El amor que yo soñé

quince

Decir que estaba harto no era suficiente, Draco ya se había cansado de bailar con cada tipo que se le acercaba y le hacía propuestas indeseadas, por eso vio una oportunidad de escape cuando vio a sus padres sentados pero con ellos se encontraba el desconocido de la playa.

-si me disculpa, tengo que tratar un asunto con mi padre- y se dirigio a dónde estaban importandole poco lo maleducado que fue.
Entre más se acercaba se dió cuenta que el joven ya se había ido.

-Draco que bueno que viniste necesito que alcances a harry y le hagas cambiar de idea para que no se retire- el rostro de Draco lo miro confundido
-por que tanto interes en ese joven?- pregunto
-el es la solución a todos nuestros problemas Draco- Draco abrió mucho los ojos ante las palabras de su padre -el se quiere casar contigo, a cambio de pagar todas nuestras deudas, hacerse cargo de todos nuestros gastos de ahora en adelante y sobre todo del tratamiento de tu madre, sabes que nadie más nos dará todo lo que el ofrece, los demás solo te lo darán a ti y se olvidarán de nosotros, sobre todo de tu madre-

-no lo puedo creer padre, solo te importa el dinero- reprendió
-no lo hagas por mi, hazlo por tu madre, alcanzalo y habla con el- le exigió.

Draco miro a su madre quien estaba más pálida de lo normal, para el, ella era lo que más amaba en el mundo, así que se dio media vuelta y salió tras aquel extraño.

-------------------------------------------------------

Una vez que había hablado con Harry, regreso a la mansión, se quedó en el vestíbulo, se sentía tan mal por lo que había echo, sentía de alguna manera que coquetear con alguien más era faltarle al respeto al amor que sentía por Cedric.

-ahi estas- escucho la voz de su padre -pudiste alcanzarlo?-

Draco resoplo -si padre y no te preocupes, lo eh invitado a comer mañana con nosotros- lo miro con rabia en los ojos puedes estar contento-

-Maravilloso, por primera vez usas ese cerebro que tienes- dijo su padre en tono de burla -ahora vuelve al salón de baile, llegó la hora de despedir a nuestros invitados- y dió media vuelta, Draco no dijo nada, simplemente lo siguió.

-------------------------------------------------------

Muy lejos de ahí, en una fría mazmorra, Cedric estaba desesperado, ya tenía dos días encerrado y nadie aún le decía nada, solo aparecía un pequeño elfo, le llévala la comida, si es que se le podía llamar así y se retiraba.
No podía dejar de pensar en su hermoso Dragón y en lo mal que lo debería estar pasando, ya que el sabía que esa noche sería el baile que su familia había organizado para encontrarle marido, necesitaba salir de ahí, quería consolarlo, pedirle perdón, por no haber cumplido su palabra de sacarlo de ese problema, quería consolarlo, abrazarlo y sobretodo besarlo, lo extrañaba demasiado.

-------------------------------------------------------

Poco a poco la gente empezó a retirarse, Narcisa ya había subido a su habitación acompañada de sus hijos, necesitaba descansar, ese baile la había dejado muy agotada.

Un hombre de aspecto aterrador se acercó a Lucius -ha servido de algo el joven al que mandé a tu casa?- preguntó con curiosidad-
Lucius enarco una ceja -por supuesto, te pague una muy buena cantidad de galeones para que lo consiguieras, por cierto de dónde lo sacaste, tenía una mala pinta- el extraño empezó a reír -es mi sobrino, viene de Irlanda, haya no tuvo suerte y se vino para acá, tiene un negocio de entretenimiento nocturno- contestó
-Realmente está embarazado?- preguntó
-si, se fue a vivir con un muchachito, que es el que le ayuda en su negocio, pero como no les ha ido tan bien, acepto ayudarme por unos pocos galeones-
-espero que nuestro acuerdo quedé solo entre nosotros - reprendió lucius
-tu no te preocupes, que nadie sabrá nada- y ambos levantaron sus copas y brindaron.

