Twenty seven~

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...

Siempre asistía al mismo parque desde los doce años. Había ocasiones en las que caminaba del brazo de mi abuelo.

-¿Quieres un helado, hija?-decía mi abuelo.
Asentí.

Al llegar al pequeño carrito de helados, inmediatamente quién lo atendía murmuró el repertorio de sabores. Elegí un par de estos y posteriormente el señor del carrito colocó ambos sobre un cono.

-Gracias-musité al recibir el cono. El abuelo pagó y seguimos caminando.

El día pintaba normal. El sol estaba en su apogeo, sin embargo, los árboles del parque hacían sombra en los pequeños senderos de adoquín. Parecía tan normal el día. Tan normal ver a un abuelo y a su nieta, una nieta que ya era todo una señorita. Diecisiete años bien cumplidos, estaba a menos de un año de sus dieciocho primaveras.

-Hija...
-¿Qué pasa abuelo?-digo y a la vez le invito helado. El hombre resbala su dedo índice sobre ambas bolas de helado, luego chupa el mismo y sonríe.
-Te quiero. Y en ti deposito mi confianza. No me falles, intenta no decepcionarme.
-No lo haré, abuelo.

...

-¡¿Bombón?!-gritaba Niall-. ¡¿Bombón?!

La escena desapareció de mi vista. Frente a mi tenía a un señor de edad poco avanzada que tenía un parecido extraordinario a mi abuelo; por un momento me bloquearon los recuerdos de unos años atrás. Recuerdos de los que no podía hablar.

-¿Por qué están distraída tu amiga?
-Melissa... ¡Basta!
-Lo siento-dijo la castaña-. No me creí capaz de esto, y mucho menos que tu amiga entrara en trance.

Un guardia de seguridad se acercó. Y sólo recuerdo que Niall me sacó casi arrastras del súper; en cuanto a Melissa, ella se quedó ahí con el guardia y el señor a quién arrebató el café.
El camino fue más largo de lo normal. Seguí caminando por mi cuenta de la mano del rubio. Éste sólo me miraba perplejo y de vez en cuando acariciaba con su dedo pulgar el torso de mi mano.

-¿Y la crema?
-No importa la crema, estás en shock-decía Niall.
-¡No! Debemos regresar por esa crema. No quiero decepcionar a mamá, ni a papá, ni al abuelo, ni a nadie...

Las palabras se suspendieron en el aire. Un par de lágrimas brotaron de mis ojos y enseguida ya era todo una fuente.
Sí estaba en shock. Tenía meses que no me sentía afectada por algo o alguien. Los exámenes y trabajos finales en la universidad me tenían ocupada, tan ocupada que no tenía tiempo de pensar en mis aflicciones.
El ojiazul me miro asustado y me estrecho en sus brazos. Me refugiaba.

...

-¿Estás mejor?

Tallé mis ojos y pude visualizar a mamá sentada al borde de mi cama. A papá sentado en el sofá y a Niall recargado en marco de la puerta.

-¿Qué hora es?-cuestioné fatigada.
-Más de las nueve de la noche-dijo papá, a su vez se incorporo y salió de la habitación-. Encenderé el auto, llevaremos a Niall.

Mamá siguió a papá. Niall se acercó y se sentó en el borde de la cama, tomó mi mano y sonrió delicadamente.

-¿Estuve llorando, verdad?
-Creí que no lo recordarías-murmuró Niall-. Tuviste una especie de crisis. No sé cómo llamarle. Me asuste demasiado.
-Lo siento, no era mi intención.
-Niall-susurro Alice desde la puerta de la habitación-, mis papás te llevarán a tu casa. Yo cuídate de tu bombón.

Dicho aquello, Niall besó el dorso de mi mano y atravesó la puerta para ir escaleras abajo. Alice le acompaño.
Uno, dos y tres portazos se escucharon. Mis padres y Niall habían subido al auto echándole a andar.
Mientras tanto, Alice volvió a aparecer en mi recámara. Se recostó a mi lado y me abrazó sin decir y cuestionar nada.

