esta tonta que tienes por mujer para decírtelo en el momento preciso que no es otro que este – Rebusca en su chaqueta, sacando un paquete de tabaco - ¿Quieres uno? Lo vas a necesitar.
- No te reconozco, Hoseok, la verdad – Alza la mano, sacando un cigarro – Deberías entenderme.
- Oh, te entiendo, claro que lo hago – Sonríe con burla – Pero entiendo más a tu ex novio, sinceramente.
- No entiendo porque tienes esa fijación con defenderle siempre, yo también soy una víctima en todo esto, Jung – Gruñe mientras se lo enciende.
- Eres víctima y verdugo, Yoongi – Tira el humo por su boca – Taehyung es solo víctima.
Ambos amigos se miran silenciosos, estudiándose con atención, muchas verdades van a ser dichas ahora y todas ellas, van a ir directas a destrozar un poco más el corazón de Min Yoongi.