-------------------------------------------------------

Ginny estaba desesperada, ya habían pasado unos días y Harry no había vuelto a la hacienda, necesitaba verlo para llevar a cabo su plan de conquista, pero su madre no la dejaba ir al pueblo, siempre poniéndole excusas, que solo iba a estorbar, que Harry y Ron solo fueron a hacer negocios, que pronto iban a estar de vuelta, pero ella temia que Harry se enamorará de alguien más y que nunca pudiera fijarse en ella. Todas las noches lloraba viendo la Luna.

-------------------------------------------------------

Al día siguiente Harry se presentó en la mansión Malfoy, estaba ansioso, quería pasar más tiempo con ese bello joven, quería conquistarlo y quería que fuera solo suyo.
Lo recibió el patriarca - Harry es un honor tenerte aquí con nosotros, por favor podrías acompañarme a mi despacho?- y ambos hombres desaparecieron por el pasillo

-Dime lucius en que puedo ayudarte?-
-como bien sabes mi hijo te escogió a ti como su pretendiente- Harry se tenso- yo no tuve nada que ver en la decisión de mi hijo al invitarte a comer con nosotros, así que como tenemos un trato, necesito que me prestes una cantidad de galeones, tengo que sacar adelante a esta familia y mantener el nivel de vida al que Draco está acostumbrado no es fácil- la mirada de Lucius era altanera

-lo se lucius, y no te preocupes, ese fue el trato, más tarde haré la transferencia a tu bóveda- contestó, no podía creer el nivel de cinismo del señor malfoy, pero el también había tenido la culpa al haber hecho esa oferta.

-Excelente, pasemos entonces a la sala, mi familia nos debe de estar esperando.

Y así día a Día Harry visitaba esa Mansión, llevaba regalos y trataba de conquistar a Draco, aunque el era muy distante y frío, pero Harry no se desanimaba, pues creía que al tener una educación diferente, las muestras de amor no eran bien vistas si se hacían en público y casi siempre estaba presente la tía o la hermana de Draco.

Draco ya estaba cansado de fingir interés en ese joven, trataba siempre de estar acompañado para que no pasara más que una simple mirada o una sonrisa, pero esa tarde, estaban los dos solos en el Jardín

-Estas más serio que de costumbre- dijo Harry
Draco suspiro,- lo siento, esque estoy muy preocupado por la salud de mi madre- dijo cansado
-No te preocupes por ella, se pondrá bien, el nuevo tratamiento le está sentando mejor, yo la veo un poco más alegre- Harry le sonrió a Draco y tomo una de sus manos, al principio Draco se tenso pero en lugar de eso levantó la cara para encontrarse con esos ojos de esmeralda viendolo profundamente.
Si no hubiera estado tan lastimado esos hermosos ojos lo hubieran hipnotizado
-sabes, ya ha pasado un mes desde que empezamos a conocernos mejor -con su otra mano tomo su mejilla, está acción lo ruborizó un poco -y me preguntaba si quisieras ser formalmente mi novio Draco, si me dices que si, en este momento hablo con tus padres para formalizar la relación.
Draco sabía que ese momento llegaría, pero el echo de que el quisiera hablar con sus padres lo conmovió bastante.

-si Harry, si quiero ser tu novio- su sonrisa apenas fue visible, pero para Harry eso significó demasiado, con ambas manos tomo su delicado rostro y lo beso, al principio Draco quiso resistirse a responder el beso, al pequeño rose de sus labios, pero Harry lo quiso profundizar y Draco se vio un poco forzado a contestar ese beso, demasiado tímido para su gusto pero que poco a poco se volvió salvaje, sus magias comenzaron a mezclarse, esto asustó un poco a Draco que se separó inmediatamente de Harry muy apenado, su magia jamás había reaccionado así con Cedric.

-------------------------------------------------------

¡Vivan los novios!