"Oh, Daddy!" © [Kim Namjoon]

Capítulo 22.

⋆ ˚｡⋆୨୧˚Dedicado a mi amiga Yesi˚୨୧⋆｡˚ ⋆

El camino de vuelta a casa era más que silencioso. Ni siquiera el radio sonaba.

Después de simplemente obedecer a papi y vestirse, espero unos veinte minutos en la Sala de la mansión de Jimin. Hasta que ambos simplemente bajaron y se despidieron formalmente dandose la mano como Buenos caballeros. Incluso con Park prestándole uno de sus Mercedes-Benz a Namjoon para regresar a casa cómodamente.

Monie venía acurrucado en el asiento trasero y a diferencia de ella, Papi estaba muy tranquilo.

Relajado y sin deberle nada a nadie. El mayor le mira de reojo y de la nada sonríe. - Tener Sexo abre el apetito princesa... ¿No te gustaría pedir algo en cuanto llegáramos a casa? Lo que tu quieras o sí lo prefieres, podemos decirle a la señora Park que nos prepare algo... - Menciona con un tono dulce, lleno de amor y de adoración hacia su niña.

- Suena bien pero... - Ella basila un poco, Estaba indecisa de tocar el tema. Lo menos que quería era volver a hacerlo enojar pero su ansiedad y el nombre de aquella mujer retumbaba en su subconsciente sin ninguna razón aparente.

Ahn Hye Jin.

¿Por qué sentía una punzada en su corazón de solo recordar como Papi había dicho ese nombre?

Quizás era el nombre de alguna socia de su empresa o de alguna ex (aunque esto último lo dudaba demasiado, desde que Namjoon le había adoptado jamás lo había visto salir con ninguna otra mujer, solamente habían sido solo ellos dos).

- Pero... ¿Qué sucede, Princesa?

Pregunta Namjoon justamente desviándose al camino de terracería para poder llegar a cada.

Ella guarda silencio hasta que llegan y apenas bajan del auto, Moni se echa a correr. No había ningún problema en que lo hiciera ya que tenía todas las hectáreas de Namjoon para hacerlo libremente.

- Papi, ¿Quien es Anh Hye Jin?

Pregunta Dae de pronto. Namjoon se detiene justo cuando estaba subiendo las escaleras de su pórtico y se queda quiero. La menor le observa y aunque quería morderse la lengua y evitar haber dicho todo aquello, ya era demasiado tarde.

Namjoon se gira volteando a verla con el rostro serio y una mirada penetrante. Por un segundo parece realmente regresar a algún rincón oscuro de su psique antes de volver a sonreír y negar con la cabeza. - Sabía que no ibas a dejar ese tema por la paz, Eres una mujer muy perspicaz. - Menciona. - Ven hay algo que debí contarte hace mucho tiempo.

Estira su mano para que ella la tome y aunque Dae se acerca lentamente como si fuera un ciervo a punto de recibir comida de un cazador, termina aceptándola porque ella confiaba ciegamente en él.

Ambos entran a la casa con calma, Adentro todo es válido y tranquilo. Inmediatamente la señora Park sale de la cocina y se acerca a ambos haciendo una ligera reverencia. - Que alegría verlos aquí temprano todavía. ¿Les gustaría cenar algo?

- Nada me gustaría más, Señora Park. - En ese momento voltea a ver a Datsun. - Querida, Decide tu...

— Pollo frito por favor... Pida mucho pollo frito para cenar.

Dice la menor, sentía que lo necesitaría una vez terminarán de conversar. La mujer mayor asiente. — Llamaré a su lugar favorito para hacer el pedido.

— Gracias, Señora Park y por favor, después de meter a Moni tómese el resto del fin de semana libre, Daesun y yo estaremos muy ocupados.

La mujer solo asiente acatando fielmente la orden de su jefe. Observa por un momento a Dae quien le sonríe levemente y solo eso necesitaba para irse tranquila. Saber que aquella criatura estaria bien.

Ambos suben juntos las escaleras y es Kim quien se encarga de guiarla hacia su Oficina. Daesun se detiene cuando es momento de poner un pie dentro.

— Vamos Dae, sabes que sería incapaz de hacerte daño... Confía en mi.

Menciona de manera paciente a lo que la chica asiente y camina con tranquilidad hasta la silla. Namjoon cierra la puerta y camina hasta la silla principal, no sin antes detenerse en el minibar para servirse un trago.

Una vez llegando a su lugar se acomoda reclinandose un poco sobre el respaldo para poder sacar algo de uno de los cajones. Poniéndolo en el escritorio.

Una fotografía...

Daesun la toma y observa a la mujer. Apenas sus ojos se posan sobre ella, siente una horrible punzada en su corazón. Debía admitir que aquella piel Morena y labios carnosos formaban parte de una belleza única.

Ella toca la fotografía y después sube la mirada hacia él. — ¿Ella es Ahn Hye Jin?

Y Namjoon asiente. — Si, Dae... Esa mujer es Anh Hye Jin.

— Pero... Pero no lo entiendo. ¿Por qué tiene usted una foto de otra mujer guardada? ¿Por qué ella le busca? ¿Quién es ella? — Comienza a llenarlo de preguntas mientras sus ojos se cristalizaban imaginando lo peor.

Que Papi estuviera con otra mujer después de haberle hecho tantas promesas y de haberle seguido tan fervientemente... Eso la destrozaria.

Namjoon le mira y ahora sus ojos brillan con compasión. No se levanta ni corre a consolarla, al menos no de inmediato. El mayor solo suspira y la mira, al menos sería completamente honesto con ella.

Se lo debía por todos los años en que la había mantenido ignorante de aquello.

— Daesun... Quiero que sepas que tu no tienes la culpa de nada. Por favor, no llores. — Comienza. — Hay una historia que yo nunca te he contado. Algo que pasó hace mucho tiempo, incluso antes de que tu nacieras y que me marcó de por vida, Sin embargo tenerte ha sido mi mayor tesoro y no habría podido tener una mejor compensación que recibir en mis brazos. Te cuide, te protegi, te ví crecer y convertirte en una mujer. Yo te hice mujer...

— Papi no estoy entendiendo...

— Esta bien, no necesitas entenderlo ahora. Solo tienes que escucharme bien y te aseguró que pronto entenderás. — Ahora si Namjoon se levanta rodeando el escritorio con cuidado llega hasta detrás de la silla de Dae y usa el dorso de su mano derecha para secar las mejillas de su princesa. — Cuando yo era joven, un poco más mayor que tu en este momento, Yo me enamoré profundamente de alguién... Era la mujeras fascinante que yo había conocido en aquel entonces. Tenía una voz única y una belleza que solo un verdadero hombre podría apreciar. — Y misma que se le había sido heredada a Daesun por fortuna. La chica era una nueva y mejorada versión de lo que alguna vez fue su exnovia. — Pero esa mujer fue una mal agradecida. Le di todo: Mi amor, mi tiempo, mi dedicación, cualquier cosa que ella quisiera la tenia. ¿Cómo me pagó? Engañandome con un mediocre Don Nadie... E ingendrando un hijo con él. Me sentí devastado, realmente no creí que podría volver a tener mi revancha... Hasta que llegaste tu.

Ahora ambos observan la fotografía una vez más.

— Esa es Ahn Hye Jin...

4...

Nos vemos en 2024. 🤭😉💖