Wedding planner ♡ YoonTae

FINAL ♪

Los meses pasan, el apartamento de Taehyung se convierte en la casa de ambos, cada noche Yoongi es recibido por el menor con un bonito abrazo y un picoteo en sus labios, haciéndole poco a poco más feliz.

Aunque desde luego el tiempo para verse no es mucho, puesto que, entre la organización de bodas de uno y los juicios del otro, lo más que pueden aprovechar son los fines de semana o las noches, pero, aun así, están jodidamente encantados de poder vivir juntos.

Uno de los días en los que el pelinegro no tiene juicios, se dedica a limpiar en profundidad la casa, cosa que el ahora castaño se niega a hacer, dice que es mejor contratar a gente para que lo hagan por él.

Aunque gracias a eso descubre el bonito tesoro de Taehyung, que es un álbum grande y blanco lleno de ideas para la boda que siempre soñó tener con él, decidiendo que prepararla a sus espaldas es una agradable idea que llevará a cabo procurando que su pequeño prometido no descubra.

El tema legal no pueden formalizarlo en Corea, porque allí el matrimonio entre personas del mismo sexo no está permitido por ahora, pero toda la parafernalia si, así que ayudándose de Jin, Jimin y Jungkook, comienza a prepararlo.

A falta solo de que el traje de Taehyung esté probado, Jimin lo llama a su estudio con la excusa de necesitar modelos para comenzar a preparar trajes de novio para parejas homosexuales y claro, el castaño cómo no se va a fiar de su querido amigo, yendo feliz a ayudarle una de sus tardes libres.

Le prueba varios trajes, estando en desacuerdo en casi todos cuando un traje blanco, con un bonito velo en su cuello, las perlas reinando por toda la chaqueta y el pantalón ceñido se funde con su cuerpo como si estuviese hecho para él.

Los colores de emoción llegan a la cara del rubio que aplaude contento por tener el traje perfecto para Taehyung, dándole el ok a Yoongi, todo está listo.

Han pasado siete meses desde que estos dos se prometieron en matrimonio y el menor está algo mosca porque Yoongi aún no le ha dicho cuando se van a casar, quiere hacerlo cuanto antes, quiere llamarle mi marido todas las veces que pueda, aunque la ocasión no lo requiera.

Es una mañana de sábado, hace calor y Taehyung es arrastrado por Jin con la excusa de que ha encontrado un sitio hermoso donde realizar nuevamente eventos.

Los ojos le brillan por ver el fantástico lugar donde han llegado, es un edificio ambientado en uno de los barrios antiguos de París, de tonalidades marrones y beige, es alto e imponente, la parte de fuera está llena de flores blancas, rosas, amarillas y lilas, de diferentes tipos.

Entran decididos y el menor frunce un poco el ceño porque todo parece hecho como para que se celebre un evento, demasiado parecido a uno de los suyos que imaginó con Yoongi.

Las mesas y sillas blancas, todo lleno de flores de tonalidades cálidas, la suave música de jazz sonando por el lugar, pero se encoge de hombros, siguiendo a Jin que lleva una sonrisa demasiado sospechosa en su rostro, hasta llegar a una habitación grande y de aspecto antiguo, donde el traje que le probó Jimin, un par de chicas, el diseñador, sus padres y sus hermanos le esperan.

Su boca se abre en una perfecta O, sorprendiéndose por encontrarlos a todos allí, es lo último que se esperaba.

- ¿Qué pasa? – Pregunta incrédulo, siendo empujado hacia dentro.

- Bienvenido al día de tu boda, futuro señor Min – Sonríe Jimin en grande.

El corazón se le desboca, la vergüenza le inunda y los nervios le afloran, está seguro de que todo esto ha sido planeado por su prometido con todos a sus espaldas, siente la humedad en su rostro, dándose cuenta de que está llorando, cosa que es perfectamente normal.