❤️🩹 Desde pequeños ❤️🩹

Pase lo que pase

Camila y su hija Emma acostumbraban a pasar el verano fuera de la ciudad, en un rancho en la playa donde se reunían con la mejor amiga de Camila, Sandra, su esposo Víctor y sus dos hijos, Victoria e Iván. Siempre pasaban el verano juntos, era una tradición de ambas familias.

Victoria es la mejor amiga de Emma, a pesar de que ella fuera un poco más chica que ella. Y, la relación que tienen Emma e Iván es un tanto diferente, él era único, ellos se habían convertido en mejores amigos, aunque Emma estaba segura que sus sentimientos hacia Iván eran diferentes, a pesar de no entenderlos muy bien....

Camila maneja directo al rancho de verano, mientras que Emma iba disfrutando del paisaje, cantando a tope las canciones que iba reproduciendo por el bluetooth del carro. En cuanto llegaron al rancho, Emma se dio cuenta que estaba todo igual, tal y como lo habían dejado el año pasado. Un toque desordenado, pero eso cambiaría ahorita que Camila y Emma se pusieran a ordenar todo.

Era una larga jornada, no estaba tan desordenado, pero Camila amaba tener siempre todo en orden y que las cosas estuvieran en su lugar correspondiente. Un sonido de carro llamó la atención de Emma, haciéndola correr hacia el patio para ver de qué se trataba.

-donde está la nena consentida de todos- se escuchó la voz de Sandra, refiriéndose a Emma.

Emma amaba que se refirieran de ella de esa manera. Sandra era como una madre para ella, por lo que su compañía era importante. Emma corrió hacia donde se encontraba Sandra, de igual manera viendo bajar a Victoria y a Iván del carro, corriendo para saludarlos también.

-te extrañé mucho Iván- dijo Emma emocionada de ver a Iván nuevamente.

-y yo a ti- respondió Iván alzando a Emma.

Para Iván era fácil cargar a Emma, no solo por ser mayor que ella, sino porque también era muy alto para su edad, era algo que siempre le decían.

-y para mí no hay saludo- dijo Victoria a lo lejos viendo como Iván se había llevado a Emma para adentro del rancho. Haciendo que Emma se diera vuelta para ir a saludarla.

Victoria, Iván y Emma aprovecharon el tiempo, yéndose a caminar por los alrededores para poder llegar a su casita del árbol. Era una casita que sus padres habían construido cuando Emma tenía 5 años y ellos siempre acostumbraban a ir ahí el primer día, justo cuando llegaban.

-me encanta que estemos los tres juntos acá otra vez- mencionó Victoria llamando la atención de Iván y Emma.

-me trae recuerdos- dijo Iván.

-saben, deberíamos hacer una cápsula del tiempo, así cuando volvamos de más grandes la desenterremos y nos acordemos de esas cosas que son importantes para nosotros- dijo finalmente Emma.

-es una gran idea- contestó Victoria.

Tomaron una caja y cada uno metió cosas que le parecían importante para ellos, dejando la caja con las cosas en un hueco escondida para cundo la volvieran a abrir. Se quedaron ahí, hablando y jugando hasta que llegaron sus mamás a avisarles que ya estaba lista la comida.

Durante la cena, las familias platicaron, viendo las cosas que habían cambiado mientras ellos no se veían. Comieron y disfrutaron de un momento todos juntos.

Al terminar se pusieron a arreglar el leaving, así hacer el fuerte de almohadas para la pijamada que siempre hacían. Era otra pequeña tradición que tenían, en la que construían un fuerte de almohadas y pasaban la noche todos juntos, viendo películas y pasando tiempo juntos.

Al día siguiente

Emma se despertó al escuchar como todos entraban a su cuarto cantándole el feliz cumpleaños. Animándola a bajar para ir a desayunar, una tarta de chocolate y frutillas que siempre compraban, ya que era la favorita de Emma.