𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥𝐢𝐳𝐚𝐝𝐚 ꒰ChanIn꒱
↝ Segunda parte de «To rent»
El Alfa sabía que no sería fácil derretir el frío corazón del castaño, sabía que lo odiaba con toda su alma y que recuperar la confianza sería lo más complicado, aun así, día tras día int...
Te estás convirtiendo en tu padre, su sangre recorre tu cuerpo e inevitablemente serás como él. Un Alfa de sangre pura como tú debe estar al nivel de uno como tal, tiene que ser imponente, salvaje y rudo. Tiene que mandar sobre el Omega, no que el Omega mande sobre ti. Debes hacer que te obedezca en todo lo que le mandes, ese es su jodido deber.
Por más que odies a tu padre por su forma de ser, jamás podrás negar la sangre que recorre cada milímetro de tu cuerpo. Y sabes que Shota seguirá ese camino, siendo un Alfa de sangre pura como tú, lo más seguro es que sea como tu padre y como tú, Bang.
Acéptalo de una vez y manda a tu Omega donde le corresponde estar, por debajo de ti.
Quieres ser el Alfa amable y bonito, las cosas ya están escritas, el destino te colocó a un Omega exigente y maduro, pero tú eres más que eso.
Tu naturaleza es salvaje, la suya sumisa.
Lo amas... que cosas tan cursis salen de tus labios cuando te lo follas. Antiguamente las medias lunas estaban casi extintas, porque nadie se casaba o se apareaba por amor, era el hecho de traer cachorros al mundo y claro, placer para el Alfa. El Omega nunca ha tenido su momento en la historia, y nunca lo tendrá en un mundo liderado por alfas.
Y tú le quisiste dar un lugar alto en esta jerarquía, a un solo Omega por ser tu Omega.
Pero no puedes.
Te advertí que debías mandarlo, ¿qué hizo? Se acostó con otro. Finalmente me sacaste de donde me tenías encerrado, por fin mostraste a tu verdadero Alfa.
Y fíjate, ahora me culpas de todo por haberlo mandado a su sitio. Y puedo sentir tu rabia, molestia, tristeza, amor... todo ello junto, no pensé que te pondrías así por dejarme salir unos minutos.
Debiste dejarme salir desde la primera vez que te lo cogiste.
Te puedo felicitar, aunque no tanto, resultó estar embarazado solo con tomarlo una vez. Pero el cachorro es un Omega.
La segunda resultó ser un Alfa y te felicito, un Alfa de sangre pura, con el cual no tienes ningún lazo formado.
Es triste, ¿verdad? Rompiste tontamente el lazo con tu Omega sin saber que tenía a un bebé en su vientre.
Intentas pedirle perdón, pero él no quiere, porque mostraste a tu Alfa unos segundos bastante tarde. Si tan solo le hubieras dicho: "Este es mi Alfa" y dejarme salir desde el primer segundo, estaría acostumbrado y no le hubieras traumado... qué pena.
No tengo nada más que decirte.
Pero si te doy un sabio consejo, es el siguiente:
Dile de una vez por todas que no eres un simple Alfa, si no uno de sangre pura. Explícale que soy alguien muy agresivo, compulsivo y muy diferente a ti. Dile que ese día, no eras tú realmente, era yo quien, por fin salió a la luz.
Te deseo suerte y que un día de estos me dejes salir y estar con mi Omega.
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