...

Lunes. Por la mañana la rutina cambió: Alice llevo el desayuno a mi recámara y me acompaño a tomarlo sobre mi cama.

-Anoche habló la abuela.
-¿Qué dijo?-cuestioné preocupada.
-Quería saber como estabas.
-Creí que el sábado me había visto-hice una mueca y le di un sorbo al licuado-. No recuerdo haberme puesto tan mal.
-Pues cuando llegaste aquí, no lo estabas. Pero Niall asegura que cuando venían del súper...-la muchacha frunce entrecejo-, tuviste una crisis. Que te preocupaste tanto y no dejabas de llorar.

Tragué saliva. Me sentía exhausta y a la vez extraña. Jamás había tenido una "crisis"; había llorado por horas, pero al final siempre me quedaba dormida o sonreía y limpiaba mis lágrimas como sí nada hubiera pasado.

...

-¡Hola, Ellie!-me dijo Fer al visualizarme.
-¡Hola! ¿ya llegó Beth?
-Ahí viene.

La pelirroja parece agitada. Trae la mochila al hombro y trae un libro en la mano. Seguro venía leyendo en el transporte.

-Creí que no llegaba. Se me hizo tarde.
-Respira, Beth-dije y Fer rió entre dientes y le imite. Hecho aquello, una chica de mi estatura y cabello sumamente corto, se acercó a nosotros. Una chica del grupo; habló:
-No tendremos clase.
-¿En serio?
-Sí, me aviso. Tengan un lindo día-la chica dio media vuelta y desapareció de nuestra vista.
Era increíble que la clase se pospusiera, estábamos a escasas dos semanas de terminar el semestre; posponer la clase era como recorrer una semana. Es decir, faltarían tres semanas para el descanso que nos merecíamos.

-Necesito que me regalen unos minutos para tomarles fotos-dije a ambos amigos a mi lado. Se echaron a caminar y me miraron confundidos-. Debo hacer el documental de mis prácticas y no tengo nada.

Unos minutos más tarde, le tomé fotografías a Beth y posteriormente me dirigí a mi siguiente clase: Estadística.
Los nervios los tenía de punta, estaba por presentar mi segundo y penúltimo examen parcial.

-Bien, ya saben que deben tener en su mesa.

El profesor había llegado antes, estaba de la manera más tranquila ocupando la silla de siempre. Pasó un varios juegos de copias, sabíamos que debíamos tomar uno y pasar los demás. Y así fue.

16:35

16:47

Veinte pregubtas. Y apenas llevaba siete contestadas.

17:25

-Cinco minutos-musitó el profesor.

El sudor recorría parte de mi frente. Era un sudor frio. Tenía 14 preguntas contestadas. Y el resto estaba en blanco, dudaba de mi posible respuesta.

-Tiempo.

A
C
D
E
B
D

Conteste sin pensar la repsuesta. El profesor recogió los exámenes; ni siquiera nos permitió retirarnos. En ese momento calificó y entregó los exámenes.

-Aprobé el examen. Pero apenas y la libré-cuando salí del salón, encontré a Jane. Parecía estresada y enojada-. ¿Qué haces?
-Ayúdame contestando está encuesta. Tengo tantos trabajos finales que ya no la veo venir.
-Está bien. Tranquila.

Nuevo mensaje de desconocido: Mejor no arriesgues tus sentimientos con Niall. Te hará daño. ¿Sabes por qué lo dejó su última novia? Te recomiendo algo... Pregúntale quien fue Natalie.

Reí entre dientes. Gente bromista; ¿qué ganan con interponerse entre dos personas que se quieren?

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Capitulo ¡!
Espero les guste. Ignoren los errores... Aún estoy editando.
Voten 🙈

Hxx.

Barman |N.H.| Terminada (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora