Min Lea esta cansada de todo. Quiere terminar de una vez por todas con la persona que tanto daño la hizo.
El hombre que le arrebató toda su esperanza, su confianza, su integridad y en parte también su inocencia.
Esta dispuesta a todo, con tal de t...
Mi corazón dolía demasiado. Dina fue mi salvadora durante esos meses tan duros para mí. Se convirtió en una hermana mayor y saber que ya jamás la vería de nuevo, me perdía el corazón.
¿Por qué debe ser así de rencoroso e injusto el mundo?
No sufrimos ya bastante siendo obligadas, abusadas y golpeadas por simple placer… ¿Por qué seguir jodiendonos aún más tras conseguir salir de ese pozo oscuro?
No era justo, no merecíamos un destino así.
Lo que más me dolía a parte de la muerte de una gran amiga, era que Jungkook me lo hubiera ocultado. Tuvo muchas oportunidades para decírmelo y no lo hizo.
Intento no enfadarme con él, al fin al cabo solo intentaban ayudar. Me gustaría poder ponerme en su lugar y entenderlo, pero el dolor me lo impide… necesito tiempo.
Tiempo que no teníamos, ya que a la media hora él subió a la habitación. Cenamos en silencio, cada uno pensando en sus problemas y en la situación vivida. A la hora de dormir, el se acomodó en la cama de Hoshi y yo en la mía.
Ambos mirábamos el techo, con el tenso silencio inundando la habitación. Debía dejar de lado mi dolor y preguntar cual era el motivo de su visita.
—- ¿Cuál es la razón por la que has venido? —pregunté sin apartar la vista del techo.
—- Tengo avances de la investigación del caso de prostitución, necesito que mires unas imágenes de un sospechoso que creemos que es el intermediario que usa el "Jefe" para mandar los sobres de las amenazas.
—- En todo este tiempo, no me has enseñado ninguno de los sobres con las amenazas…
—- No creo que sea relevante, los enviaba directamente a comisaría y allí los abrían en el laboratorio.
No pregunté más acerca de los sobres de amenazas. Me puse en pie mientras él se sentaba en la cama. Tomé asiento a su lado para poder ver las fotos.
Sacó su teléfono y empezó a mostrarme imágenes de un hombre que rondaba los treinta años, tenía barba y no parecía ser coreano. Por sus rasgos diría que era japonés y eso tenía sentido, porque de allí venía toda la mierda del caso.
—- ¿Lo reconoces? —preguntó él con cautela..
—- Necesito hacer memoria, borré muchas de las imágenes vividas esos meses.
—- Sin presión, tomate el tiempo que necesites.
El volvió a tumbarse en la cama y yo imité su acción a su lado, sin dejar de mirar la pantalla. Su rostro me sonaba, pero necesitaba más perspectivas o algo en concreto que me hiciera recordar.
—- ¿Tienes más imágenes?
—- Si hay como cinco, puedes pasarla a la derecha para ver las demás.
Hice justo lo que me dijo y al momento de ver la segunda imagen donde él estaba de perfil supe quien era.
—- Sishiu… —susurre.
—- ¿Qué?
—- Su apodo era Sishiu, la gente del club solía llamarlo como si fuera un gato. Es astuto y escurridizo como uno… El mató a Jenn, el se encargaba de los abortos y de hacer desaparecer los cuerpos de las chicas que mataban los clientes en "accidentes".
—- Entonces estamos muy cerca de pillar al dichoso "Jefe". ¿No recuerdas un nombre o algo de ese señor?
Negué con la cabeza, todos lo llamaban Jefe y Chén Liúwoo era el que llevaba el club desde abajo. Nunca llegué a ver al tal jefe de cerca y casi siempre que pasaba por el club llevaba mascarilla.
—- Nunca llegué a verle la cara completa… Eric sospechaba que era una persona importante, un empresario famoso o un político el que estaba detrás de todo.
—- Puede tener sentido, de hay que tenga tanta gente por debajo y tantas salidas… Debe ser alguien importante, así que esta semana le pondré vigilancia al tal Sishiu. Ya tenemos su matrícula y el hostal donde se está quedando.
—- ¿Aún no van a interrogarlo?
—- Todavía no, necesitamos más pruebas claras y evidencias. Además quiero ver hasta dónde puede llevarnos.
—- ¿No crees que me necesitan para esto? Tal vez si voy y le enfrentó podamos pillar al jefe.
—- Primero vamos a esperar, tú aún debes terminar tu tratamiento… Lea quita tu mano de encima de mi entrepierna.
—- Perdón, fue por inercia… Está bien, tendré paciencia. Pero debes mantenerme al tanto y si llego a hacer falta llámame, término el caso y vuelvo aquí.
Él se limitó a asentir. No tenía claro que él aceptara mis palabras, de hecho sentí que simplemente asintió para que me callara y no siguiera insistiendo.
Dejó a un lado su teléfono y ambos volvimos a mirar el techo, solo que esta vez ambos en la misma cama. Me estremecí un poco al sentir su mano entrelazar la mía, hacía tiempo que no sentía su piel y fue increíble. No hizo falta el sexo, el simple toque de sus manos me exalto con una extraña felicidad.
Lo miré de reojo, sintiéndome pequeñita a su lado. Ya no había rastro de enfadó en mi, no podía enfadarme con él porque en el fondo sabía que él tampoco tenía la culpa. El más que nadie ha estado intentando ayudarme y terminar con toda la mierda. Y tenía claro que él jamás hubiera dejado que le hicieran daño a Dina pudiendo evitarlo.
Esa noche dormimos en la misma cama, pero no pasó nada. Por lo menos nada sexual, en mi estómago si pasaron cosas. Curiosamente no tuve ninguna fantasía más seguir abrazada a él por horas y horas, sus brazos me rodeaban y su nariz rozaba mi cuello. Pero no había ningún pensamiento sexual por mi parte, solo ternura.
Jeon Jungkook me estaba dando ternura y a la vez un extraño cosquilleo en el estómago.
¿Me sentaron mal las Hamburguesas o el helado a media noche?
❅─• 「 」 •══••✧๑♡๑✧•ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡ ۣۣ፝ۜ͜͡ஓ♡
Aquí les traigo otro capitulooo jsjsjs
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